Economía
Estrés laboral genera insatisfacción y baja productividad
El estrés es un serio problema a nivel social y económico, pues genera pérdidas considerables en el PIB de los países, afirma la OIT
PUEBLA, PUEBLA (29/ABR/2015).- El estrés laboral constituye un serio problema a nivel social y económico, ya que perjudica la salud del trabajador y por ende disminuye la productividad de las
empresas, de acuerdo con la Organización Internacional del Trabajo (OIT).
El organismo señaló que esto se traduce en un impacto económico que se estima puede causar pérdidas de entre el 0.5 por ciento y el 3.5 por ciento del Producto Interno Bruto (PIB) de los países.
El agotamiento crónico, la falta de motivación y confianza sobre la capacidad de llevar a cabo alguna tarea y finalmente un bajo rendimiento personal y profesional, se traduce en la incapacidad de lograr cualquier objetivo, apuntó.
Precisó que son algunos de los síntomas del llamado Síndrome de Desgaste Profesional, o síndrome del Burnout, un padecimiento derivado del estrés, que cada vez afecta a un mayor número de personas en todo el mundo.
Por otro lado, de acuerdo con la Secretaría de Salud, el estrés laboral también tiene serias afectaciones en las personas tanto a nivel físico como de salud y emocional, permeando de manera negativa en el desempeño de sus funciones y en su relación familiar.
En el marco del Día del Trabajo, que se conmemora cada 1 de mayo, diversas instituciones fomentan la reflexión sobre la importancia de equilibrar el desempeño laboral y familiar, con el objetivo de mantener la salud física y emocional de las familias mexicanas.
Destacan que fomentar una cultura de bienestar y equilibrio profesional y personal debe ser un tema prioritario de responsabilidad social para las empresas, ya que esto se verá reflejado en el estado de salud de los trabajadores.
Entre los principales problemas de salud derivados del estrés laboral se encuentran los físicos: dolor de cabeza, que puede ser intenso y constante, trastornos estomacales como gastritis y colitis, enfermedades cardiovasculares y obesidad que a su vez puede provocar enfermedades crónicas como la diabetes.
En tanto que entre los aspectos emocionales se encuentran: trastornos del sueño y dificultad para concentrarse, mal humor, bajo estado de ánimo, depresión y/o ansiedad e insatisfacción e incapacidad laboral.
El organismo señaló que esto se traduce en un impacto económico que se estima puede causar pérdidas de entre el 0.5 por ciento y el 3.5 por ciento del Producto Interno Bruto (PIB) de los países.
El agotamiento crónico, la falta de motivación y confianza sobre la capacidad de llevar a cabo alguna tarea y finalmente un bajo rendimiento personal y profesional, se traduce en la incapacidad de lograr cualquier objetivo, apuntó.
Precisó que son algunos de los síntomas del llamado Síndrome de Desgaste Profesional, o síndrome del Burnout, un padecimiento derivado del estrés, que cada vez afecta a un mayor número de personas en todo el mundo.
Por otro lado, de acuerdo con la Secretaría de Salud, el estrés laboral también tiene serias afectaciones en las personas tanto a nivel físico como de salud y emocional, permeando de manera negativa en el desempeño de sus funciones y en su relación familiar.
En el marco del Día del Trabajo, que se conmemora cada 1 de mayo, diversas instituciones fomentan la reflexión sobre la importancia de equilibrar el desempeño laboral y familiar, con el objetivo de mantener la salud física y emocional de las familias mexicanas.
Destacan que fomentar una cultura de bienestar y equilibrio profesional y personal debe ser un tema prioritario de responsabilidad social para las empresas, ya que esto se verá reflejado en el estado de salud de los trabajadores.
Entre los principales problemas de salud derivados del estrés laboral se encuentran los físicos: dolor de cabeza, que puede ser intenso y constante, trastornos estomacales como gastritis y colitis, enfermedades cardiovasculares y obesidad que a su vez puede provocar enfermedades crónicas como la diabetes.
En tanto que entre los aspectos emocionales se encuentran: trastornos del sueño y dificultad para concentrarse, mal humor, bajo estado de ánimo, depresión y/o ansiedad e insatisfacción e incapacidad laboral.
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