Economía
Están protegidos los fondos de 99% de la cuentas bancarias en México
El Fondo de Protección al Ahorro Bancario, contaba al cierre de 2009 con recursos por cuatro mil 525 millones de pesos
CIUDAD DE MÉXICO. El 99% de las cuentas de ahorro de los mexicanos están garantizadas en caso de que algún banco caiga en quiebra o entre en proceso de liquidación, de acuerdo con el Instituto para la Protección al Ahorro Bancario (IPAB). De presentarse ahora un problema de insolvencia financiera en alguna institución, hay garantía para cubrir por cada cuenta hasta un millón 756 mil 297.60 pesos; es decir, el equivalente a 400 mil Unidades de Inversión (Udi).
Así por ejemplo, si cayera en insolvencia el banco donde una persona tiene depositados mil pesos, el IPAB garantiza el pago total de sus recursos; pero si esa cuenta de ahorro acumulara dos millones de pesos, el ahorrador recibirá como máximo un millón 756 mil 297.60 pesos.
No obstante, y conforme a las últimas cifras del Banco de México (Banxico) que indican que el saldo promedio de una cuenta de ahorros en el país es de mil 954.05 pesos, los recursos del Fondo de Protección son suficientes para cubrir hasta 99% de las cuentas de ahorro.
El Fondo de Protección al Ahorro Bancario, que administra el IPAB, contaba al cierre de 2009 con recursos por cuatro mil 525 millones de pesos, provenientes de las cuotas de los 41 bancos que conforman al sistema financiero mexicano pagan al IPAB.
Con este fondo quedó superado el déficit por cuatro mil 993 millones de pesos en el que cayó en julio de 2002, luego que tuvo que responder al pago de las obligaciones garantizadas por la liquidación de los bancos Quadrum, Anáhuac, Industrial y Sureste.
La garantía a los depósitos en México es una de las mayores en el mundo; sin embargo, sólo protege los ahorros en bancos, excluyendo a las cajas de ahorro, uniones de crédito y demás instituciones no bancarias, a diferencia de lo que ocurre en Estados Unidos, Colombia y España.
Sin embargo, las últimas modificaciones a la Ley para regular las actividades de las sociedades cooperativas de ahorro y préstamo (LRASCAP) establecen que se constituirá un fondo para proteger los recursos del sector popular. Ese fondo tendrá como objeto fundamental, entre otras cosas, evitar que las sociedades cooperativas de ahorro y préstamo tengan problema financieros y para los socios garantizar los ahorros en caso de insolvencia de las mismas.
La diferencia de este fondo respecto del administrado por el IPAB es que éste será privado; no obstante, no se descarta la intervención del Gobierno en caso de ser necesario.
Así por ejemplo, si cayera en insolvencia el banco donde una persona tiene depositados mil pesos, el IPAB garantiza el pago total de sus recursos; pero si esa cuenta de ahorro acumulara dos millones de pesos, el ahorrador recibirá como máximo un millón 756 mil 297.60 pesos.
No obstante, y conforme a las últimas cifras del Banco de México (Banxico) que indican que el saldo promedio de una cuenta de ahorros en el país es de mil 954.05 pesos, los recursos del Fondo de Protección son suficientes para cubrir hasta 99% de las cuentas de ahorro.
El Fondo de Protección al Ahorro Bancario, que administra el IPAB, contaba al cierre de 2009 con recursos por cuatro mil 525 millones de pesos, provenientes de las cuotas de los 41 bancos que conforman al sistema financiero mexicano pagan al IPAB.
Con este fondo quedó superado el déficit por cuatro mil 993 millones de pesos en el que cayó en julio de 2002, luego que tuvo que responder al pago de las obligaciones garantizadas por la liquidación de los bancos Quadrum, Anáhuac, Industrial y Sureste.
La garantía a los depósitos en México es una de las mayores en el mundo; sin embargo, sólo protege los ahorros en bancos, excluyendo a las cajas de ahorro, uniones de crédito y demás instituciones no bancarias, a diferencia de lo que ocurre en Estados Unidos, Colombia y España.
Sin embargo, las últimas modificaciones a la Ley para regular las actividades de las sociedades cooperativas de ahorro y préstamo (LRASCAP) establecen que se constituirá un fondo para proteger los recursos del sector popular. Ese fondo tendrá como objeto fundamental, entre otras cosas, evitar que las sociedades cooperativas de ahorro y préstamo tengan problema financieros y para los socios garantizar los ahorros en caso de insolvencia de las mismas.
La diferencia de este fondo respecto del administrado por el IPAB es que éste será privado; no obstante, no se descarta la intervención del Gobierno en caso de ser necesario.
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