Economía
En la primera quincena de mayo hubo deflación
La inflación, medida a través del Índice Nacional de Precios al Consumidor (INPC), resultó en una deflación (baja) de -0.26% en la primera quincena de mayo
La inflación, medida a través del Índice Nacional de Precios al Consumidor (INPC), resultó en una deflación (baja) de -0.26% en la primera quincena de mayo, gracias a un descenso en los precios de la electricidad. La mala noticia es que el precio del sector alimentos sigue al alza; en un año, este sector ha subido 9.22 por ciento.
El Banco de México (Banxico) informó que la inflación subyacente, que ignora los precios volátiles, se incrementó 0.26% en los primeros 15 días de mayo, mientras que en el mismo lapso del año pasado el crecimiento fue de 0.10 por ciento.
Para BBVA Bancomer, en mayo las presiones por los altos precios de los energéticos estarán acotadas por la baja en las tarifas eléctricas, pero hacia delante será clave la magnitud de las alzas en las cotizaciones de los alimentos derivados del maíz y trigo.
El Banxico destacó en su informe que en el periodo analizado sobresalieron los aumentos en los precios del arroz, aceites y grasas vegetales comestibles. También tuvieron trayectoria alcista las loncherías, restaurantes y el transporte aéreo.
Tendencia duradera
Los altos precios de los alimentos no son una burbuja de corto plazo; la tendencia podría durar hasta 24 meses, aseguró el presidente de la Confederación Patronal de la República Mexicana (Coparmex), Ricardo González Sada.
Propuso una revisión de la política agrícola y alimentaria que incluya apoyos directos a los consumidores económicamente más vulnerables. También planteó liberar más cupos de importación de alimentos y vigilar que no haya prácticas de acaparamiento que pudieran distorsionar los precios al alza.
González Sada expuso que los subsidios a los consumidores con menores recursos se deben dar con transparencia, “que lleguen a su destino y que no se ofrezcan de una forma clientelar ni con fines políticos”.
Alertó que sería un error “meterle mano a los precios” de los alimentos, porque el país está en una situación en que por primera vez en muchos años su campo está recibiendo un pago que hace atractiva la producción agropecuaria.
Lo que se busca es que la canasta de alimentos básicos se mantenga en niveles por debajo de la inflación, generando la menor distorsión de precios para que se continúe con un incentivo, a fin de que haya una mayor producción, agregó.
El Banco de México (Banxico) informó que la inflación subyacente, que ignora los precios volátiles, se incrementó 0.26% en los primeros 15 días de mayo, mientras que en el mismo lapso del año pasado el crecimiento fue de 0.10 por ciento.
Para BBVA Bancomer, en mayo las presiones por los altos precios de los energéticos estarán acotadas por la baja en las tarifas eléctricas, pero hacia delante será clave la magnitud de las alzas en las cotizaciones de los alimentos derivados del maíz y trigo.
El Banxico destacó en su informe que en el periodo analizado sobresalieron los aumentos en los precios del arroz, aceites y grasas vegetales comestibles. También tuvieron trayectoria alcista las loncherías, restaurantes y el transporte aéreo.
Tendencia duradera
Los altos precios de los alimentos no son una burbuja de corto plazo; la tendencia podría durar hasta 24 meses, aseguró el presidente de la Confederación Patronal de la República Mexicana (Coparmex), Ricardo González Sada.
Propuso una revisión de la política agrícola y alimentaria que incluya apoyos directos a los consumidores económicamente más vulnerables. También planteó liberar más cupos de importación de alimentos y vigilar que no haya prácticas de acaparamiento que pudieran distorsionar los precios al alza.
González Sada expuso que los subsidios a los consumidores con menores recursos se deben dar con transparencia, “que lleguen a su destino y que no se ofrezcan de una forma clientelar ni con fines políticos”.
Alertó que sería un error “meterle mano a los precios” de los alimentos, porque el país está en una situación en que por primera vez en muchos años su campo está recibiendo un pago que hace atractiva la producción agropecuaria.
Lo que se busca es que la canasta de alimentos básicos se mantenga en niveles por debajo de la inflación, generando la menor distorsión de precios para que se continúe con un incentivo, a fin de que haya una mayor producción, agregó.
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