Economía

Efectos de la crisis, hasta 2011

El 13 de febrero, el Senado de Estados Unidos aprobó un paquete de estímulo económico por 787 mil millones de dólares

CIUDAD DE MÉXICO.- Más de la mitad del paquete de estímulo económico aprobado por el Congreso estadounidense tendrá un impacto en la economía hasta 2011, refirió Luis Fonserrada, director del Centro de Estudios Económicos del Sector Privado (CEESP).

El 13 de febrero, el Senado de Estados Unidos aprobó un paquete de estímulo económico por 787 mil millones de dólares; pero sólo 7% del paquete se traducirá en demanda efectiva en 2009, y 30% en 2010.

“El programa de Obama contiene un ingrediente muy importante de infraestructura... pero pasará mucho tiempo en efectuarse”, alertó Fonserrada, y destacó que en Estados Unidos, el desempleo en enero afectó 600 mil plazas, mientras que la cautela de los ciudadanos por no endeudarse impide que la venta de casas aumente.
El director del CEESP apuntó que en México se perdieron 105 mil empleos en enero.

Ante el comportamiento de la economía estadounidense, estimó que el Gobierno mexicano no podrá controlar la caída del Producto Interno Bruto (PIB), pero debe generar condiciones para proteger los empleos.

En el contexto del Foro México ante la Crisis, ¿Qué hacer para Crecer?, que fue organizado por el Senado de la República, el análisis económico del CEESP destaca que existe un consenso entre los diferentes actores del país de “aprovechar la coyuntura para realizar los cambios estructurales necesarios para que el país crezca”.

Sin embargo, abundó el organismo dependiente del Consejo Coordinador Empresarial (CCE), facultar al Banco de México (Banxico) para fijar las tasas de interés activas, como proponen legisladores, redundaría en la posibilidad de que las instituciones redujeran el financiamiento, lo que incidiría de manera negativa sobre el consumo y la inversión.   
En su opinión, hay medidas que hay que tomarlas con mayor reserva porque, aunque pueden tener un objetivo razonable, no son las más idóneas, tal es el caso de facultar al Banxico para fijar las tasas de interés activas.  

“Si bien se puede pensar que beneficiaría a los tenedores de créditos, su efecto más bien redundaría en la posibilidad de que los bancos redujeran el financiamiento, incidiendo negativamente sobre el consumo y la inversión, situación contraria a lo que se busca”. 

Según el análisis, es importante considerar que la brecha entre tasas pasivas y activas refleja en parte el riesgo que existe para otorgar un crédito, lo cual podría solventarse si se llevaran a cabo las reformas estructurales pendientes, toda vez que ello contribuiría a que el riesgo disminuyera.

Refiere que históricamente cualquier fijación de precios propicia escasez y la banca no es la excepción, por ello reitera su opinión de que la mejor medida anticíclica es concretar las reformas estructurales pendientes para estimular el crecimiento de la economía.  

Después del proceso de análisis de las propuestas para enfrentar la crisis que se recogieron de las sesiones del citado foro, los legisladores se convencieron de que no sólo un mayor gasto público es la solución para enfrentarla, sino que debe acompañarse de otras medidas que estimulen la eficiencia de la asignación de los recursos.

En este sentido, continúa, armaron un paquete de medidas que apoyarán en el Congreso para que se realicen los cambios necesarios lo más pronto posible y, con ello, aumente la posibilidad de enfrentar la crisis económica con mayor éxito.

Tal parece que el consenso de aprovechar la coyuntura para realizar los cambios estructurales necesarios para que el país crezca ha tomado fuerza, lo que sin duda significaría un gran avance para México, refiere en su reporte semanal “Análisis económico ejecutivo”.
Síguenos en

Temas

Sigue navegando