Economía
Boeing reporta ganancia neta de 586 MDD
Sus ingresos totales fueron de 14 mil 910 millones de dólares, el dos por ciento menos que el año anterior
NUEVA YORK, ESTADOS UNIDOS (27/ABR/2011).- El fabricante aeronáutico estadounidense Boeing informó que en el primer trimestre del año se anotó una ganancia neta de 586 millones de dólares, el 13 por ciento más que de enero a marzo de 2010.
Boeing, que superó así los pronósticos de los analistas, tuvo en ese periodo una ganancia neta por título de 78 centavos, por encima de lo pronosticado, que estaba más en línea con los 71 centavos obtenidos en el primer trimestre del pasado ejercicio, cuando ganó 519 millones de dólares.
Sus ingresos en estos tres primeros meses del año fueron de 14 mil 910 millones de dólares, el dos por ciento menos que el año anterior, cuando se anotó 15 mil 216 millones de dólares.
En la división de aeronáutica comercial los ingresos en ese periodo fueron de siete mil 118 millones, el cinco por ciento menos que en la misma fecha de hace un año, y en la de defensa se mantuvieron en siete mil 617 millones.
"Hemos realizado un buen inicio de año", afirmó el presidente y consejero delegado de Boeing, Jim McNerney, quien subrayó los "sólidos" resultados obtenidos, con "progresos significativos" en las pruebas con sus aeronaves de los modelos 787 y 747-8, así como por haber ganado un concurso de suministro con las fuerzas aéreas de Estados Unidos.
McNerney subrayó que sus "perspectivas siguen siendo positivas", al tiempo que reiteró el compromiso con sus clientes, ganar en competitividad y productividad, además de aumentar su cartera comercial. La firma, con sede en Chicago (Illinois), prevé cumplir sus compromisos para entregar el nuevo 787 Dreamliner en el tercer trimestre de este año.
A mediados de febrero el constructor aeronáutico dijo que a finales de año entregaría su primer 747-8 Intercontinental, una nueva versión del jet 747 con más capacidad de pasajeros y menos consumo de combustible, con lo que disminuirá también en el 16 por ciento las emisiones de dióxido de carbono por pasajero.
Las entregas de ese nuevo modelo de Boeing acumulan tres años de retraso debido, entre otras cuestiones, a la paralización de sus vuelos en pruebas el pasado noviembre después de que uno de ellos tuviera que hacer un aterrizaje de emergencia en Texas al llenarse de humo la cabina.
En las operaciones electrónicas previas a la apertura de la bolsa de Nueva York, las acciones de Boeing ganaban el 0.05 por ciento hasta 75.59 dólares por título, mientras que se han revalorizado el 15.77 por ciento en lo que va de año y el 0.56 por ciento en los últimos doce meses.
Boeing, que superó así los pronósticos de los analistas, tuvo en ese periodo una ganancia neta por título de 78 centavos, por encima de lo pronosticado, que estaba más en línea con los 71 centavos obtenidos en el primer trimestre del pasado ejercicio, cuando ganó 519 millones de dólares.
Sus ingresos en estos tres primeros meses del año fueron de 14 mil 910 millones de dólares, el dos por ciento menos que el año anterior, cuando se anotó 15 mil 216 millones de dólares.
En la división de aeronáutica comercial los ingresos en ese periodo fueron de siete mil 118 millones, el cinco por ciento menos que en la misma fecha de hace un año, y en la de defensa se mantuvieron en siete mil 617 millones.
"Hemos realizado un buen inicio de año", afirmó el presidente y consejero delegado de Boeing, Jim McNerney, quien subrayó los "sólidos" resultados obtenidos, con "progresos significativos" en las pruebas con sus aeronaves de los modelos 787 y 747-8, así como por haber ganado un concurso de suministro con las fuerzas aéreas de Estados Unidos.
McNerney subrayó que sus "perspectivas siguen siendo positivas", al tiempo que reiteró el compromiso con sus clientes, ganar en competitividad y productividad, además de aumentar su cartera comercial. La firma, con sede en Chicago (Illinois), prevé cumplir sus compromisos para entregar el nuevo 787 Dreamliner en el tercer trimestre de este año.
A mediados de febrero el constructor aeronáutico dijo que a finales de año entregaría su primer 747-8 Intercontinental, una nueva versión del jet 747 con más capacidad de pasajeros y menos consumo de combustible, con lo que disminuirá también en el 16 por ciento las emisiones de dióxido de carbono por pasajero.
Las entregas de ese nuevo modelo de Boeing acumulan tres años de retraso debido, entre otras cuestiones, a la paralización de sus vuelos en pruebas el pasado noviembre después de que uno de ellos tuviera que hacer un aterrizaje de emergencia en Texas al llenarse de humo la cabina.
En las operaciones electrónicas previas a la apertura de la bolsa de Nueva York, las acciones de Boeing ganaban el 0.05 por ciento hasta 75.59 dólares por título, mientras que se han revalorizado el 15.77 por ciento en lo que va de año y el 0.56 por ciento en los últimos doce meses.
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