Economía
Banxico no descarta retorno de volatilidad
Mencionan que es probable que la economía mexicana continúe enfrentando un entorno de mucha incertidumbre
CIUDAD DE MÉXICO (01/ABR/2016).- El Banco de México (
Banxico) no descartó que vuelva la volatilidad en los mercados financieros internacionales y ante los efectos sobre la economía nacional, advirtió que podría ajustar la tasa de interés.
Así lo establecieron los miembros de la junta de gobierno en la más reciente reunión de política monetaria en la que se dejó sin cambio la tasa de referencia y en la que estuvieron presentes el secretario de Hacienda, Luis Videgaray y el subsecretario del ramo, Fernando Aportela, según da cuenta la Minuta número 42 que difundió el banco central.
Todos advirtieron que, hacia adelante, no se puede descartar que la volatilidad financiera internacional vuelva a incrementarse. Un integrante mencionó que es probable que la economía mexicana continúe enfrentando un entorno de mucha incertidumbre.
Algunos destacaron que además de seguir tomando en cuenta la postura monetaria relativa entre México y Estados Unidos, hacia adelante no se puede descartar la posibilidad de un escenario de mayores riesgos e incertidumbre en los mercados financieros internacionales y su posible efecto sobre la economía doméstica.
Por ello, prevalece la posibilidad de que se realicen ajustes adicionales en la postura monetaria en México si la situación así lo amerita y en independencia de las acciones de la Reserva Federal, como por ejemplo ante un escenario de expectativas de inflación desalineadas con la meta.
Respecto a los factores que pueden contribuir a un escenario de mayor volatilidad, la mayoría mencionó el desbalance estructural entre la oferta y la demanda del petróleo, lo que podría afectar su precio.
También posibilidad de una descompresión desordenada de primas por plazo en los mercados financieros internacionales, ante la normalización esperada de la política monetaria en Estados Unidos.
La mayoría destacó como riesgo adicional la presencia de factores geopolíticos, principalmente el debate en torno a la permanencia del Reino Unido en la Unión Europea.
Algunos agregaron dentro de estas el proceso electoral en Estados Unidos y aunado a lo anterior, la mayoría alertó sobre la divergencia en las posturas de política monetaria entre las economías avanzadas, que ha generado reacomodos importantes en los portafolios de los inversionistas.
Uno de ellos precisó que, en relación con lo anterior, los bancos centrales, primordialmente en economías avanzadas, tienen incentivos para implementar políticas de relajamiento monetario competitivo.
Los cinco integrantes de la Junta apuntaron que en Estados Unidos, algunos indicadores sugieren una recuperación moderada de la actividad en el primer trimestre de 2016, ante el desvanecimiento de los factores transitorios que la afectaron al cierre de 2015 y el crecimiento del consumo. No obstante, tres miembros destacaron que aun así, la expansión de la economía continuó manteniéndose en niveles bajos. En este sentido, cuatro ponderaron que persiste la debilidad en el sector industrial, aunque se percibe una incipiente recuperación del manufacturero.
Así lo establecieron los miembros de la junta de gobierno en la más reciente reunión de política monetaria en la que se dejó sin cambio la tasa de referencia y en la que estuvieron presentes el secretario de Hacienda, Luis Videgaray y el subsecretario del ramo, Fernando Aportela, según da cuenta la Minuta número 42 que difundió el banco central.
Todos advirtieron que, hacia adelante, no se puede descartar que la volatilidad financiera internacional vuelva a incrementarse. Un integrante mencionó que es probable que la economía mexicana continúe enfrentando un entorno de mucha incertidumbre.
Algunos destacaron que además de seguir tomando en cuenta la postura monetaria relativa entre México y Estados Unidos, hacia adelante no se puede descartar la posibilidad de un escenario de mayores riesgos e incertidumbre en los mercados financieros internacionales y su posible efecto sobre la economía doméstica.
Por ello, prevalece la posibilidad de que se realicen ajustes adicionales en la postura monetaria en México si la situación así lo amerita y en independencia de las acciones de la Reserva Federal, como por ejemplo ante un escenario de expectativas de inflación desalineadas con la meta.
Respecto a los factores que pueden contribuir a un escenario de mayor volatilidad, la mayoría mencionó el desbalance estructural entre la oferta y la demanda del petróleo, lo que podría afectar su precio.
También posibilidad de una descompresión desordenada de primas por plazo en los mercados financieros internacionales, ante la normalización esperada de la política monetaria en Estados Unidos.
La mayoría destacó como riesgo adicional la presencia de factores geopolíticos, principalmente el debate en torno a la permanencia del Reino Unido en la Unión Europea.
Algunos agregaron dentro de estas el proceso electoral en Estados Unidos y aunado a lo anterior, la mayoría alertó sobre la divergencia en las posturas de política monetaria entre las economías avanzadas, que ha generado reacomodos importantes en los portafolios de los inversionistas.
Uno de ellos precisó que, en relación con lo anterior, los bancos centrales, primordialmente en economías avanzadas, tienen incentivos para implementar políticas de relajamiento monetario competitivo.
Los cinco integrantes de la Junta apuntaron que en Estados Unidos, algunos indicadores sugieren una recuperación moderada de la actividad en el primer trimestre de 2016, ante el desvanecimiento de los factores transitorios que la afectaron al cierre de 2015 y el crecimiento del consumo. No obstante, tres miembros destacaron que aun así, la expansión de la economía continuó manteniéndose en niveles bajos. En este sentido, cuatro ponderaron que persiste la debilidad en el sector industrial, aunque se percibe una incipiente recuperación del manufacturero.
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