Economía
Aumentan las remesas hacia Jalisco en el tercer trimestre de 2011
De julio a septiembre el envío de dólares se incrementa 13.26%, comparado con el mismo periodo de 2010
CIUDAD DE MÉXICO (02/NOV/2011).- Las remesas enviadas a Jalisco en el tercer trimestre de 2011 registraron un incremento de 13.26% al sumar 502.8 millones de dólares contra los 443.9 millones de dólares del mismo periodo de 2010.
En Jalisco se replicó la tendencia que mostró el resto de las entidades federativas de México, que registraron incrementos en la recepción de remesas en dólares durante el trimestre julio-septiembre comparado con igual periodo del año previo.
Entre las razones del incremento en los envíos se cuenta el alza en la colocación laboral de los migrantes jaliscienses, pero también la depreciación del peso, que incentivó un mayor número de remesas y mayores montos que lo habitual en dicho mes para aprovechar esta coyuntura.
“Los migrantes, al saber que los dólares que envían valdrán más ante un tipo de cambio mayor se ven incentivados a incrementar sus envíos de remesas”, manifestaron analistas de BBVA Research.
Para Rogelio Martínez Cárdenas, académico del Centro Universitario de Los Altos de la Universidad de Guadalajara, aunque incipiente, el aprovechamiento de la coyuntura cambiaria puede significar una mayor cultura financiera de los migrantes, pero también es posible que hable más de procesos locales como el regreso de los niños a la escuela, que demanda ingresos que pueden provenir de sus familiares en el extranjero.
“En mayo, se da un ‘pico’ similar por el Día de las Madres”.
En todo caso, el alza en las remesas es un regreso a los niveles anteriores a la crisis de 2008 y 2009 de la economía estadounidense.
“Para estas fechas de aquellos años las remesas cayeron, y ahora están volviendo a su nivel porque muchos de los trabajadores mexicanos han encontrado trabajo de nuevo”.
EL DATO
El envío de remesas representa cerca de 9.0% del total de ingresos por cuenta corriente de México, y es uno de los principales canales de transmisión de las condiciones del mercado laboral estadounidense a la economía de nuestro país.
La voz del experto
Impulso desde el mercado laboral
Jorge Durand (Antropólogo de la Universidad de Guadalajara)
El aumento en el envío de remesas familiares hacia México durante septiembre pasado, responde principalmente a factores de movimiento en el mercado laboral, indicó el antropólogo y profesor investigador del Departamento de Estudios Sobre los Movimientos Sociales de la Universidad de Guadalajara (UdeG), Jorge Durand.
El también doctor en Geografía y Ordenamiento Territorial por la Universidad de Toulouse, Francia, subrayó que otro factor de importancia para explicar el fenómeno es que la agricultura está en su mayor auge. “Es posible que se manden más remesas porque comienza el otoño, terminan las cosechas y un sector de la población que trabaja en el campo tiene más dinero”.
Además, aprovechan la ventaja diferencial que significa el tipo de cambio. “Los migrantes están atentos al tipo de cambio, es algo que siempre están checando, les rinde 20% más”.
La presión que existe sobre el mercado de trabajo en la población inmigrante que compite por una misma plaza se redujo sensiblemente.
La migración mexicana llegó a su tope en 2007, con siete millones, y comenzó a bajar de manera considerable. En 2010 había 6.5 millones de mexicanos migrantes en el país vecino, indicó Durand.
En Jalisco se replicó la tendencia que mostró el resto de las entidades federativas de México, que registraron incrementos en la recepción de remesas en dólares durante el trimestre julio-septiembre comparado con igual periodo del año previo.
Entre las razones del incremento en los envíos se cuenta el alza en la colocación laboral de los migrantes jaliscienses, pero también la depreciación del peso, que incentivó un mayor número de remesas y mayores montos que lo habitual en dicho mes para aprovechar esta coyuntura.
“Los migrantes, al saber que los dólares que envían valdrán más ante un tipo de cambio mayor se ven incentivados a incrementar sus envíos de remesas”, manifestaron analistas de BBVA Research.
Para Rogelio Martínez Cárdenas, académico del Centro Universitario de Los Altos de la Universidad de Guadalajara, aunque incipiente, el aprovechamiento de la coyuntura cambiaria puede significar una mayor cultura financiera de los migrantes, pero también es posible que hable más de procesos locales como el regreso de los niños a la escuela, que demanda ingresos que pueden provenir de sus familiares en el extranjero.
“En mayo, se da un ‘pico’ similar por el Día de las Madres”.
En todo caso, el alza en las remesas es un regreso a los niveles anteriores a la crisis de 2008 y 2009 de la economía estadounidense.
“Para estas fechas de aquellos años las remesas cayeron, y ahora están volviendo a su nivel porque muchos de los trabajadores mexicanos han encontrado trabajo de nuevo”.
EL DATO
El envío de remesas representa cerca de 9.0% del total de ingresos por cuenta corriente de México, y es uno de los principales canales de transmisión de las condiciones del mercado laboral estadounidense a la economía de nuestro país.
La voz del experto
Impulso desde el mercado laboral
Jorge Durand (Antropólogo de la Universidad de Guadalajara)
El aumento en el envío de remesas familiares hacia México durante septiembre pasado, responde principalmente a factores de movimiento en el mercado laboral, indicó el antropólogo y profesor investigador del Departamento de Estudios Sobre los Movimientos Sociales de la Universidad de Guadalajara (UdeG), Jorge Durand.
El también doctor en Geografía y Ordenamiento Territorial por la Universidad de Toulouse, Francia, subrayó que otro factor de importancia para explicar el fenómeno es que la agricultura está en su mayor auge. “Es posible que se manden más remesas porque comienza el otoño, terminan las cosechas y un sector de la población que trabaja en el campo tiene más dinero”.
Además, aprovechan la ventaja diferencial que significa el tipo de cambio. “Los migrantes están atentos al tipo de cambio, es algo que siempre están checando, les rinde 20% más”.
La presión que existe sobre el mercado de trabajo en la población inmigrante que compite por una misma plaza se redujo sensiblemente.
La migración mexicana llegó a su tope en 2007, con siete millones, y comenzó a bajar de manera considerable. En 2010 había 6.5 millones de mexicanos migrantes en el país vecino, indicó Durand.
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