Deportes
Sin un favorito claro
La paridad en la liga es de tal nivel, que nadie puede señalarse como el rival a vencer
GUADALAJARA, JALISCO (04/DIC/2012).- Cuando faltan cuatro partidos por disputar en el calendario 2012 de la NFL, no se puede señalar a ningún equipo como favorito claro para levantar el trofeo Vince Lombardi.
Ni siquiera a los dos equipos con récord de 11-1, como son los Halcones de Atlanta y los Texanos de Houston. O a los equipos donde juegan los hermanos Manning (Eli con los Gigantes, Peyton con los Broncos).
Aunque hay niveles entre los contendientes a llegar lejos en los playoffs y aquellos que no representan amenaza, nadie ha presentado los argumentos suficientes para ser considerado el rival a vencer durante enero y febrero.
Varios equipos hacen el intento. Denver tiene racha de siete victorias al hilo. Los Patriotas usualmente alcanzan su máximo potencial en noviembre y diciembre. Atlanta parece haber asegurado la ventaja de campo en la Conferencia Nacional. Y Houston podría hacer lo mismo si vence a Nueva Inglaterra la próxima semana.
Pese a todo, la respuesta es la misma. No hay favoritos claros.
“Hay diferentes tipos de campeonatos”, afirmó John Fox, coach de los Broncos, “tu división es el primero de ellos, todos quieren llegar a la corona de la conferencia, pero al final, el único que vale es el honor máximo”.
Lo que ha ocurrido en Denver es alentador, ya que los Broncos han ganado de formas diversas.
Peyton Manning sigue siendo la clave para que Denver aspire a volver a un Super Bowl, algo que no hace desde hace 14 años, cuando lo hicieron de la mano de John Elway.
Manning se siente cada vez más cómodo con su equipo y con el esquema de juego. Esto ayuda mucho para allanar el camino hacia Nueva Orleans.
Además, los Broncos tienen una defensiva sólida y una buena unidad de equipos especiales. Sin embargo, son un proyecto que apenas va madurando y que, si se acelera el proceso, quizá resultaría contraproducente.
“Le han pasado cosas buenas al equipo, debemos de esperar los resultados”, agregó Fox.
Nueva Inglaterra llegó a tener récord de 5-3 en 2011, luego ganó ocho al hilo, dos juegos de postemporada y perdió el Super Bowl XLVI ante los Gigantes de Nueva York.
Los Patriotas de nuevo se han embalado y no sería sorpresa si refrendan el título de la Conferencia Americana, aunque todavía tienen partidos claves ante Houston y San Francisco.
Tom Brady, el único quarterback con 10 títulos divisionales, está otra vez peleando por ser el Más Valioso.
El juego terrestre de los Patriotas es discreto, pero efectivo como siempre. Y, pese a la ausencia de un hombre clave como el ala cerrada Rob Gronkowski, Brady ha sabido resolver los problemas.
El talón de Aquiles quizá sería la defensiva, que cumplió apenas con el trámite el año pasado, pero que ahora se toparía con equipos más sólidos.
“Como coach, pienso que siempre vamos a tener que mejorar semana a semana y ese es nuestro objetivo”, confesó Matt Patricia, coordinador defensivo de Nueva Inglaterra.
Houston tiene una defensiva de miedo y es el equipo más balanceado de la Conferencia Americana.
Pero en su contra juega el hecho de la poca experiencia que tienen en postemporada, además de que las defensivas rivales podrían encontrar el antídoto para anular a Arian Foster y Andre Johnson, sus principales armas ofensivas.
Baltimore probablemente se mantendrá como campeón en la División Norte, pero en las últimas dos semanas han mostrado muchas deficiencias, que al final podría salirles caro.
Ron Rivera no baja los brazos
El entrenador de las Panteras de Carolina, Ron Rivera, no parece demasiado preocupado por la incertidumbre que rodea su continuidad y afirmó que está comprometido a usar jugadores jóvenes en las próximas cuatro semanas y prepararse con miras a la campaña 2013.
Pero está por verse si Rivera tendrá esa oportunidad con Carolina.
Con las Panteras flaqueando con foja de 3-9 y luego de una derrota el domingo ante el peor equipo de la NFL, Kansas City, Rivera claramente está en la mira.
“La gente dice: ‘Los estás preparando para el próximo coach’. Bueno, yo pienso que los estoy preparando para mí “, dijo Rivera. “Quizá me equivoque, pero no puedo preocuparme por eso”.
Rivera, en su segundo año como entrenador en jefe, dice que su objetivo es ganar los próximos cuatro partidos, comenzando el domingo cuando Carolina reciba a los Halcones de Atlanta, el equipo con el mejor récord en la NFL.
Rivera es popular entre los jugadores, pero el equipo ha pasado apuros para conseguir éxito, especialmente en partidos apretados, creando interrogantes sobre su habilidad para conducir en la hora decisiva. Algo que contrasta con lo que vio en su primer año, cuando llegó procedente de San Diego -donde era coordinador defensivo- y quedaron con marca de 6-10, tras una humillante foja de 2-14 en 2010, que los puso como el peor equipo de la NFL.
Las Panteras tienen un récord de 9-19 bajo Rivera, y marca de 1-12 en partidos decididos por siete puntos o menos.
FRASE
"Tenemos que disputar todavía un cuarto de la campaña, no hay que cantar victoria antes de tiempo".
John Fox, coach de Denver
POR CIERTO
Pittsburgh, amenaza latente
Los dos boletos de comodines en la Conferencia Americana estarían en manos de Indianápolis y Pittsburgh.
Si recuperan a todos sus lesionados, los Acereros podrían ser el caballo negro, entrando como sexto en la siembra y llegando al Super Bowl, tal y como lo hicieran hace siete años.
Ni siquiera a los dos equipos con récord de 11-1, como son los Halcones de Atlanta y los Texanos de Houston. O a los equipos donde juegan los hermanos Manning (Eli con los Gigantes, Peyton con los Broncos).
Aunque hay niveles entre los contendientes a llegar lejos en los playoffs y aquellos que no representan amenaza, nadie ha presentado los argumentos suficientes para ser considerado el rival a vencer durante enero y febrero.
Varios equipos hacen el intento. Denver tiene racha de siete victorias al hilo. Los Patriotas usualmente alcanzan su máximo potencial en noviembre y diciembre. Atlanta parece haber asegurado la ventaja de campo en la Conferencia Nacional. Y Houston podría hacer lo mismo si vence a Nueva Inglaterra la próxima semana.
Pese a todo, la respuesta es la misma. No hay favoritos claros.
“Hay diferentes tipos de campeonatos”, afirmó John Fox, coach de los Broncos, “tu división es el primero de ellos, todos quieren llegar a la corona de la conferencia, pero al final, el único que vale es el honor máximo”.
Lo que ha ocurrido en Denver es alentador, ya que los Broncos han ganado de formas diversas.
Peyton Manning sigue siendo la clave para que Denver aspire a volver a un Super Bowl, algo que no hace desde hace 14 años, cuando lo hicieron de la mano de John Elway.
Manning se siente cada vez más cómodo con su equipo y con el esquema de juego. Esto ayuda mucho para allanar el camino hacia Nueva Orleans.
Además, los Broncos tienen una defensiva sólida y una buena unidad de equipos especiales. Sin embargo, son un proyecto que apenas va madurando y que, si se acelera el proceso, quizá resultaría contraproducente.
“Le han pasado cosas buenas al equipo, debemos de esperar los resultados”, agregó Fox.
Nueva Inglaterra llegó a tener récord de 5-3 en 2011, luego ganó ocho al hilo, dos juegos de postemporada y perdió el Super Bowl XLVI ante los Gigantes de Nueva York.
Los Patriotas de nuevo se han embalado y no sería sorpresa si refrendan el título de la Conferencia Americana, aunque todavía tienen partidos claves ante Houston y San Francisco.
Tom Brady, el único quarterback con 10 títulos divisionales, está otra vez peleando por ser el Más Valioso.
El juego terrestre de los Patriotas es discreto, pero efectivo como siempre. Y, pese a la ausencia de un hombre clave como el ala cerrada Rob Gronkowski, Brady ha sabido resolver los problemas.
El talón de Aquiles quizá sería la defensiva, que cumplió apenas con el trámite el año pasado, pero que ahora se toparía con equipos más sólidos.
“Como coach, pienso que siempre vamos a tener que mejorar semana a semana y ese es nuestro objetivo”, confesó Matt Patricia, coordinador defensivo de Nueva Inglaterra.
Houston tiene una defensiva de miedo y es el equipo más balanceado de la Conferencia Americana.
Pero en su contra juega el hecho de la poca experiencia que tienen en postemporada, además de que las defensivas rivales podrían encontrar el antídoto para anular a Arian Foster y Andre Johnson, sus principales armas ofensivas.
Baltimore probablemente se mantendrá como campeón en la División Norte, pero en las últimas dos semanas han mostrado muchas deficiencias, que al final podría salirles caro.
Ron Rivera no baja los brazos
El entrenador de las Panteras de Carolina, Ron Rivera, no parece demasiado preocupado por la incertidumbre que rodea su continuidad y afirmó que está comprometido a usar jugadores jóvenes en las próximas cuatro semanas y prepararse con miras a la campaña 2013.
Pero está por verse si Rivera tendrá esa oportunidad con Carolina.
Con las Panteras flaqueando con foja de 3-9 y luego de una derrota el domingo ante el peor equipo de la NFL, Kansas City, Rivera claramente está en la mira.
“La gente dice: ‘Los estás preparando para el próximo coach’. Bueno, yo pienso que los estoy preparando para mí “, dijo Rivera. “Quizá me equivoque, pero no puedo preocuparme por eso”.
Rivera, en su segundo año como entrenador en jefe, dice que su objetivo es ganar los próximos cuatro partidos, comenzando el domingo cuando Carolina reciba a los Halcones de Atlanta, el equipo con el mejor récord en la NFL.
Rivera es popular entre los jugadores, pero el equipo ha pasado apuros para conseguir éxito, especialmente en partidos apretados, creando interrogantes sobre su habilidad para conducir en la hora decisiva. Algo que contrasta con lo que vio en su primer año, cuando llegó procedente de San Diego -donde era coordinador defensivo- y quedaron con marca de 6-10, tras una humillante foja de 2-14 en 2010, que los puso como el peor equipo de la NFL.
Las Panteras tienen un récord de 9-19 bajo Rivera, y marca de 1-12 en partidos decididos por siete puntos o menos.
FRASE
"Tenemos que disputar todavía un cuarto de la campaña, no hay que cantar victoria antes de tiempo".
John Fox, coach de Denver
POR CIERTO
Pittsburgh, amenaza latente
Los dos boletos de comodines en la Conferencia Americana estarían en manos de Indianápolis y Pittsburgh.
Si recuperan a todos sus lesionados, los Acereros podrían ser el caballo negro, entrando como sexto en la siembra y llegando al Super Bowl, tal y como lo hicieran hace siete años.
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