Deportes
Santos va por la sorpresa en el Super Bowl
Si gana Nueva Orleans, sería el primer Super Bowl de su existencia en su primera aparición
FORT LAUDERDALE, FLORIDA. - El primer día de febrero, los Santos de Nueva Orleans se estarán preparando para un partido, pero de ninguna manera de se trata de un equipo cualquiera en un juego cualquiera.
Resulta que el equipo -al que alguna vez sus aficionados llamaron Aints de manera despectiva por sus escasos logros, al tiempo que se colocaban bolsas sobre la cabeza en señal de vergüenza- se dirige ahora al sur de Florida para disputar el Super Bowl.
Históricamente uno de los mayores fracasos en la NFL, los Santos (15-3) están a la cabeza de la Conferencia Nacional. Si vencen a los Potros de Indianápolis el próximo domingo habrán conquistado su primer campeonato.
Por supuesto, ya cuentan con la eterna lealtad de los habitantes de Nueva Orleans debido en gran parte a su participación en la reconstrucción de la ciudad después de la devastación causada por el huracán Katrina en el 2005 y, por supuesto, a su proeza deportiva.
"Pienso que antes de venir aquí (en el 2006), quizá no se podía apreciar la relación, o qué tan cercano es el equipo para esta ciudad", dijo el entrenador en jefe de los Santos, Sean Payton. "Logísticamente ... los jugadores aquí están más cercanos y viven más entre la comunidad justo debido al trazo de esta región. Pero ha habido una base de aficionados que ha sido leal desde hace mucho tiempo", señaló.
"Y entonces después de algo tan devastador como Katrina, de tener al equipo tomando parte en el proceso de reconstrucción y de tener éxito, ciertamente, yo pienso, ayuda al espíritu de todos los involucrados", refirió. "Y creo que todos nosotros que hemos estado aquí y que no somos de aquí sentimos eso y lo apreciamos, y valoramos a los verdaderos aficionados de los Santos que se remontan a finales de la década de los 60s. Es bastante especial para ellos".
Pero los Santos también se han convertido en ídolos estadounidenses para casi todos, excepto los aficionados de los Potros y los apostadores; aunque incluso algunas personas que apoyan a Indy (16-2) para que gane su segundo título en cuatro años tienen un fuerte aprecio por los Santos.
"Viví en Nueva Orleans 39 años y estoy muy orgulloso de lo que han hecho los Santos", dijo Archie Manning, primer gran jugador de los Santos, y padre, por supuesto, de Peyton Manning, cuatro veces Jugador Más Valioso.
Y ocurre que Peyton es el mariscal de campo de Indy y el hombre a quien deben detener los Santos para tener oportunidad de conseguir su primer título de la liga en sus 43 años de existencia.
Archie Manning admitió que vio la celebración en Bourbon Street después de que los Santos derrotaron a los Vikingos el fin de semana pasado, y dijo que fue irresistiblemente fascinante.
El principal receptor de Manning, Reggie Wayne, creció en Nueva Orleans y también reconoce lo especial que es estar inmerso en estos buenos tiempos. "Es como decían mis amigos en la semana seis: Potros vs. Santos en el Super Bowl. Que gane el mejor".
Que Estados Unidos esté contando a los Santos entre los mejores de la NFL es casi una herejía. Esta es una franquicia con un total de 10 juegos de postemporada, cuatro desde que Payton se convirtió en entrenador. Tan solo Manning ha participado en 17; tiene marca de 9-8, pero ya cuenta con un título de Super Bowl, ganado en Miami hace tres años. La única victoria de los Santos en postemporada antes del 2006 ocurrió en el 2000. Y ahora quieren saborear de nuevo el triunfo, no un triunfo cualquiera.
Resulta que el equipo -al que alguna vez sus aficionados llamaron Aints de manera despectiva por sus escasos logros, al tiempo que se colocaban bolsas sobre la cabeza en señal de vergüenza- se dirige ahora al sur de Florida para disputar el Super Bowl.
Históricamente uno de los mayores fracasos en la NFL, los Santos (15-3) están a la cabeza de la Conferencia Nacional. Si vencen a los Potros de Indianápolis el próximo domingo habrán conquistado su primer campeonato.
Por supuesto, ya cuentan con la eterna lealtad de los habitantes de Nueva Orleans debido en gran parte a su participación en la reconstrucción de la ciudad después de la devastación causada por el huracán Katrina en el 2005 y, por supuesto, a su proeza deportiva.
"Pienso que antes de venir aquí (en el 2006), quizá no se podía apreciar la relación, o qué tan cercano es el equipo para esta ciudad", dijo el entrenador en jefe de los Santos, Sean Payton. "Logísticamente ... los jugadores aquí están más cercanos y viven más entre la comunidad justo debido al trazo de esta región. Pero ha habido una base de aficionados que ha sido leal desde hace mucho tiempo", señaló.
"Y entonces después de algo tan devastador como Katrina, de tener al equipo tomando parte en el proceso de reconstrucción y de tener éxito, ciertamente, yo pienso, ayuda al espíritu de todos los involucrados", refirió. "Y creo que todos nosotros que hemos estado aquí y que no somos de aquí sentimos eso y lo apreciamos, y valoramos a los verdaderos aficionados de los Santos que se remontan a finales de la década de los 60s. Es bastante especial para ellos".
Pero los Santos también se han convertido en ídolos estadounidenses para casi todos, excepto los aficionados de los Potros y los apostadores; aunque incluso algunas personas que apoyan a Indy (16-2) para que gane su segundo título en cuatro años tienen un fuerte aprecio por los Santos.
"Viví en Nueva Orleans 39 años y estoy muy orgulloso de lo que han hecho los Santos", dijo Archie Manning, primer gran jugador de los Santos, y padre, por supuesto, de Peyton Manning, cuatro veces Jugador Más Valioso.
Y ocurre que Peyton es el mariscal de campo de Indy y el hombre a quien deben detener los Santos para tener oportunidad de conseguir su primer título de la liga en sus 43 años de existencia.
Archie Manning admitió que vio la celebración en Bourbon Street después de que los Santos derrotaron a los Vikingos el fin de semana pasado, y dijo que fue irresistiblemente fascinante.
El principal receptor de Manning, Reggie Wayne, creció en Nueva Orleans y también reconoce lo especial que es estar inmerso en estos buenos tiempos. "Es como decían mis amigos en la semana seis: Potros vs. Santos en el Super Bowl. Que gane el mejor".
Que Estados Unidos esté contando a los Santos entre los mejores de la NFL es casi una herejía. Esta es una franquicia con un total de 10 juegos de postemporada, cuatro desde que Payton se convirtió en entrenador. Tan solo Manning ha participado en 17; tiene marca de 9-8, pero ya cuenta con un título de Super Bowl, ganado en Miami hace tres años. La única victoria de los Santos en postemporada antes del 2006 ocurrió en el 2000. Y ahora quieren saborear de nuevo el triunfo, no un triunfo cualquiera.
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