Deportes

Rusia 2018 y Qatar 2022

FIFA sorprende al anunciar las sedes de los siguientes Mundiales después de Brasil 2014

ZURICH, SUIZA (03/DIC/2010).- La FIFA envió la Copa del Mundo a nuevos horizontes, al otorgarle a Rusia la sede del torneo de 2018 y a Qatar la de 2022.

La selección de Rusia se produjo a pesar de la ausencia del primer ministro Vladimir Putin, aunque su influencia tuvo un impacto en los 22 votantes del comité ejecutivo de la FIFA, que lo eligieron por encima de Inglaterra, España-Portugal y Holanda-Bélgica.

Qatar será el país más pequeño que organiza un Mundial, y el primero del Medio Oriente, pero cuenta con un poder económico inigualable. Su candidatura superó las preocupaciones por el calor del desierto y derrotó a Estados Unidos 14-8 en la última ronda de la votación.

Estados Unidos y Australia eran los favoritos junto con Qatar. Corea del Sur y Japón también perdieron en la votación.

"Nos vamos a territorios nuevos", comentó el presidente de la FIFA, Joseph Blatter.

Usualmente criticada por tomar decisiones conservadores, la FIFA decidió apostar por Europa Oriental y el Golfo Pérsico, en vez de irse a la segura con Inglaterra y Estados Unidos, dos países que garantizaban éxitos deportivo y comercial.

La decisión sin duda provocará controversia, especialmente luego de las acusaciones de corrupción que provocaron la suspensión de dos de los 24 miembros del comité ejecutivo.

Inglaterra fue eliminada en la primera ronda de la votación para 2018, al conseguir apenas dos de los 22 votos. En la segunda, Rusia ganó con una mayoría absoluta de 13 votos sobre España/Portugal.
"Es una gran victoria", indicó el director ejecutivo de la candidatura rusa, Alexey Sorokin. Putin de inmediato abordó un avión hacia Zurich para festejar el triunfo.

Luego de tres días de ansiedad en los que Inglaterra envió al primer ministro David Cameron, al príncipe Guillermo y a David Beckham para cabildear, y Estados Unidos contó con el ex presidente Bill Clinton, ninguno pudo competir con la novedad que prometieron Qatar y Rusia.

Una nueva Rusia

Muchos creían que la candidatura de Rusia estaba condenada al fracaso, tras el anuncio de Putin de que no acudiría a la presentación final.

Sin embargo, triunfó en parte gracias a las garantías gubernamentales de Moscú y, al igual que Qatar, cuenta con grandes recursos naturales para financiar el proyecto.

"Estamos construyendo una nueva Rusia", indicó el viceprimer ministro ruso, Igor Shuvalov, en la presentación.

Tras llegar a Zurich directamente de Moscú, Putin dijo en rueda de prensa que la Copa Mundial le permitirá a Rusia cambiar su mala imagen de la Guerra Fría.

"Muchos estereotipos arraigados de tiempos pasados, de la era de la Guerra Fría, vuelan por Europa, y atemorizan a la gente", expresó el primer ministro ruso mediante un intérprete.

Putin afirmó que los aficionados viajarán a su país para ver los partidos y descubrirán una realidad diferente.

A la pregunta sobre su estrategia aparentemente extraña, Putin dijo que actuó así para aliviar la presión sobre los miembros votantes de la FIFA, algunos de los cuales han sido señalados por presunta corrupción. "Hice esto por respeto a ellos".

En el desierto de Medio Oriente

"Gracias por creer en el cambio", dijo el emir de Qatar, el jeque Hamad bin Khalifa Al-Thani.
Qatar realizará el Mundial en Doha y sus alrededores, en medio del desierto ydel calor del verano, pero prometió contar con tecnología para enfriar los estadios y las zonas donde se reúnen los aficionados a ver los partidos.

El jefe médico de la FIFA, Michel D'Hooghe, prepara un informe sobre los riesgos del calor y otras condiciones extremas, pero ayer rehusó comentar sobre su postura.

"Tengo que pensarlo y hablarlo con gente en el momento adecuado", indicó el belga.
D'Hooghe criticó el Mundial de Estados Unidos 1994 porque se disputaron partidos a mediodía y por la tarde en lugares calurosos como Florida, Texas y California.

Tras la eliminación de Australia, Japón y Corea del Sur, el duelo final fue entre Estados Unidos -que prometió grandes ganancias en un mercado en crecimiento- y el nuevo territorio en la región del Golfo, que cuenta con inagotables recursos económicos del petróleo a pesar de la crisis financiera mundial.

En los centros comerciales en Doha, la gente se reunió en las tiendas de artículos electrónicos para ver la votación por televisión. Las tiendas y los restaurantes se paralizaron cuando se anunció el resultado, y hubo una gran celebración cuando Blatter sacó del sobre un papel con el nombre "Qatar".

Qatar le había pedido a la FIFA que hiciera una "osada apuesta" e insistió que el calor del desierto no será un problema.

"Trabajamos muy duro los dos últimos años para llegar a este punto", indicó Al-Thani. "Hoy celebramos, pero el trabajo empieza mañana. Sabemos que tenemos mucho que hacer, pero también cumpliremos con nuestra promesa y lo lograremos".

Durante toda su candidatura, destacó que el pequeño país cuenta con el dinero, los recursos y la tecnología para superar cualquier problema de logística.

El torneo se realizaría cuando las temperaturas en Qatar pueden superar los 48 grados centígrados. El comité encargado de inspeccionar las candidaturas destacó el posible riesgo del calor.

Sin embargo, Qatar recordó que los mundiales de México 1986 y Estados Unidos 1994 también se disputaron con climas calurosos y fueron éxitos deportivos.

Inversión millonaria

Qatar prometió gastar 50 mil millones de dólares en infraestructura y cuatro mil millones para construir nueve estadios y remodelar otros tres. Ningún estadio estaría a más de una hora del otro, y muchos serían desmantelados después del torneo para donarlos a países pobres.

Uno de los puntos fuertes de la candidatura de Qatar fue que el torneo ayudaría a unir una región dividida por conflictos.


Nuevos mercados

Cuatro sedes nuevas en 20 años


En 2002, Corea del Sur y Japón rompieron moldes en la historia mundialista. Fue la primera cita organizada por dos países, la primera fuera de Europa y América, y la primera en Asia. También otro paso más en un enorme proceso de globalización y apertura de nuevos mercados por parte de la FIFA. Entre las seis últimas sedes designadas para acoger un Mundial (entre 2002 y 2022), cuatro han sido primerizas: junto a Corea y Japón, debutó Sudáfrica en 2010 y lo harán Rusia y Qatar. Alemania (2006) y Brasil (2014) son viejos conocidos. Pero el fenómeno no es solo futbolístico. Entre los cinco últimos países elegidos como Olímpicos, dos novatos: China (2008) y Brasil (2016).



Llora la Península Ibérica
Cero y van tres decepciones seguidas para España

Una nueva decepción sufrió España. La candidatura ibérica, España y Portugal, que buscaba albergar el Mundial del 2018 no pudo contra Rusia.

Madrid cayó derrotada en dos ocasiones en su intento por albergar los Juegos Olímpicos de 2012 y 2016, perdió ante Londres y Río de Janeiro.

La fórmula hispano-lusa se une como la tercera derrota que sufren los españoles en su intento por organizar un evento deportivo de grandes dimensiones, que fue destacada por los medios de ese país.
"Decepción Ibérica. El comité ejecutivo de la FIFA designó como sede a Rusia, tras una votación que se alargó más tiempo de lo esperado y cuyo veredicto se filtró a la prensa antes de que Joseph Blatter subiese al estrado", publicó el diario Marca.

Mientras que el Sport redactó; "El sueño español de organizar su segundo Mundial de la historia, tendrá que esperar después de que nos hayamos quedado con la miel en los labios".

El diario As publicó en su versión electrónica "Rusia 2018. Triunfaron dos países que no organizaron nunca el Campeonato del Mundo. Sólo hubo dos votaciones para la edición de 2018: en la primera ganó Inglaterra y en la segunda ganó Rusia".
Síguenos en

Temas

Sigue navegando