Deportes
Rossi logra el mejor tiempo en entrenamientos libres
El motociclista italiano, Valentino Rossi, marcó el mejor tiempo previo a la disputa del Gran Premio de Estados Unidos
Sin embargo, no fue hasta el último giro cuando Rossi le arrebató el mejor tiempo de entrenamientos al español Jorge Lorenzo (Yamaha YZR M 1), quien el año pasado apenas pudo rodar en este circuito al caer en las primeras vueltas de la carrera.
Aunque por momentos el viento se convirtió en protagonista en esta árida zona de Estados Unidos, el calor fue uno de los condicionantes a la hora de exprimir al máximo el potencial de las monturas de MotoGP.
Los problemas físicos que arrastra desde hace un par de grandes premios el australiano Casey Stoner (Ducati Desmosedici) no pesaron demasiado en su rendimiento ya que obtuvo la tercera plaza final.
Stoner tuvo un ligero despiste que le hizo salirse de la pista, aunque evitó la caída, lo que no sucedió con su compatriota Chris Vermeulen (Suzuki GSV RR), que acabó por los suelos aunque pudo continuar los entrenamientos con la segunda moto.
Lorenzo fue de los primeros en acercarse a la frontera del minuto y 21 segundos aunque al final acabó siendo Rossi el que marcó la pauta con su 1:21.891.
Con todo, el tiempo de Rossi se encuentra todavía a más de un segundo y dos décimas del mejor registro de Casey Stoner, quien en las dos últimas temporadas ha sido el piloto más rápido en las jornadas de entrenamientos realizadas en Laguna Seca.
Por su parte, el español Daniel Pedrosa (Honda RC 212 V) comenzó desde atrás para llegar hasta la sexta plaza y, en el tramo final de los entrenamientos, volvió a ser el piloto eficaz de otras veces para auparse hasta la cuarta plaza, si bien su tiempo todavía dista unas décimas importantes del trío de cabeza.
El siguiente clasificado fue otro español, Toni Elías, al que el circuito de Laguna Seca se le da bastante bien y esta vez sí pudo exprimir casi al máximo el potencial de su Honda.
No estuvo tan afortunado Sete Gibernau, quien en una pista que es muy complicada y exigente acabó decimoquinto y muy lejos de los hombres de cabeza.
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