Deportes
Provocan jaqueca crónica a ‘El Pelado’ Díaz
El técnico y los jugadores se empeñan en culpar a los árbitros de su poca productividad
CIUDAD DE MÉXICO.- El
América de
Ramón Díaz ni más agresivo y sí con las desatenciones defensivas que no lo dejan salir de la mediocridad, por más que el técnico y los jugadores se empeñen en culpar a los árbitros de su poca productividad.
Lo impredecible de las Águilas mantiene con jaqueca crónica al argentino, quien por más que mueve sus piezas, no encuentra el equilibrio para no terminarse a mordiscos las uñas, en espera de conservar un empate (1-1) que le debió saber a victoria.
Díaz intentó darle mayor orden a su zaga al iniciar el encuentro con una línea de tres centrales. Pero las fallas en la zona baja americanista nada tienen que ver con la estrategia, son un problema de calidad.
Sin Sebastián Domínguez, suspendido por expulsión, la responsabilidad de ordenar a la débil línea amarilla recayó en Ismael Rodríguez. Nada. Los mismos descuidos de otros partidos con la suerte de que los ofensivos visitantes no lograron concretar.
Chato el ataque del Morelia y mezquina la zaga americanista, ambas escuadras se pasaron demasiados minutos en imprecisiones que hicieron del primer tiempo un somnífero.
Treinta segundos después de iniciado el complemento, Esqueda despertó al Azteca con un cabezazo. El chico respondió a su técnico, quien lo postuló para el Tri.
Rodríguez falló al cometer un penalti sobre Mauricio Romero y no contento con ello reclamó hasta ganarse la expulsión.
Fernando Salazar marcó el empate desde el manchón (69’). “Esperamos que en el futuro podamos acomodarnos mejor para entrar más rápido al juego”, comentó Díaz. “El partido estaba parejo, pero el árbitro (Chacón) condicionó todo con la expulsión”, agregó el técnico.
El Morelia, sin tranquilidad para definir ante Ochoa, y el América enmarañado por sus errores, esos que una vez más harán que
El Pelado trabaje doble en busca de remediarlos.
Lo impredecible de las Águilas mantiene con jaqueca crónica al argentino, quien por más que mueve sus piezas, no encuentra el equilibrio para no terminarse a mordiscos las uñas, en espera de conservar un empate (1-1) que le debió saber a victoria.
Díaz intentó darle mayor orden a su zaga al iniciar el encuentro con una línea de tres centrales. Pero las fallas en la zona baja americanista nada tienen que ver con la estrategia, son un problema de calidad.
Sin Sebastián Domínguez, suspendido por expulsión, la responsabilidad de ordenar a la débil línea amarilla recayó en Ismael Rodríguez. Nada. Los mismos descuidos de otros partidos con la suerte de que los ofensivos visitantes no lograron concretar.
Chato el ataque del Morelia y mezquina la zaga americanista, ambas escuadras se pasaron demasiados minutos en imprecisiones que hicieron del primer tiempo un somnífero.
Treinta segundos después de iniciado el complemento, Esqueda despertó al Azteca con un cabezazo. El chico respondió a su técnico, quien lo postuló para el Tri.
Rodríguez falló al cometer un penalti sobre Mauricio Romero y no contento con ello reclamó hasta ganarse la expulsión.
Fernando Salazar marcó el empate desde el manchón (69’). “Esperamos que en el futuro podamos acomodarnos mejor para entrar más rápido al juego”, comentó Díaz. “El partido estaba parejo, pero el árbitro (Chacón) condicionó todo con la expulsión”, agregó el técnico.
El Morelia, sin tranquilidad para definir ante Ochoa, y el América enmarañado por sus errores, esos que una vez más harán que
El Pelado trabaje doble en busca de remediarlos.
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