Deportes
Polémico triunfo de Pacquiao sobre Márquez
El púgil filipino se impone por puntos al mexicano y retiene el título Welter de la OMB
LAS VEGAS, NEVADA (12/NOV/2011).- Una vez más los jueces vieron una pelea distinta a la mayoría y le dieron el triunfo a Manny Pacquiao, por decisión mayoritaria, sobre el mexicano Juan Manuel Márquez que dio la pelea de su vida y exhibió durante los 12 capítulos al púgil filipino que retuvo su corona Welter de la Organización Mundial de Boxeo.
Las polémicas tarjetas de los jueces le dieron un triunfo muy discutido, el primero apuntó 114-114, el segundo 115-113 para Pacquiao y el último fue 116-112 en favor del “Pacman”; al escuchar la decisión los aficionados, en su mayoría mexicanos, comenzaron a gritar: “¡Fraude, fraude!”.
El MGM Grand de Las Vegas fue el escenario de una de las mejores peleas de Juan Manuel Márquez, cuya estrategia fue siempre esperar y anticipar a los movimientos de Manny Pacquiao, que en todo momento estuvo incómodo y no supo descifrar nunca la pelea que le planteó el mexicano.
Pacquiao probó la “Dinamita” de Márquez. La mano derecha del mexicano estalló muchas veces en el rostro del filipino. El púbico se volvía loco con la excelsa actuación del capitalino en un combate que seguramente será la pelea del año.
La velocidad de Manny fue maniatada por la inteligencia y paciencia de Juan Manuel, que se adelantaba a cada uno de sus movimientos como si supiera perfectamente lo que iba a hacer el tagalo. El rostro de Pacquiao reflejó el efectivo castigo que le aplicaba el mexicano, sangraba por la boca, tenía el pómulo hinchado y sus manos ya no estaban en guardia tan alta por el cansancio evidente.
Juan Manuel, como en la pasada pelea, no pudo culminar la obra y la decisión cayó en las tarjetas y con el revés en ellas el rostro del mexicano cambió a una inmensa desilusión, misma que se extendió por todo México.
Las polémicas tarjetas de los jueces le dieron un triunfo muy discutido, el primero apuntó 114-114, el segundo 115-113 para Pacquiao y el último fue 116-112 en favor del “Pacman”; al escuchar la decisión los aficionados, en su mayoría mexicanos, comenzaron a gritar: “¡Fraude, fraude!”.
El MGM Grand de Las Vegas fue el escenario de una de las mejores peleas de Juan Manuel Márquez, cuya estrategia fue siempre esperar y anticipar a los movimientos de Manny Pacquiao, que en todo momento estuvo incómodo y no supo descifrar nunca la pelea que le planteó el mexicano.
Pacquiao probó la “Dinamita” de Márquez. La mano derecha del mexicano estalló muchas veces en el rostro del filipino. El púbico se volvía loco con la excelsa actuación del capitalino en un combate que seguramente será la pelea del año.
La velocidad de Manny fue maniatada por la inteligencia y paciencia de Juan Manuel, que se adelantaba a cada uno de sus movimientos como si supiera perfectamente lo que iba a hacer el tagalo. El rostro de Pacquiao reflejó el efectivo castigo que le aplicaba el mexicano, sangraba por la boca, tenía el pómulo hinchado y sus manos ya no estaban en guardia tan alta por el cansancio evidente.
Juan Manuel, como en la pasada pelea, no pudo culminar la obra y la decisión cayó en las tarjetas y con el revés en ellas el rostro del mexicano cambió a una inmensa desilusión, misma que se extendió por todo México.
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