Deportes
Padre de Salvador Cabañas rememora 'un año terrible' después del atentado
Considera que el futbolista 'volvió a nacer' luego de recibir el disparo en la cabeza
"Pasamos un año terrible porque primero ese señor (el ex apoderado de Cabañas), en quien confiábamos demasiado, nos hizo lo que hizo, no le interesaba la vida de Salvador, solo la plata, apenas salió de terapia intensiva y él ya venía con papeles tras papeles a hacerle firmar", dijo.
Agregó que el manager, José María González (actualmente en prisión por una demanda que le hizo la esposa de Cabañas, por supuesta estafa) les mintió y que cuando sucedió el hecho tuvieron que recurrir a otras personas para conseguir el pasaje e ir a México.
Su progenitor fue entrevistado este martes por un medio radial y ejn su mensaje no pudo ocultar su pesar por lo ocurrido, varias veces con voz quebrada, aunque resaltó entre otros aspectos que "Salvador nació otra vez, es un niño otra vez en la familia, estamos felices de que esté con nosotros".
El padre del ex jugador relató que Salvador hace bromas con su madre, con sus hermanos, todos los días, y que detrás de la tragedia que representó la herida recibida en la cabeza, de la operación, tratamiento y convalecencia, hay que rescatar algunas cosas positivas.
Dionisio Cabañas, además, destacó que su esposa, la madre de Salvador, "ya intuía las intenciones de González e inclusive llegó a advertirle sobre sus dudas" y expuso malestar por la postura del club América, que también está en pleito judicial con el jugador.
Salvador Cabañas, con 29 años a cuestas y con una bala en la cabeza que los médicos no le pudieron extraer, difícilmente podrá volver a jugar futbol en forma profesional, su recuperación se produce lentamente, aunque sigue trabajando intensamente para ello.
"El puede meterse a la cancha, pegarle a la pelota, incluso con la cabeza y no le va a pasar nada. No sé si se podrá recuperar totalmente la parte cognitiva tiene que ver con su táctica, su equilibrio y agresividad o no en un partido", según el médico mexicano Ernesto Martínez.
A su vez, el neurólogo paraguayo que le atiende, Celso Fretes, sostuvo que "la evolución a nivel cognitivo puede continuar, están muy bien identificados los puntos de memoria y atención, también puede seguir mejorando en la parte física desde lo neurológico".
Según Fretes, se debe decir claramente que "Salvador no es una persona inhábil o incapaz, su discapacidad es muy leve", dejando de lado comentarios que se originaron en México, de que tenía déficit mental que lo volvía inhábil.
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