Deportes
Monterrey es una olla de presión
La tensión en el campamento de Rayados llega al máximo cuando los aficionados empiezan a insultar a los jugadores
MONTERREY, NUEVO LEÓN.- La tensión en el campamento de Rayados del Monterrey se elevó este martes y ante ello, sin dar razón alguna, los jugadores del equipo regiomontano determinaron no hacer declaraciones ante los medios de comunicación "hasta nuevo aviso".
El entrenamiento de hoy parecía como cualquier otro, pero un minúsculo grupo de aficionados que entró a las instalaciones de El Barrial para ver la práctica comenzó a insultar a los jugadores, por lo cual Jesús Arellano trató de tranquilizar la situación.
Los pocos seguidores que tuvieron ese comportamiento fueron sacados de las instalaciones y fuera de ellas arrojaron huevos hacia el estacionamiento, mientras el entrenamiento siguió su curso.
Cuando parecía que no habría ninguna otra sorpresa, de los vestidores salió el jefe de prensa del club, Everardo Valdez, quien aseveró que "me comentó el capitán Jesús Arellano, en representación del plantel de jugadores, que determinaron en conjunto no dar más declaraciones hasta nuevo aviso, a ningún medio de comunicación".
Añadió que los jugadores no dieron a conocer los motivos de la decisión y reiteró que ésa era la determinación de los integrantes del conjunto regiomontano.
Se debe recordar que Rayados atraviesa un mal momento en el Torneo Apertura 2008 y actualmente se prepara para enfrentar el clásico regiomontano contra Tigres, el cual se disputará el próximo sábado en el Estadio Tecnológico.
En ese encuentro, Monterrey buscará retornar a la victoria en el actual certamen, en virtud de que llevan cinco jornadas sin ganar, luego que el último triunfo se dio en la fecha siete.
Como locales, la última victoria fue precisamente en dicha jornada, luego que en la novena perdieron 0-4 con Morelia, en la décima primera cayeron 1-2 ante Jaguares y en cinco partidos sólo han conseguido dos puntos.
El entrenamiento de hoy parecía como cualquier otro, pero un minúsculo grupo de aficionados que entró a las instalaciones de El Barrial para ver la práctica comenzó a insultar a los jugadores, por lo cual Jesús Arellano trató de tranquilizar la situación.
Los pocos seguidores que tuvieron ese comportamiento fueron sacados de las instalaciones y fuera de ellas arrojaron huevos hacia el estacionamiento, mientras el entrenamiento siguió su curso.
Cuando parecía que no habría ninguna otra sorpresa, de los vestidores salió el jefe de prensa del club, Everardo Valdez, quien aseveró que "me comentó el capitán Jesús Arellano, en representación del plantel de jugadores, que determinaron en conjunto no dar más declaraciones hasta nuevo aviso, a ningún medio de comunicación".
Añadió que los jugadores no dieron a conocer los motivos de la decisión y reiteró que ésa era la determinación de los integrantes del conjunto regiomontano.
Se debe recordar que Rayados atraviesa un mal momento en el Torneo Apertura 2008 y actualmente se prepara para enfrentar el clásico regiomontano contra Tigres, el cual se disputará el próximo sábado en el Estadio Tecnológico.
En ese encuentro, Monterrey buscará retornar a la victoria en el actual certamen, en virtud de que llevan cinco jornadas sin ganar, luego que el último triunfo se dio en la fecha siete.
Como locales, la última victoria fue precisamente en dicha jornada, luego que en la novena perdieron 0-4 con Morelia, en la décima primera cayeron 1-2 ante Jaguares y en cinco partidos sólo han conseguido dos puntos.
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