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Luis Michel y su compromiso social

El arquero de las Chivas organizó la campaña 'Todos Unidos por Haití' con la que recaudó fondos para apoyar a damnificados que dejó el sismo

GUADALAJARA, JALISCO (04/NOV/2011).- El futbol, por la relevancia que alcanza en la sociedad, supera sin problema las fronteras del rectángulo verde.

La profesión tiene muchos aspirantes y pocos privilegiados. Por eso, quienes pueden dedicarse a patear un balón se convierten, con o sin conciencia de ello, en ejemplos.
Pocos jugadores asumen ese rol. Menos aún son los que comprenden el compromiso social y los beneficios que pueden generar a partir de su fama. Luis Ernesto Michel, portero de las Chivas, es uno de ellos. Aunque hablar sobre el tema no es algo que le agrade. “Luego parece uno egocéntrico”, explica.

Los hechos ahí están: el año pasado, el arquero organizó la campaña “Todos unidos por Haití”, con la que recaudó fondos para los damnificados que dejó el sismo del 12 de enero; para 2011, formó parte del programa “Leer es mi partido”, en el que aprovecha los alcances de su popularidad para promover un hábito poco desarrollado en México.
Muchos dirían que es un tipo serio. Reflexivo quizá sería un calificativo más adecuado. Por eso, cuando acepta charlar, el arquero rojiblanco le da a cada palabra el tiempo necesario para que sea congruente con su pensamiento.

-Cumples con labores que otros jugadores no hacen: ayudaste a Haití, luego promoviste la lectura, ¿cómo se asume ese compromiso social?

“Es padre poder trascender y siendo sinceros, el ser portero de las Chivas, por la magnitud que tienes para llegar a la gente hay que aprovecharlo en cosas buenas, como este tipo de campañas. Al final, dentro de la cancha tratas de hacer felices a miles o millones de personas. El hecho, por ejemplo, de que un niño llegue y esté temblando cuando te ve… No sabes la magnitud de repente que tienes. Esto es parte de la vida, es parte de trascender”.

Los detalles que para otros futbolistas son cotidianos, para el portero Luis Michel no pasan desapercibidos. “Una vez llegó un niño en ambulancia, estaba en fase terminal y venía sólo a verme a mí. Entonces, la trascendencia que tiene el futbol, la trascendencia de Chivas y la trascendencia que tienes dentro de la cancha, hay que manifestarla positivamente y al final tratar de generar algo para que México esté mejor”, relata el mundialista en Sudáfrica 2010.

Un granito de arena

El esfuerzo de una sola persona por aportar algo bueno a la sociedad pudiera parecer poco. Pero las playas más hermosas del mundo se forman por millones de granitos de arena. Luis Michel sabe que entre más gente asuma el compromiso, mayores serán los beneficios que el futbol pueda ofrecer fuera del campo.

“Esto de la lectura es para tratar de motivar a los niños, porque al final, la cultura es algo que te enriquece. En lugar de que esté en la calle con los amigos, donde no sabes qué esté haciendo, mejor que empiece a tener el hábito de la lectura. Hay que empezar con uno mismo, porque si no, no se va a generar un cambio en México”.

-¿Te sientes un ejemplo para que otros futbolistas puedan asumir ese rol social?

“Como para que alguien más del futbol lo haga, pues realmente no. Yo lo hago por gusto, porque me nace, no lo hago para que digan: ‘Ah mira, ese güey ya salió otra vez’. Son situaciones que me nacen, si uno puede ayudar y trascender en ese aspecto, perfecto. Yo no les voy a decir:´’Tienes que hacer esto’”. “Por ejemplo, Héctor Reynoso tiene su fundación. Es muy padre hacer algo por la sociedad, porque aparte, él está generando trabajo para la gente. Es parte de una misma cadena, donde no todo sea negativo. Hay demasiadas cosas que se ven en la tele, de repente en la calle, que duelen. Entonces, por qué no hacer cosas buenas para generar esa cadena que al final sea en beneficio de todos”.

Cuando la charla termina, aficionados esperan ya a Luis Michel. Él firma camisetas, guantes, pósters, cualquier cosa. Se toma fotografías. Regala sonrisas. Lo comprende bien: es parte del compromiso social.
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