Deportes
Los chicos malos de la NFL
El caso más reciente es el de Aaron Hernández, implicado en un asesinato
Hernández fue arrestado este miércoles por la mañana como parte de la investigación de la muerte de Odin Lloyd, cuyo cuerpo fue encontrado el 17 de junio. Aún no se sabe qué cargos enfrenta el jugador de Nueva Inglaterra.
Las versiones señalan que Lloyd y Hernández eran amigos y estaban juntos la noche que ocurrió el asesinato. El jugador de Patriotas había sido acusado por destruir evidencia.
El caso más conocido es el de O.J. Simpson, quien fue acusado del asesinato de su ex esposa, Nicole Brown y su amigo Ronald Goldman. Pasó muchos años en juicio y finalmente fue absuelto. Sin embargo permanece en prisión por el delito de robo a mano armada y secuestro.
Más recientemente, Ben Roethlisberger, mariscal de campo de Acereros de Pittsburgh, fue acusado por una mujer de violación en un hotel casino de Lake Tahoe, en 2008. El tema terminó con un acuerdo entre las dos partes.
Otro caso muy sonado fue el de Michael Vick, quien fue arrestado por organizar peleas de perros, lo cual le costó pasar un tiempo en la cárcel en 2007, además de que su imagen quedó muy dañada. Actualmente busca regresar al nivel que mostró en el pasado.
En el 2000, el defensa de los Cuervos de Baltimore, Ray Lewis, estuvo involucrado en un doble asesinato cometido por sus amigos. El linebacker pagó una fianza de un millón de dólares y quedó en libertad, aunque tuvo que declararse culpable de obstrucción de la justicia y testificar contra sus amigos.
Plaxico Burress, campeón del Super Bowl en 2008 con los Gigantes, pasó veinte meses en prisión por dispararse accidentalmente en el muslo en un club nocturno de Nueva York. Fue acusado de posesión ilegal de armas y tuvo que purgar su condena en la Instalación Correccional de Oneida.
Otros casos recientes, aunque no son los únicos, los protagonizaron Jamal Lewis, por abandono infantil; Titus Young, por allanamiento de morada; Adam “Pacman” Jones, por agredir a una mujer en un centro nocturno; y Chad Johnson ''Ochocinco'', por agresión a su ex pareja, Evelyn Lozada.
La NFL tiene un código de conducta donde se señala que si alguno de los jugadores enfrenta problemas con la ley, queda suspendido de la temporada, para evitar que se deteriore la imagen de la liga y ante la necesidad de que los atletas sirvan como ejemplos a la juventud.
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