Deportes
La FIFA no castigará a Havelange
Blatter dice que los actos de corrupción del brasileño no son sancionables
ZURICH, SUIZA (12/JUL/2012).- El presidente de la Federación Internacional de Futbol Asociación (FIFA), el suizo Joseph Blatter, afirmó que el caso de corrupción que involucra a los brasileños Joao Havelange y Ricardo Teixeira no es sancionable.
Blatter indicó que los sobornos que recibieron entre 1992 y 1997 Havelange, expresidente de FIFA, y Teixeira, exdirigente de la Confederación Brasileña de Futbol (CBF), para la comercialización de los derechos de Copas del Mundo, se pudieron pagar a través de los impuestos.
El suizo añadió que en el presente, dichos pagos serían castigados, sin embargo, eso sucedió años atrás, con otras leyes y no puede hacerse algo contra los dos personajes brasileños.
"En ese entonces tales pagos podían descontarse como gastos de la empresa e incluso de los impuestos. En la actualidad sería sancionable. El pasado no puede medirse con los patrones actuales, si no, acabaría siendo un juicio de índole moral. De modo que no pude haberme enterado de un delito que no era tal", manifestó.
En el portal de la FIFA, Blatter declaró que el organismo rector del balompié en el mundo ha trabajado para evitar que en la actualidad se repita una situación como la antes mencionada y que busca reforzar la justicia en todas las federaciones del mundo.
"Hemos comenzado a reforzar nuestros mecanismos de control. Precisamente para evitar que algo así suceda en el futuro. La Comisión de Ética se creó por una iniciativa que lancé en 2006 a consecuencia del caso ISL. Las reformas encaminadas apuntan en esta dirección".
Sobre el mismo punto agregó: "para reforzar la justicia en las federaciones, se han adoptado ya medidas importantes con la creación de un sistema de dos órganos, uno de instrucción y otro de decisión. La próxima semana, el Comité Ejecutivo procederá al nombramiento de los presidentes de estos órganos".
Blatter descartó que él esté implicado en los sobornos y lamentó que este hecho no se haya hecho público desde hace tiempo, al tiempo de aseverar que no puede llamar a rendir cuentas a Havelange aunque éste sea presidente honorario de la FIFA.
"No está dentro de mis competencias llamarlo a rendir cuentas. El Congreso lo nombró presidente honorario y sólo el congreso podrá decidir sobre su futuro".
Blatter indicó que los sobornos que recibieron entre 1992 y 1997 Havelange, expresidente de FIFA, y Teixeira, exdirigente de la Confederación Brasileña de Futbol (CBF), para la comercialización de los derechos de Copas del Mundo, se pudieron pagar a través de los impuestos.
El suizo añadió que en el presente, dichos pagos serían castigados, sin embargo, eso sucedió años atrás, con otras leyes y no puede hacerse algo contra los dos personajes brasileños.
"En ese entonces tales pagos podían descontarse como gastos de la empresa e incluso de los impuestos. En la actualidad sería sancionable. El pasado no puede medirse con los patrones actuales, si no, acabaría siendo un juicio de índole moral. De modo que no pude haberme enterado de un delito que no era tal", manifestó.
En el portal de la FIFA, Blatter declaró que el organismo rector del balompié en el mundo ha trabajado para evitar que en la actualidad se repita una situación como la antes mencionada y que busca reforzar la justicia en todas las federaciones del mundo.
"Hemos comenzado a reforzar nuestros mecanismos de control. Precisamente para evitar que algo así suceda en el futuro. La Comisión de Ética se creó por una iniciativa que lancé en 2006 a consecuencia del caso ISL. Las reformas encaminadas apuntan en esta dirección".
Sobre el mismo punto agregó: "para reforzar la justicia en las federaciones, se han adoptado ya medidas importantes con la creación de un sistema de dos órganos, uno de instrucción y otro de decisión. La próxima semana, el Comité Ejecutivo procederá al nombramiento de los presidentes de estos órganos".
Blatter descartó que él esté implicado en los sobornos y lamentó que este hecho no se haya hecho público desde hace tiempo, al tiempo de aseverar que no puede llamar a rendir cuentas a Havelange aunque éste sea presidente honorario de la FIFA.
"No está dentro de mis competencias llamarlo a rendir cuentas. El Congreso lo nombró presidente honorario y sólo el congreso podrá decidir sobre su futuro".
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