Deportes
Ivanovic ante tres rivales de cuidado
La reciente jugadora número uno del tenis femenil mundial, Ana Ivanovic, defenderá su cetro ante experimentadas como María Sharapova y las hermanas Williams
Ana Ivanovic intentará consolidar su número uno mundial recién conquistado a partir de hoy en el césped de Wimbledon, donde sus principales rivales serán tres antiguas reinas del circuito, Maria Sharapova y las hermanas Venus y Serena Williams.
La serbia de 20 años, que acaba de ganar su primer título de Grand Slam en Roland Garros, tiene las armas necesarias para imponerse en el césped inglés: una gran derecha, una buen primer servicio y su experiencia en “grandes” tras disputar tres finales.
En Londres, ha ido en ascenso en sus tres primeras participaciones: tercera ronda en 2005, octavos de final en 2006 y semifinales el año pasado. Con un draw favorable, podría dar uno o dos pasos más esta vez.
Su rival más peligrosa no será su compatriota Jelena Jankovic, número dos mundial, a la que no le gusta demasiado el césped, sino más bien la rusa Maria Sharapova, con la que además se disputa el lucrativo status de jugadora más glamurosa del circuito.
Cuando parecía que no podía perder el número uno mundial tras la retirada de la belga Justine Henin, Sharapova sólo lo conservó tres semanas al perder en octavos de final en Roland Garros.
En Wimbledon, donde se reveló al ganar en 2004 con sólo 17 años, la rusa es una jugadora muy distinta a la que se ve en la arcilla parisina. El césped debería permitirle dar un nuevo impulso a su temporada, que empezó de forma inmejorable ganando tres títulos, incluido el Abierto de Australia.
Serena Williams está en una situación comparable. Brillante al comienzo de la temporada, cuando ganó tres torneos, frenó al llegar a la arcilla, su peor superficie. Su servicio y su derecha siguen estando entre las más temidas en pasto.
El estado de su hermana Venus no le permite aspirar a la primera posición mundial pero la estadounidense es capaz de mostrarse durante la quincena londinense como la número uno que fue hace seis años. Estos últimos años, la hermana mayor sólo ha destacado en Londres, pero de qué manera.
Cuando nadie le esperaba, ganó dos de las tres últimas ediciones con altos números en la siembra (14 en 2005 y 23 en 2007) y ha disputado seis de las ocho últimas finales en Londres, ganando cuatro. A pesar de su modesto comienzo de temporada, figura por tanto entre las grandes favoritas.
No es así para las rusas Svetlana Kuznetsova (4), Elena Dementieva (5) y Dinara Safina (9), incómodas en césped, ni para la francesa Marion Bartoli, finalista el año pasado para sorpresa general pero decepcionante este año.
La serbia de 20 años, que acaba de ganar su primer título de Grand Slam en Roland Garros, tiene las armas necesarias para imponerse en el césped inglés: una gran derecha, una buen primer servicio y su experiencia en “grandes” tras disputar tres finales.
En Londres, ha ido en ascenso en sus tres primeras participaciones: tercera ronda en 2005, octavos de final en 2006 y semifinales el año pasado. Con un draw favorable, podría dar uno o dos pasos más esta vez.
Su rival más peligrosa no será su compatriota Jelena Jankovic, número dos mundial, a la que no le gusta demasiado el césped, sino más bien la rusa Maria Sharapova, con la que además se disputa el lucrativo status de jugadora más glamurosa del circuito.
Cuando parecía que no podía perder el número uno mundial tras la retirada de la belga Justine Henin, Sharapova sólo lo conservó tres semanas al perder en octavos de final en Roland Garros.
En Wimbledon, donde se reveló al ganar en 2004 con sólo 17 años, la rusa es una jugadora muy distinta a la que se ve en la arcilla parisina. El césped debería permitirle dar un nuevo impulso a su temporada, que empezó de forma inmejorable ganando tres títulos, incluido el Abierto de Australia.
Serena Williams está en una situación comparable. Brillante al comienzo de la temporada, cuando ganó tres torneos, frenó al llegar a la arcilla, su peor superficie. Su servicio y su derecha siguen estando entre las más temidas en pasto.
El estado de su hermana Venus no le permite aspirar a la primera posición mundial pero la estadounidense es capaz de mostrarse durante la quincena londinense como la número uno que fue hace seis años. Estos últimos años, la hermana mayor sólo ha destacado en Londres, pero de qué manera.
Cuando nadie le esperaba, ganó dos de las tres últimas ediciones con altos números en la siembra (14 en 2005 y 23 en 2007) y ha disputado seis de las ocho últimas finales en Londres, ganando cuatro. A pesar de su modesto comienzo de temporada, figura por tanto entre las grandes favoritas.
No es así para las rusas Svetlana Kuznetsova (4), Elena Dementieva (5) y Dinara Safina (9), incómodas en césped, ni para la francesa Marion Bartoli, finalista el año pasado para sorpresa general pero decepcionante este año.
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