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Hoy, el último invitado
Inglaterra e Italia se miden en el último partido de cuartos de final de la Euro
KIEV, UCRANIA (24/JUN/2012).- Domingo de Clásico europeo por la TV. La Italia de Andrea Pirlo y la Inglaterra de Steven Gerrard protagonizarán un vibrante Clásico que se anuncia parejo y tenso por el último boleto a semifinales, donde les espera muy preparada la todopoderosa y temible Alemania.
Inglaterra, que busca su segundo gran título internacional desde aquel Mundial 1966 logrado en Wembley, llega aparentemente mejor, tras ganar el Grupo D al derrotar a Suecia (3-2) y Ucrania (1-0), sumado al estreno con empate frente al favorito Francia (1-1).
Por su lado, la Nazionale, cuádruple campeona mundial y una vez de Europa, salió viva de una llave complicada gracias a dos empates 1-1 ante España y Croacia, y una victoria sin brillo frente a Irlanda (2-0).
El portero y capitán italiano Gianluigi Buffon señaló que ambas selecciones buscan “recuperar un poco de prestigio perdido”, en un encuentro que estimó en los pronósticos como un “50-50”.
El último encuentro de cuartos de final, en el Estadio Olímpico de la capital ucraniana, propondrá como condimento agregado un triple duelo íntimo, muy parejos, entre los “chicos malos” Antonio Cassano y John Terry, los cerebros de la medular Pirlo-Gerrard y en las porterías Buffon-Joe Hart.
El arquero del Manchester City ya se declaró preparado para convertirse en estrella en caso de que la definición llegue en empate tras 90 y 120 minutos de juego, pidiendo “patear” un penalti y atajar unos cuantos, en un ejercicio que intimida a los aficionados ingleses, que se quedaron fuera de cinco de las últimas citas grandes por esa vía.
Y muchos más frente a una Italia que la última vez que festejó un título lo hizo por ese camino, derrotando a Francia en la final de Berlín del Mundial 2006, última cita en la que brilló, tras caer en cuartos en la Eurocopa 2008 y en primera fase en Sudáfrica 2010.
Cambios en la Azzurra
El seleccionador italiano Cesare Prandelli, que sufrirá la baja por lesión del central Giorgio Chiellini, apostará a un “rombo mágico” en el medio, y a Cassano y Mario Balotelli en punta, para darle rigor físico al equipo y no atacar con dos pesos pluma como Cassano-Di Natale.
Prandelli, que quería cambiar la imagen del fútbol italiano haciéndolo más ofensivo, ha cambiado de sistema desde el inicio del torneo, replegando a la Azurra cuando se veía en inferioridad física o futbolística.
Por eso, no hay que descartar que recurra al viejo y tradicional catenaccio en algunos pasajes del partido, como lo reveló su capitán. “Cuando nos sentimos apretados, terminamos haciendo lo que nos sienta más cómodo (jugar defensivos). No es fácil cambiar la mentalidad”, dijo Buffon.
El arquero de la Juve tiene memoria y sabe que la Nazionale ganó cuatro títulos mundiales y uno europeo (1968) con ese futbol, por lo que cree que no es hora de improvisar y disfrazarse de Brasil.
Ingleses motivados
El técnico inglés Roy Hodgson, sucesor del italiano Fabio Capello, confía en que Wayne Rooney, suspendido los dos primeros partidos, pero de regreso al once incial contra Ucrania contra el que marcó, siga enchufado y bien asistido por un mediocampo luchador y vertiginoso que comanda Gerrard, siempre peligroso con sus pelotazos quirúrgicos.
“Tenemos muchas cualidades y sabemos de lo que somos capaces. Va a ser difícil que nos ganen e Italia no debe estar feliz por enfrentarnos”, afirmó el crack del Manchester United.
A Inglaterra por ahora le ha dado resultado su juego bien “british”, rápido, explosivo y con centros a sus toros Rooney-Welbeck, que van a todas y por todo.
ESTADISTICAS
Parejos
Italia le ganó nueve partidos, Inglaterra siete y empataron seis. La última cita importante entre ambos fue en el Mundial 1990, con victoria italiana 1-0 en el partido por el tercer puesto.
ALINEACIONES
Así jugarían
Inglaterra
Hart, Johnson, Terry, Lescot, Cole, Gerrard, Parker, Milner, Rooney, Young, Welbeck. D.T. Roy Hodgson
Italia
Buffon, Maggio, Barzagli, Bonucci, Balzaretti, Marchisio, Pirlo, Thiago Motta, De Rossi, Cassano, Balotelli. D.T. Cesare Prandelli
Árbitro: Pedro Proença (Portugal)
PERFIL
La hora de Gerrard
A Steven Gerrard le ha llegado la hora de la verdad. Tiene 32 años y desde 2000, cuando debutó con Inglaterra, sólo ha hilvanado fracasos con su selección. La Eurocopa de Polonia y Ucrania puede que sea su último gran torneo y por fin, después de casi una década, es el gran referente del conjunto británico.
Aunque ya no es el gran Gerrard que ganó la Champions con el Liverpool en 2005, es el jugador con más carisma de la Selección inglesa. Tiene un peso enorme en el vestuario y lo sabe su técnico, Roy Hodgson que lo nombró capitán previo al torneo.
Llegó a la Eurocopa después de una temporada irregular con el Liverpool en la Liga Premier. Lo pasó mal con las lesiones. Fruto de esa mala suerte sólo participó en 18 partidos anotando cinco goles. Esas fueron sus cifras, lejos de las de sus mejores años. Pero no importaba, Inglaterra le necesitaba.
Sin Frank Lampard, lesionado previo a la Eurocopa, y con John Terry desprestigiado desde hace tiempo por sus diferentes escándalos, Gerrard pasó a ser el referente. Wayne Rooney, sancionado para los dos primeros partidos de la Eurocopa, no pudo hacerle sombra hasta el tercer juego, pero aún así, no tiene tanto carisma como él.
Su trabajo no pasa desapercibido. Uno de sus rivales de hoy, el italiano Daniele de Rossi, no escatimó en lanzarle un gran elogio: “Gerrard siempre ha sido mi ídolo”, dijo esta semana.
Desde el 2000 todo ha sido amarguras. Gerrard jamás ha pasado de cuartos de final de una gran competición. Ha participado en cuatro: dos Mundiales y dos Eurocopas. Se ha perdido dos, el Mundial de Corea y Japón de 2002 por una inoportuna lesión y la Eurocopa de 2008, a la que Inglaterra no llegó a clasificarse.
Italia marca la frontera de Gerrard para lograr su mayor éxito con Inglaterra.
Ha jugado todos los minutos de la Eurocopa y es el máximo asistente del campeonato junto con el alemán Ozil, con tres pases de gol. Los hombres de Cesare Prandelli lo sufrirán sobre el césped. Es la hora de Gerrard.
Inglaterra, que busca su segundo gran título internacional desde aquel Mundial 1966 logrado en Wembley, llega aparentemente mejor, tras ganar el Grupo D al derrotar a Suecia (3-2) y Ucrania (1-0), sumado al estreno con empate frente al favorito Francia (1-1).
Por su lado, la Nazionale, cuádruple campeona mundial y una vez de Europa, salió viva de una llave complicada gracias a dos empates 1-1 ante España y Croacia, y una victoria sin brillo frente a Irlanda (2-0).
El portero y capitán italiano Gianluigi Buffon señaló que ambas selecciones buscan “recuperar un poco de prestigio perdido”, en un encuentro que estimó en los pronósticos como un “50-50”.
El último encuentro de cuartos de final, en el Estadio Olímpico de la capital ucraniana, propondrá como condimento agregado un triple duelo íntimo, muy parejos, entre los “chicos malos” Antonio Cassano y John Terry, los cerebros de la medular Pirlo-Gerrard y en las porterías Buffon-Joe Hart.
El arquero del Manchester City ya se declaró preparado para convertirse en estrella en caso de que la definición llegue en empate tras 90 y 120 minutos de juego, pidiendo “patear” un penalti y atajar unos cuantos, en un ejercicio que intimida a los aficionados ingleses, que se quedaron fuera de cinco de las últimas citas grandes por esa vía.
Y muchos más frente a una Italia que la última vez que festejó un título lo hizo por ese camino, derrotando a Francia en la final de Berlín del Mundial 2006, última cita en la que brilló, tras caer en cuartos en la Eurocopa 2008 y en primera fase en Sudáfrica 2010.
Cambios en la Azzurra
El seleccionador italiano Cesare Prandelli, que sufrirá la baja por lesión del central Giorgio Chiellini, apostará a un “rombo mágico” en el medio, y a Cassano y Mario Balotelli en punta, para darle rigor físico al equipo y no atacar con dos pesos pluma como Cassano-Di Natale.
Prandelli, que quería cambiar la imagen del fútbol italiano haciéndolo más ofensivo, ha cambiado de sistema desde el inicio del torneo, replegando a la Azurra cuando se veía en inferioridad física o futbolística.
Por eso, no hay que descartar que recurra al viejo y tradicional catenaccio en algunos pasajes del partido, como lo reveló su capitán. “Cuando nos sentimos apretados, terminamos haciendo lo que nos sienta más cómodo (jugar defensivos). No es fácil cambiar la mentalidad”, dijo Buffon.
El arquero de la Juve tiene memoria y sabe que la Nazionale ganó cuatro títulos mundiales y uno europeo (1968) con ese futbol, por lo que cree que no es hora de improvisar y disfrazarse de Brasil.
Ingleses motivados
El técnico inglés Roy Hodgson, sucesor del italiano Fabio Capello, confía en que Wayne Rooney, suspendido los dos primeros partidos, pero de regreso al once incial contra Ucrania contra el que marcó, siga enchufado y bien asistido por un mediocampo luchador y vertiginoso que comanda Gerrard, siempre peligroso con sus pelotazos quirúrgicos.
“Tenemos muchas cualidades y sabemos de lo que somos capaces. Va a ser difícil que nos ganen e Italia no debe estar feliz por enfrentarnos”, afirmó el crack del Manchester United.
A Inglaterra por ahora le ha dado resultado su juego bien “british”, rápido, explosivo y con centros a sus toros Rooney-Welbeck, que van a todas y por todo.
ESTADISTICAS
Parejos
Italia le ganó nueve partidos, Inglaterra siete y empataron seis. La última cita importante entre ambos fue en el Mundial 1990, con victoria italiana 1-0 en el partido por el tercer puesto.
ALINEACIONES
Así jugarían
Inglaterra
Hart, Johnson, Terry, Lescot, Cole, Gerrard, Parker, Milner, Rooney, Young, Welbeck. D.T. Roy Hodgson
Italia
Buffon, Maggio, Barzagli, Bonucci, Balzaretti, Marchisio, Pirlo, Thiago Motta, De Rossi, Cassano, Balotelli. D.T. Cesare Prandelli
Árbitro: Pedro Proença (Portugal)
PERFIL
La hora de Gerrard
A Steven Gerrard le ha llegado la hora de la verdad. Tiene 32 años y desde 2000, cuando debutó con Inglaterra, sólo ha hilvanado fracasos con su selección. La Eurocopa de Polonia y Ucrania puede que sea su último gran torneo y por fin, después de casi una década, es el gran referente del conjunto británico.
Aunque ya no es el gran Gerrard que ganó la Champions con el Liverpool en 2005, es el jugador con más carisma de la Selección inglesa. Tiene un peso enorme en el vestuario y lo sabe su técnico, Roy Hodgson que lo nombró capitán previo al torneo.
Llegó a la Eurocopa después de una temporada irregular con el Liverpool en la Liga Premier. Lo pasó mal con las lesiones. Fruto de esa mala suerte sólo participó en 18 partidos anotando cinco goles. Esas fueron sus cifras, lejos de las de sus mejores años. Pero no importaba, Inglaterra le necesitaba.
Sin Frank Lampard, lesionado previo a la Eurocopa, y con John Terry desprestigiado desde hace tiempo por sus diferentes escándalos, Gerrard pasó a ser el referente. Wayne Rooney, sancionado para los dos primeros partidos de la Eurocopa, no pudo hacerle sombra hasta el tercer juego, pero aún así, no tiene tanto carisma como él.
Su trabajo no pasa desapercibido. Uno de sus rivales de hoy, el italiano Daniele de Rossi, no escatimó en lanzarle un gran elogio: “Gerrard siempre ha sido mi ídolo”, dijo esta semana.
Desde el 2000 todo ha sido amarguras. Gerrard jamás ha pasado de cuartos de final de una gran competición. Ha participado en cuatro: dos Mundiales y dos Eurocopas. Se ha perdido dos, el Mundial de Corea y Japón de 2002 por una inoportuna lesión y la Eurocopa de 2008, a la que Inglaterra no llegó a clasificarse.
Italia marca la frontera de Gerrard para lograr su mayor éxito con Inglaterra.
Ha jugado todos los minutos de la Eurocopa y es el máximo asistente del campeonato junto con el alemán Ozil, con tres pases de gol. Los hombres de Cesare Prandelli lo sufrirán sobre el césped. Es la hora de Gerrard.
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