Deportes
Fue una tarde de entrega total: 'El Juli'
'El Juli' abrió plaza al cortar la primera oreja, y definió su faena como ésas que a él tanto le gustan
GUADALAJARA, JALISCO (16/FEB/2014).- Fue una tarde histórica hoy en la plaza de toros Nuevo Progreso de Guadalajara, en una mano a mano entre México y España donde Julián López "El Juli" y el hidrocálido Joselito Adame pudieron emparejarse con tres orejas cada uno.
Para el ibérico "El Juli", fue una tarde de entrega total, y arrancó con le pie derecho con el astado que abrió plaza al cortar la primera oreja de la tarde, y definió su faena como ésas que a él tanto le gustan. "Con mi primer toro pude cuajarlo como a mí me gusta, me sentí cómodo y estoy feliz", dijo Julián.
En contraste, con su último astado de la lidia ordinaria, Julián sufrió las protestas de la gente por la falta de trapío del astado de Los Encinos; molesto y con un rostro incómodo, saltó el el toro que cerró plaza para anunciar un burel de regalo, al que cuajó de manera impresionante y le cortó dos orejas, echándose a la bolsa a la afición tapatía que se entregó por completo. "con el toro de regalo ha sido una faena distinta, de entrega total, que la disfruté muchísimo". Ante los silbidos del público, Julián aseveró que lo importante es que al final, la gente se entregó como nunca.
Para el mexicano también fue tarde de gloria, consiguiendo otro tanto de tres orejas. También regaló un toro al que le cuajó momentos importantes y que despachó de un estoconazo que se le premio con los dos trofeos. "Era importante estar lo más cerca posible, había que estar ahí, esto feliz", aseveró Adame.
Ante un revuelco de aficionados en el ruedo al finalizar con el toro que cerró plaza, Joselito transmitió su felicidad por el triunfo en la Nuevo Progreso, y dijo: "Hemos dado una dimensión grande del toreo, éstas son las tardes que crean afición y que me hacen feliz".
Ante el evidente "pique" profesional entre ambos coletas, el hidrocálido aceptó que "no había que dejarse", por ello que la corrida se alargó hasta ocho toros, concluyendo en tarde de gloria para aficionados y matadores.
EL INFORMADOR/EDGAR FLORES
Para el ibérico "El Juli", fue una tarde de entrega total, y arrancó con le pie derecho con el astado que abrió plaza al cortar la primera oreja de la tarde, y definió su faena como ésas que a él tanto le gustan. "Con mi primer toro pude cuajarlo como a mí me gusta, me sentí cómodo y estoy feliz", dijo Julián.
En contraste, con su último astado de la lidia ordinaria, Julián sufrió las protestas de la gente por la falta de trapío del astado de Los Encinos; molesto y con un rostro incómodo, saltó el el toro que cerró plaza para anunciar un burel de regalo, al que cuajó de manera impresionante y le cortó dos orejas, echándose a la bolsa a la afición tapatía que se entregó por completo. "con el toro de regalo ha sido una faena distinta, de entrega total, que la disfruté muchísimo". Ante los silbidos del público, Julián aseveró que lo importante es que al final, la gente se entregó como nunca.
Para el mexicano también fue tarde de gloria, consiguiendo otro tanto de tres orejas. También regaló un toro al que le cuajó momentos importantes y que despachó de un estoconazo que se le premio con los dos trofeos. "Era importante estar lo más cerca posible, había que estar ahí, esto feliz", aseveró Adame.
Ante un revuelco de aficionados en el ruedo al finalizar con el toro que cerró plaza, Joselito transmitió su felicidad por el triunfo en la Nuevo Progreso, y dijo: "Hemos dado una dimensión grande del toreo, éstas son las tardes que crean afición y que me hacen feliz".
Ante el evidente "pique" profesional entre ambos coletas, el hidrocálido aceptó que "no había que dejarse", por ello que la corrida se alargó hasta ocho toros, concluyendo en tarde de gloria para aficionados y matadores.
EL INFORMADOR/EDGAR FLORES
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