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En El Fairway

¿Viejito?

¿Quién dijo que los “viejitos” no pueden ganar en la PGA Tour? A sus 48 años de edad, Kenny Perry ha demostrado todo lo contrario, ya que, actualmente, es uno de los mejores golfistas de la gira. Al ganar el 2009 FBR Open (antes Phoenix Open) de la semana pasada, se convirtió en el jugador de mayor edad en ganarlo a lo largo de los 77 años que el torneo tiene de historia. Igualmente, es la victoria número 13 en su carrera, y décima desde que cumplió 40 años. Increíble ¿verdad? A su edad, el estar compitiendo contra los mejores y ganarles, es muy loable. ¡Es lo bonito del deporte del golf!

Pero no todo ha sido “vida y dulzura” para Kenny. Le ha batallado, y mucho, para llegar a donde está actualmente.

En caso de que Usted, amable lector, finalmente se pregunte ¿Quién es Kenny Perry?, a continuación le esbozaré algo de su historia.

Su nombre completo es James Kenneth Perry y nació el 10 de agosto de 1960 en Elizabethtown, Kentucky. En 1982 se hizo profesional de golf y durante dos años trató de obtener la tarjeta de la PGA Tour, pero no lo logró, la primera vez se quedó a un solo golpe y durante la cuarta ronda de la segunda vez que lo intentó, le informaron que su esposa estaba dando a luz y tuvo que salirse del torneo. Desde que se hizo pro, Kenny fue patrocinado por un grupo de 20 personas, quienes le financiaron sus gastos para poder jugar en algunas mini-tours y en sus primeros dos intentos de calificar en la “gira grande”. Debido a que no lo logró, dicho grupo le retiró el patrocinio. Sin embargo, en 1985 un empresario de Franklin, Kentucky, le ofreció 5 mil dólares para que intentara de nuevo calificar en la PGA Tour, a cambio del 5% de todas sus ganancias futuras. En esta ocasión, Kenny calificó empatado en el lugar 40, a sólo dos golpes del corte. Y después de mucho lucharle para conservar su tarjeta, en mayo de 1987 ganó su primer “gran” cheque, por 55 mil dólares, al haber quedado empatado en el cuarto lugar del torneo Panasonic Las Vegas Invitational. Con ese dinero, Kenny, aunque no tenía obligación legal para hacerlo, les pagó a sus primeros patrocinadores todo lo que habían invertido en él. Y, con respecto al empresario que lo ayudó, ambos quedaron en que el porcentaje acordado, Kenny se lo entregaría a la Lipscomb University para que becaran a habitantes del municipio de Simpson, en Kentucky, cosa que ha estado haciendo hasta la fecha.

En 1991 logró su primera victoria en el Memorial Tournament y en 2006 fue el décimo jugador de la gira en rebasar los 20 millones de dólares en ganancias. El año pasado fue el mejor para él, debido a que ganó torneos en tres ocasiones y a que perteneció al equipo de la Ryder Cup, que obtuvo “de regreso” la copa que los europeos custodiaban desde 1999.

Muy lejos de sentirse “viejo” para jugar golf competitivo en las “Ligas Mayores”, Kenny Perry quiere llegar a obtener 20 victorias en la PGA Tour y, quizás, también el quitarse de encima el título que le ha sido impuesto por prensa como “el jugador con más ganancias sin haber ganado un Major”.

Hasta la próxima ocasión, procure mantener su bola En El Fairway.
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