Deportes
Desde el lienzo
Llegan tiempos de cambio
Hola estimados amadores del más mexicano de los deportes, abrimos con el refrán de que “Una cosa es una cosa y otra cosa es otra cosa”, ocasión que aprovechamos para comentar lo relacionado a las pasadas elecciones del 24 de septiembre, las que fueron impugnadas y ahora CODEME el jueves pasado entregó el poder a Jaime Castruita Padilla.
De entrada, debo admitir que no me gusta tocar este tipo de temas y no precisamente por “espinosos”, sino porque hay mucho que la charrería quiere saber.
Esta vez haré una excepción. Las elecciones se realizaron el 24 de septiembre, mismas que ganó Jaime Castruita con 265 votos, por 229 de Salvador Sánchez y apenas 38 de Arturo Marín.
Días después de la elección, se dijo que hubo irregularidades y que por ello impugnaban el proceso Marín y Sánchez. Pasaron los días (más de dos meses) y el jueves, en la capital del país, Javier Basurto entregó la estafeta a Jaime Castruita.
Aunque había doble impugnación, CODEME autorizó la entrega de Federación, con la salvedad de que el proceso de los dos candidatos opositores seguirá adelante. Así quedó de manifiesto el jueves anterior y aunque los impugnaron no están de acuerdo, por lo que siento que el organismo que rige el deporte de México tomó la mejor decisión, la más salomónica.
De entrada, deseo que le vaya bien al equipo de Jaime Castruita y si son los que llevarán las riendas de la charrería, los invito a trabajar para que se vuelva a unificar la charrería y que este deporte sea el que salga ganando, el más fortalecido pues.
Ahora viene lo mejor
El proceso de elección fue muy desgastante y sobre todo los días que le siguieron al 24 de septiembre, ya que después de dos meses y seis días que han pasado desde aquel proceso, ahora deben venir los tiempos de cambio para la charrería.
Es tiempo de la reflexión, de pensar en construir más que de destruir, por eso la invitación para que todos nos subamos al mismo barco, porque mientras más unidos estemos, mejores resultados habrá en el deporte nacional por excelencia.
No es coba, las elecciones ya fueron y no hubo perdedores, porque todos ganamos con una u otra opción, cuando la verdad así debe ser, porque después del proceso, todos nos debemos unificar en un mismo fin y no tratar de confundir más a la charrería, como hacen algunos comunicadores.
Mi única recomendación es ponernos a trabajar y reconquistar a la charrería, porque la parte romántica desde hace algunos ayeres que se ha ido extinguiendo.
De entrada, debo admitir que no me gusta tocar este tipo de temas y no precisamente por “espinosos”, sino porque hay mucho que la charrería quiere saber.
Esta vez haré una excepción. Las elecciones se realizaron el 24 de septiembre, mismas que ganó Jaime Castruita con 265 votos, por 229 de Salvador Sánchez y apenas 38 de Arturo Marín.
Días después de la elección, se dijo que hubo irregularidades y que por ello impugnaban el proceso Marín y Sánchez. Pasaron los días (más de dos meses) y el jueves, en la capital del país, Javier Basurto entregó la estafeta a Jaime Castruita.
Aunque había doble impugnación, CODEME autorizó la entrega de Federación, con la salvedad de que el proceso de los dos candidatos opositores seguirá adelante. Así quedó de manifiesto el jueves anterior y aunque los impugnaron no están de acuerdo, por lo que siento que el organismo que rige el deporte de México tomó la mejor decisión, la más salomónica.
De entrada, deseo que le vaya bien al equipo de Jaime Castruita y si son los que llevarán las riendas de la charrería, los invito a trabajar para que se vuelva a unificar la charrería y que este deporte sea el que salga ganando, el más fortalecido pues.
Ahora viene lo mejor
El proceso de elección fue muy desgastante y sobre todo los días que le siguieron al 24 de septiembre, ya que después de dos meses y seis días que han pasado desde aquel proceso, ahora deben venir los tiempos de cambio para la charrería.
Es tiempo de la reflexión, de pensar en construir más que de destruir, por eso la invitación para que todos nos subamos al mismo barco, porque mientras más unidos estemos, mejores resultados habrá en el deporte nacional por excelencia.
No es coba, las elecciones ya fueron y no hubo perdedores, porque todos ganamos con una u otra opción, cuando la verdad así debe ser, porque después del proceso, todos nos debemos unificar en un mismo fin y no tratar de confundir más a la charrería, como hacen algunos comunicadores.
Mi única recomendación es ponernos a trabajar y reconquistar a la charrería, porque la parte romántica desde hace algunos ayeres que se ha ido extinguiendo.
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