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¿Cuál defensiva aguantará más?
Ante equipos como Potros y Santos, que finalizaron como dos de las mejores ofensivas en la temporada, el que quiera ser campeón tendrá que mejorar su sistema defensivo
Larry Coyer, de los Potros y Gregg Williams, de los Santos, son los cerebros de estas defensivas, subvaluadas, poco citadas, pero que en la postemporada se han doblado, pero no se han roto.
Durante la temporada regular, la ofensiva total de Nueva Orleáns fue la mejor de la NFL, mientras que la de Indianápolis se ubicó en la novena posición, pero el contraste con sus defensivas es considerable: la de los Santos fue la 25 de 32 equipos, y la de Potros la número 18.
En ambas defensivas existen grandes jugadores. Una muestra serían Will Smith, Darren Sharper o Jonathan Vilma, por el lado de Nueva Orleáns. Dwight Freeney (en duda), Gary Brackett o Antoine Bethea por los Potros.
Pero al analizar la frialdad de los números, éstos demuestran que únicamente la defensa de los Potros mejoró notablemente en playoffs, con respecto a su actuación en temporada regular. La de los Santos parece haber hecho sus problemas aún más grandes.
Se nota el trabajo de Coyer y Williams para tratar de elevar el nivel de ejecución, sin caer en el exceso de cambiar demasiado, pues existe el riesgo de fracasar.
Lo mejor de Indianápolis en defensa, ha sido frenar la carrera en los “playoffs”, lo que les permitió pasar por encima de Baltimore y Jets. En campaña regular, por juego permitieron 126.5 yardas, mientras que en postemporada cerraron la grieta, al admitir solamente 86.5.
Por pase, Indianápolis permitió 212.7 yardas por partido en temporada regular, mientras que en “playoffs” estos números se incrementaron a 242.5 por juego, en ese renglón. Para Nueva Orleáns, también la defensiva contra el pase fue un dolor de cabeza, con cifras de 235.6 en la campaña y aumentó dramáticamente a 284 en postemporada.
“Los Santos son un equipo tremendo a la ofensiva, su entrenador es brillante y su ‘quarterback’ es un estudioso de este juego. Son unos maestros en ocultar qué es lo que van a hacer hasta que ejecutan. Brees es muy inteligente y sabe leer muy bien las defensas, incluso en su mente, creo que sabe qué es lo que va a pasar en la siguiente jugada”, comentó durante la semana el coordinador defensivo de Indianápolis, Larry Coyer.
En caso de perder a Freeney, quien ha estado toda esta semana y parte de la anterior entre algodones debido a una lesión en su tobillo derecho, Indianápolis perdería al corazón de esta defensa. Por el otro lado, Williams conoce bien a Manning, trabajó en 2008 en el mismo cargo con Jacksonville, lo que significó enfrentarlo dos veces al año. Dijo que tratará que su defensa le dé a Peyton golpes del tipo “me recordarás”. Los Potros lo tomaron como “hablar basura”.
En la campaña regular, Manning sólo fue capturado en 10 ocasiones.
“Cuando tú le pegas al ‘quarterback’ del rival haces que el equipo lo resienta. Si llegas a lograr que haga cosas que no quiere o que lo saquen de ritmo, entonces afectas a toda la ofensiva y su ritmo también. Yo fui quarterback y a veces quisieras que el juego fuera en el aire, pero no es así, se juega contacto", agregó Williams.
Hoy le harán pruebas a Freeney
Durante la práctica de hoy de los Potros de Indianápolis, a Dwight Freeney, estelar de la defensa del equipo campeón de la Conferencia Americana, le realizarán las primeras pruebas físicas a su tobillo, para determinar el grado de viabilidad para jugar o no el domingo el Super Bowl XLIV.
“Simplemente trataré de experimentar cómo se sienta mi tobillo”, manifestó el ala defensiva”, “realmente ya se está comenzando a ver cada vez más como un tobillo normal, aunque la certeza de la evolución de la lesión es todavía de un día para otro”.
Freeney se rompió un ligamento de su tobillo cuando terminaba el partido contra los Jets de Nueva York, en el partido de campeonato de la Conferencia Americana.
Habrá presencia latina
Latinoamérica también dirá presente el domingo en el SuperBowl XLIV, cuando salgan al emparrillado el cubano-estadounidense Anthony González (Potros), el argentino-canadiense Austin Collie (Potros) y el puertorriqueño Jonathan Casillas (Santos).
De los tres, Gónzalez, quien nació en Miami de padres cubanos, es el de mayor experiencia. El cubano lleva tres años en la NFL y aunque no tuvo mucha participación en la última campaña, está en el grupo de suplentes de los Potros.
González, receptor abierto de 25 años, vivió este año su temporada más difícil al lesionarse desde la primera semana.
“Ahora que estamos oficialmente en el Super Bowl, no me es posible expresar lo orgulloso que estoy de todos los muchachos en nuestro equipo, especialmente de los jóvenes receptores”, expresó.
Es muy difícil que este joven jugador pueda estar como titular, ya que posiblemente en un partido tan importante, el entrenador en jefe, Jim Caldwell, no lo tome en cuenta por su poca participación durante la campaña regular.
“Su manera de correr, su trayectoria es tan ligera y limpia que tiene las mejores manos que probablemente yo haya visto en un receptor", manifestó Caldwell sobre el cubano.
El isleño, quien todos los años vacaciona en Miami para comer su arroz con frijoles negros, carne de puerco y platanos maduros frito, sabe que no podrá hacer nada el próximo domingo.
Sin embargo, no todo está perdido, pues él mismo manifiesta que "estoy comprometido al 100% con la rehabilitación de esta lesión y de regresar más fuerte y mejor que nunca antes”.
“Mi meta para la próxima temporada es ser el mejor jugador en mi posición, y estoy intentando cumplir por completo con ese objetivo”, expuso.
Por su parte, Collie, de 24 años, sí tiene muchas posibilidades de salir a la cancha en algún momento el domingo por Indianápolis, a pesar de estar en su temporada de novato.
Collie, quien nació en Canadá y lleva sangre argentina, es también un receptor abierto y tuvo en la camapaña 786 yardas recorridas y siete anotaciones.
“Estar en un Super Bowl en mi primer año y jugar junto a un hombre como Peyton Manning, es lo más grande que pueda haber”, expresó Collie.
Los Santos también cuentan con su jugador latino, integrante de la defensa, Jonathan Casillas, de ascendencia boricua, y también un novato de 22 años, quien en su primera temporada recopiló nueve asistencias (de captura).
Casillas, quien nació en el estado de Nueva Jersey, pero sus padres son de Vega Baja, acepta que no haber visitado Puerto Rico es una asignatura pendiente.
"Sí, lo he pensado mucho. Creo que este año podría ir por fin allá (a la isla), pero primero debo pensar en el domingo, ya que es mi primer año en la Liga y ya estoy en el Super Bowl...es algo grandioso y hay que disfrutarlo".
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