Deportes
Contador aún tiene esperanza en el Tour
Desde el inicio de la competencia, al ciclista español no le sonríe la suerte
LOURDES, FRANCIA (16/JUL/2011).- La suerte está en contra del español Alberto Contador desde que comenzó el Tour de Francia, pero descartar al triple campeón sería un error costoso para sus rivales.
El ciclista de 28 años, que está a la espera de conocer un fallo del Tribunal de Arbitraje Deportivo (TAS) sobre un positivo en un control antidopaje en 2010, ha debido superar múltiples obstáculos en la ronda gala.
El deportista fue abucheado por el público al inicio de la carrera, perdió un tiempo crucial en la primera etapa y se cayó en dos ocasiones antes de perder tiempo en la primera ronda de montaña.
Está séptimo en la general, a cuatro minutos del líder, Thomas Voeckler, y a unos dos minutos de sus principales rivales cuando aún están por delante las etapas más exigentes de la carrera de tres semanas.
"No tuvo un gran día, pero creo que es algo que puede pasar", dijo el viernes Yvon Sanquer, quien fue director del español en Astana el año pasado, en referencia a la etapa del jueves.
Contador, que arrastra un dolor en una rodilla tras sus caídas en la primera semana de Tour, no pudo seguir a Frank Schleck cuando el luxemburgués arrancó el jueves con rapidez a unos tres kilómetros de la meta en el ascenso Luz Ardiden.
El madrileño también se quedó descolgado del grupo de favoritos en el último kilómetro, cediendo 13 segundos ante Cadel Evans, Andy Schleck e Ivan Basso.
"Quizá esté pagando el precio de un complicado comienzo en el Tour. Quizá también está lidiando con correr el Tour después del Giro. Tendremos que ver cómo le va en los próximos días", dijo Sanquer.
Contador, que ganó el Giro con un estado de forma impresionante en mayo, aspira a convertirse en el primer ciclista que logra un doblete Giro-Tour en el mismo año desde que lo consiguiera el fallecido Marco Pantani en 1998.
El Giro de 2011, no obstante, fue uno de los más duros de la historia y podría pasar factura a Contador en las carreteras galas.
"Este giro fue muy agotador, uno de los más difíciles de la historia", dijo a Reuters el francés Charly Mottet, que finalizó cuarto en el Tour dos ocasiones gracias a sus habilidades como escalador.
"Los traslados (de la meta a los hoteles) también fueron muy largos. (Contador) también está bajo una presión tremenda debido a la apelación del TAS", añadió.
ESPERANZA
La lesionada rodilla del español mejoró el viernes antes del inicio de la decimotercera etapa, pero muchos se preguntan si esto será suficiente para una remontada.
"Su margen de seguridad se ha estrechado de manera dramática. Puedes tener un mal día en el Tour y aún así ganar, pero si pierde más tiempo en una o dos etapas, podría encontrarse cuesta abajo", dijo Sanquer.
"Es duro remontar cuando empiezas perdiendo tiempo en una carrera como el Tour", agregó Mottet.
No obstante, el escenario de la carrera podría ayudar a Contador, que no es el tipo de personas que renuncia a dar la batalla.
"Algunos como (Alexandre) Vinokourov o (Jurgen) van den Broeck ya no están porque se cayeron. Son ciclistas de los que hubieran causado estragos en la carrera", dijo Mottet.
El ciclista de 28 años, que está a la espera de conocer un fallo del Tribunal de Arbitraje Deportivo (TAS) sobre un positivo en un control antidopaje en 2010, ha debido superar múltiples obstáculos en la ronda gala.
El deportista fue abucheado por el público al inicio de la carrera, perdió un tiempo crucial en la primera etapa y se cayó en dos ocasiones antes de perder tiempo en la primera ronda de montaña.
Está séptimo en la general, a cuatro minutos del líder, Thomas Voeckler, y a unos dos minutos de sus principales rivales cuando aún están por delante las etapas más exigentes de la carrera de tres semanas.
"No tuvo un gran día, pero creo que es algo que puede pasar", dijo el viernes Yvon Sanquer, quien fue director del español en Astana el año pasado, en referencia a la etapa del jueves.
Contador, que arrastra un dolor en una rodilla tras sus caídas en la primera semana de Tour, no pudo seguir a Frank Schleck cuando el luxemburgués arrancó el jueves con rapidez a unos tres kilómetros de la meta en el ascenso Luz Ardiden.
El madrileño también se quedó descolgado del grupo de favoritos en el último kilómetro, cediendo 13 segundos ante Cadel Evans, Andy Schleck e Ivan Basso.
"Quizá esté pagando el precio de un complicado comienzo en el Tour. Quizá también está lidiando con correr el Tour después del Giro. Tendremos que ver cómo le va en los próximos días", dijo Sanquer.
Contador, que ganó el Giro con un estado de forma impresionante en mayo, aspira a convertirse en el primer ciclista que logra un doblete Giro-Tour en el mismo año desde que lo consiguiera el fallecido Marco Pantani en 1998.
El Giro de 2011, no obstante, fue uno de los más duros de la historia y podría pasar factura a Contador en las carreteras galas.
"Este giro fue muy agotador, uno de los más difíciles de la historia", dijo a Reuters el francés Charly Mottet, que finalizó cuarto en el Tour dos ocasiones gracias a sus habilidades como escalador.
"Los traslados (de la meta a los hoteles) también fueron muy largos. (Contador) también está bajo una presión tremenda debido a la apelación del TAS", añadió.
ESPERANZA
La lesionada rodilla del español mejoró el viernes antes del inicio de la decimotercera etapa, pero muchos se preguntan si esto será suficiente para una remontada.
"Su margen de seguridad se ha estrechado de manera dramática. Puedes tener un mal día en el Tour y aún así ganar, pero si pierde más tiempo en una o dos etapas, podría encontrarse cuesta abajo", dijo Sanquer.
"Es duro remontar cuando empiezas perdiendo tiempo en una carrera como el Tour", agregó Mottet.
No obstante, el escenario de la carrera podría ayudar a Contador, que no es el tipo de personas que renuncia a dar la batalla.
"Algunos como (Alexandre) Vinokourov o (Jurgen) van den Broeck ya no están porque se cayeron. Son ciclistas de los que hubieran causado estragos en la carrera", dijo Mottet.
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