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Casi cinco décadas después

Dos pilotos mexicanos de Fórmula Uno comparten pista en el Gran Premio de México por primera vez desde 1968

CIUDAD DE MÉXICO (27/OCT/2016).- El Gran Premio de México de esta temporada 2016 de la Fórmula Uno reunirá a dos pilotos mexicanos en pista por primera vez en casi cinco décadas.

La pista del Autódromo Hermanos Rodríguez verá a partir de mañana, y hasta el momento de la carrera del próximo domingo, como Sergio Pérez, de Guadalajara, y Esteban Gutiérrez, de Monterrey, comparten las acciones de la edición número 17 del Gran Premio de México, segunda en su nueva etapa, la cual arrancó desde el año pasado.

A partir de este fin de semana se pondrá fin a una sequía de 48 años sin que dos pilotos mexicanos corran el Gran Premio de su país, pues la última vez que esto ocurrió fue en el Gran Premio de México de 1968, cuando Pedro Rodríguez y Moisés Solana corrían juntos sobre el entonces conocido Autódromo de la Ciudad Deportiva de la Magdalena Mixhuca.

De hecho, Rodríguez y Solana corrieron simultáneamente el Gran Premio de México en seis de las ocho ocasiones que este evento se celebró en su primera etapa entre los años de 1963 y 1970, aunque bien pudieron haber corrido juntos en esas ocho ediciones, pero la racha se vio interrumpida luego de que Solana falleciera un 27 de julio de 1969, casi tres meses antes de la celebración del Gran Premio de México de ese año.

Desde esos años finales de la década de 1960 no se había presentado la oportunidad de que dos mexicanos fueran protagonistas del Gran Premio de su país y ahora, en la nueva era de los motores turbo en la máxima categoría del deporte motor, ese fenómeno se vuelve a presentar.

En 2015, Checo Pérez se convirtió en el tercer piloto mexicano en correr oficialmente un Gran Premio de México, luego de que Pedro Rodríguez fuera el último en hacerlo, en 1970, último año en que se celebró este evento en su primera etapa; Ricardo Rodríguez había sido partícipe de la primera vez que la Fórmula Uno llegaba a nuestro país, un evento de exhibición en 1962, donde desafortunadamente perdería la vida tras un percance en la calificación.

Antes de Checo, el último piloto mexicano en incursionar en la Fórmula Uno fue Héctor Alonso Rebaque, quien inclusive fue hasta propietario de un equipo en la máxima categoría, sin embargo, éste no pudo correr en México, pues fue piloto del Gran Circo entre 1977 y 1981, años en los que el Gran Premio de México no figuraba en el calendario, pues este evento reapareció en 1986, cinco años después de la salida de Rebaque de la categoría.

Para Esteban Gutiérrez será la segunda ocasión en la que esté presente en el Gran Premio, pero primera como parte de las actividades en pista. En 2015, el regiomontano vino al Hermanos Rodríguez como piloto reserva de la escudería Ferrari.

El Gran Premio de México es otro boleto

Al llegar al Aeropuerto Internacional Benito Juárez, la pregunta que se escucha en los pasillos es si aún hay boletos disponibles; sin embargo, en esta ocasión la gente no habla de un partido de futbol, aún con el Chivas vs. América que se jugaba por la noche en el Estadio Azteca, se referían al Gran Premio de México.

Paulina y Arantxa son dos de las miles de personas que se han contagiado de la emoción de esta fiesta; sin embargo, aún no tienen los boletos.

Al intentar comprarlos por Internet, en la página del Gran Premio, notaron que la venta está limitada a únicamente dos tarjetas bancarias, pero ellas no cuentan con éstas.

Decidieron llamar al centro telefónico, pero la situación fue la misma, la venta tenía “restricciones”.

Finalmente optaron por hacer la compra de forma “tradicional” y acudir a un centro de venta ubicado en la zona de Polanco.

Sí encontraron entradas, pero no juntas, por lo que tendrán que disfrutar la fiesta en asientos separados.

Patricia Gallardo / Enviada

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