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Brasil enmarca emotivo final de temporada de la F1
Fue la última carrera del año y Vettel sube al podio afianzando su dominio
Antes de la largada, las expectativas de lluvia eran elevadas, tendencia que se mantuvo a lo largo de una competencia que inició en seco y terminó con un alto porcentaje de humedad y gotas de lluvia en el sector 2 y 3. Ante la incertidumbre de que un chubasco pudiera presentarse, los equipos buscaban una estrategia que les permitiera reaccionar de inmediato.
Así, la parrilla montó llantas de compuesto medio para iniciar, excepto Jenson Button ( McLaren) y Esteban Gutiérrez (Sauber), que montaron llantas duras. Contrario a lo que se pudiera pensar, el compuesto duro fue el que mejor se desempeñó en la pista, siendo la goma mejor adaptada a Interlagos. Esto lo demostró Ferrari, cuando Massa y Alonso marcaron algunos récords por giro.
En la arrancada, Vettel no pudo traccionar bien el RB9 y esto lo aprovechó Nico Rosberg (Mercedes) para ganarle la primera posición en la curva 1. Pero el campeón no bajaría los brazos y contestó de forma contundente al arrebatar una vuelta más tarde el primer lugar. Luego, no soltaría más la punta, enfilándose a una nueva victoria.
Muy temprano, Romain Grosjean (Lotus) dejaría la competencia tras reventarse el motor de su E21, en un cierre decepcionante para el piloto francés, que venía embalado con varios podios esta temporada y que Interlagos pintaba para repetir la hazaña. El resto del día sería un paseo para Lotus, ya que Heikki Kovalainen no pudo hacer mucho terminando en la posición 14 y lapeado.
Hacia la vuelta 20 avisaron por radio a Fernando Alonso que la lluvia sería inminente en la próxima media hora, por lo que a mitad de carrera podría cambiar la perspectiva de la carrera, pero no pasó a mayores. Sin embargo, la utilización de llantas de compuesto intermedio o intenso para lluvia, estaban listos para salir en cualquier momento.
Los Ferrari montaron llanta dura en su primer cambio y, tanto Massa como Alonso, marcaron récords en Interlagos, con mucho mejor rendimiento que replicaron otros pilotos.
Cuando los Mercedes parecía que sorprenderían, perdieron gas desde las primeras vueltas, pero pudieron mantenerse dentro de los punteros. Un encontronazo entre los autos de Hamilton y Bottas (Williams) en la curva 4, cuando se corría la vuelta 52, dejó fuera al finlandés, mientras los comisarios castigaron con una pasada lenta en pits a Hamilton por provocar la colisión.
Pero no sería el único castigo. Vueltas antes, cuando Hamilton buscaba pelear la quinta posición de Felipe Massa, en la vuelta 29, el brasileño pisó la línea blanca del pitlane, por lo que sería sancionado. Entonces, Hamilton esperó pacientemente la salida de Massa para ir a boxes y rebasarlo sin desgastarse.
El brasileño cumplió su castigo en la vuelta 36, haciendo gestos de molestia en su pasada lenta en pits, que echó a perder una gran carrera y de paso dejar sin importantes puntos a Ferrari en la búsqueda del subcampeonato de constructores, que quedó en manos de Mercedes. Massa salió furioso y detrás de Pérez, que era P7, por lo que el mexicano tendría que contener la furia del brasileño.
El Gran Premio de Brasil tuvo su toque de emoción al final, con la lluvia cayendo ligeramente, mientras Vettel perdía de forma extraña rendimiento, siendo superado por un par de autos que venían lapeados.
Entonces Vettel entró intempestivamente a pits, cuando el equipo estaba esperando a Webber, lo que creó una confusión y pérdida de tiempo para ambos pilotos. Webber tuvo que esperar algunos segundos para que le montaran llantas nuevas, en lo que fue una rara situación en el pit de Red Bull.
Al final, Vettel ganaría con un poco de sudor su novena carrera de forma consecutiva, la número 13 de esta temporada, empatando el récord de Michael Schumacher cuando en 2004 ganó 13 de 18 carreras de aquella épica temporada con Ferrari. Al mismo tiempo, Vettel consiguió su victoria 39 histórica, y está a dos del mítico Ayrton Senna.
EL INFORMADOR/ MARIO CASTILLO
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