Deportes

Blindan el Estadio Jalisco para el Clásico de Liguilla

Autoridades realizan un operativo de seguridad en las inmediaciones y zonas aledañas para evitar cualquier incidente

GUADALAJARA, JALISCO (17/MAY/2015).- No era para menos, la seguridad en el Estadio Jalisco estuvo al rojo vivo y prácticamente blindaron las inmediaciones y zonas aledañas para evitar cualquier incidente.
 
La vuelta de los Cuartos de Final del Clásico Tapatío entre Atlas y Chivas lo ameritó. Filtros en las inmediaciones, todos con boleto en mano para poder ingresar tan sólo a la explanada, fue la regla de los encargados de la seguridad ciudadana.
 
Hombre por hombre y hasta las damas prácticamente pasaron por la "báscula"; ningún alimento y ningún líquido, y menos objetos que pudieran poner el riesgo a los aficionados que abarrotaron el coloso de la Calzada Independencia.
 
Las inmediaciones del inmueble lucieron divididas entre los colores de los protagonistas. Era tarde de fiesta y la Perla Tapatía tendría un representante en semifinales. El ambiente era inmejorable, sólo era cuestión de redondearla con un digno encuentro de Clásico, que no presentara incidentes.
 
El operativo de seguridad no defraudó, por lo menos previo y durante los primeros minutos del partido se garantizó un ambiente familiar.  Y es que para salvaguardar la integridad de cada uno de los aficionados estuvieron presentes distintas corporaciones como la Fuerza Única, Policía Vial, uniformados Estatales y Municipales, así como Protección Civil y Bomberos.
 
Aunque no se precisó la cifra de elementos antes del encuentro, durante los días previos al duelo se dio a conocer que el operativo de seguridad fue similar al que se presentó en la jornada 12 de la fase regular del torneo entre estos mismos equipos, es decir, un aproximado de 700 uniformados, aunado al personal privado.
 
Pero los antecedentes de violencia estaban en la memoria por ser un cotejo de alto riesgo. Incluso, los mismos jugadores hicieron a un llamado durante la semana por un encuentro sin incidentes. Sólo era cuestión de disfrutar el partido.
 
EL INFORMADOR / ROBERTO ALARCÓN
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