Deportes
Amarrados desde la banca
El esquema rígido del Tri le resta creatividad al ataque mexicano, que carece de movilidad y sorpresa
GUADALAJARA, JALISCO (20/JUN/2013).- Mucho debate se ha generado alrededor del pésimo desempeño que la Selección mexicana
ha mostrado tanto en el hexagonal de la Concacaf como en la Copa Confederaciones.
Después del patético partido del capitán “Maza” Rodríguez ante Italia, el central del América tuvo un partido correcto ante Brasil, en el que pocas veces fue exigido, ya que el ataque carioca se enfoca en las bandas. Aun así, participa en los dos goles brasileños. En el primero, corta con la cabeza un centro pero lo deja dentro del área y por el centro, que luego aprovecha Neymar. En el segundo, “apoya” a Hiram Mier en la marca a Neymar, pero no lo hace de forma escalonada, quedando absurdamente fuera de la jugada al llevarse el brasileño al defensor del Monterrey. Y recalcar que entonces se queda mirando sin moverse de su lugar.
Carlos Salcido comenzó como medio de contención, posición que tiene como función primordial recuperar el balón y no perderlo. Sin embargo, el jugador de Tigres recuperó como mediocampista únicamente tres balones y perdió ocho. Luego reubicado como lateral izquierdo, perdió otros cinco balones sin recuperar ninguno.
Gerardo Torrado se caracteriza por su entrega y por no aportar al frente como medio de contención. El cruzazulino recuperó ocho balones y perdió 10.
Ninguno de los dos contenciones generó ni un solo pase que creara una situación de peligro, y Salcido se apresuró un par de veces a disparar desde larga distancia.
Giovani dos Santos es el único jugador con capacidad y atrevimiento para desbordar, y se vio favorecido con el adelantamiento de los defensas laterales mexicanos, que subieron más que contra Italia. Dos Santos juega mucho mejor llegando de atrás y desde el costado derecho, que cuando “Chepo” lo ubica delante del “Chicharito” y por izquierda.
Javier Hernández es un cazagolero de clase mundial. Como tal, su hábitat está dentro del área contraria, pero con el Tri se le asignan funciones en las que poco puede aportar, botándose a las bandas y bajando para acarrear balones. Además, cuando “Chicharito” deja el centro del ataque, no hay compañero que ocupe esa posición. Hernández es el hombre que culmina las jugadas. Puede crear espacios sin balón con sus movimientos, pero no con el balón en sus pies fuera del área.
Poco se puede hacer si en todo el partido tu centro delantero toca un solo balón en el área contraria. Eso le pasó al “Chicharito”, y eso sucede por la nula capacidad de llegar acompañados, y porque el único que se anima a desbordar por México es Giovani.
MARCADOR MORAL
Conteo de llegadas al área rival
Brasil:13
Creadas a los minutos 3, 4, 6, 9 (gol), 13, 14, 23; 55, 56, 63, 65, 67, 90+3 (gol)
México:9
Creadas a los minutos 6, 16, 37; 59, 69, 75, 80, 81, 90+1
LA CIFRA
1 balón tocó el “Chicharito” en el área de Brasil en todo el partido
ha mostrado tanto en el hexagonal de la Concacaf como en la Copa Confederaciones.
Después del patético partido del capitán “Maza” Rodríguez ante Italia, el central del América tuvo un partido correcto ante Brasil, en el que pocas veces fue exigido, ya que el ataque carioca se enfoca en las bandas. Aun así, participa en los dos goles brasileños. En el primero, corta con la cabeza un centro pero lo deja dentro del área y por el centro, que luego aprovecha Neymar. En el segundo, “apoya” a Hiram Mier en la marca a Neymar, pero no lo hace de forma escalonada, quedando absurdamente fuera de la jugada al llevarse el brasileño al defensor del Monterrey. Y recalcar que entonces se queda mirando sin moverse de su lugar.
Carlos Salcido comenzó como medio de contención, posición que tiene como función primordial recuperar el balón y no perderlo. Sin embargo, el jugador de Tigres recuperó como mediocampista únicamente tres balones y perdió ocho. Luego reubicado como lateral izquierdo, perdió otros cinco balones sin recuperar ninguno.
Gerardo Torrado se caracteriza por su entrega y por no aportar al frente como medio de contención. El cruzazulino recuperó ocho balones y perdió 10.
Ninguno de los dos contenciones generó ni un solo pase que creara una situación de peligro, y Salcido se apresuró un par de veces a disparar desde larga distancia.
Giovani dos Santos es el único jugador con capacidad y atrevimiento para desbordar, y se vio favorecido con el adelantamiento de los defensas laterales mexicanos, que subieron más que contra Italia. Dos Santos juega mucho mejor llegando de atrás y desde el costado derecho, que cuando “Chepo” lo ubica delante del “Chicharito” y por izquierda.
Javier Hernández es un cazagolero de clase mundial. Como tal, su hábitat está dentro del área contraria, pero con el Tri se le asignan funciones en las que poco puede aportar, botándose a las bandas y bajando para acarrear balones. Además, cuando “Chicharito” deja el centro del ataque, no hay compañero que ocupe esa posición. Hernández es el hombre que culmina las jugadas. Puede crear espacios sin balón con sus movimientos, pero no con el balón en sus pies fuera del área.
Poco se puede hacer si en todo el partido tu centro delantero toca un solo balón en el área contraria. Eso le pasó al “Chicharito”, y eso sucede por la nula capacidad de llegar acompañados, y porque el único que se anima a desbordar por México es Giovani.
MARCADOR MORAL
Conteo de llegadas al área rival
Brasil:13
Creadas a los minutos 3, 4, 6, 9 (gol), 13, 14, 23; 55, 56, 63, 65, 67, 90+3 (gol)
México:9
Creadas a los minutos 6, 16, 37; 59, 69, 75, 80, 81, 90+1
LA CIFRA
1 balón tocó el “Chicharito” en el área de Brasil en todo el partido
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