Cultura
Una tarde musical al estilo Hollywood
El concierto fue un repertorio con obras de compositores estadounidenses con piezas vinculadas al séptimo arte
GUADALAJARA, JALISCO (25/MAY/2014).-En el programa del
Festival Cultural de Mayo dedicado a la región de California se dispuso un concierto con la Filarmónica de Jalisco y un repertorio con obras de compositores estadounidenses con piezas vinculadas al séptimo arte, bajo el nombre de Hollywood Afternoon, por ser reconocido que Hollywood (Ca.) es la meca del cine comercial. El encargado de tomar la batuta fue el director invitado Yoav Talmi, músico israelí que ha dirigido alrededor del mundo, además de contar con una extensa producción discográfica en varias casas disqueras dedicadas a la música orquestal.
Minutos después del mediodía del domingo la gente seguía llegando a la taquilla del Teatro Degollado, y aunque no se agotaron las entradas para el recinto sí hubo una buena respuesta por parte del público que se congregó para escuchar a varios compositores que si bien no son tan renombrados dentro de los círculos comerciales, su música sí está fuertemente arraigada en la cultura popular gracias a las películas. John Adams fue el compositor que abrió la presentación con Short Ride on a Fast Machine, una pieza breve y vertiginosa que pese a su calidad apenas alcanzó para calentar los motores para lo que vendría.
El Concierto para violín y orquesta en Re, op. 35 de Erich Korngold fue el resto del contenido de la primera parte del programa. A pesar de que el compositor nació a finales del siglo XIX en el todavía existente Imperio Austrohúngaro, pasó gran parte de su vida en Estados Unidos escribiendo música para películas en Hollywood. La violinista invitada para darle vida a su partitura fue la joven británica Chloë Hanslip, quien con menos de 30 años ya ha grabado para Naxos y Warner Classics. La lectura del concierto para violín fue mesurada y provocó varios "¡Bravo!" entonados con entusiasmo desde el público. El único detalle fue en la sucesión del primer al segundo movimiento, interrumpido por algunos aplausos. Esto se repitió en varias ocasiones en la segunda parte del programa en las obras de Aaron Copland y John Williams, al grado que el director invitado Talmi llegó a levantar la mano pidiendo un poco de silencio para continuar con su trabajo.
La segunda parte comenzó con la música alegre de Copland, de nombre Rodeo: cuatro episodios de danza, una suite en cuatro movimientos que siguió subiendo los ánimos de los asistentes con sus ritmos juguetones y el fuerte papel de las percusiones y los cellos. Para cerrar la tarde de música de película se eligió un plato fuerte, bien conocido por el público cinéfilo: de John Williams, la suite con la banda sonora de La guerra de las galaxias (Star Wars), célebre filme de Georges Lucas. Su tono épico, la remembranza de las batallas interestelares y la intensidad que la partitura de Williams dotó a la película hacen de la interpretación un suceso emotivo, y así lo demostró el público que recibió la obra con varios minutos de aplausos al final del concierto; aunque no hubo encore, en más de una ocasión Yoav Talmi regresó al escenario para agradecer a la orquesta y a su público.
En el lobby del teatro se anunciaban los próximos eventos a corto y largo plazo: por un lado el proyecto de intervención sonora al Teatro Degollado (domingo 25 y lunes 26), todavía dentro del Festival Cultural de Mayo, además de la segunda temporada del año para la Orquesta Filarmónica de Jalisco, en la que se presentarán obras de Verdi, Strauss, Gershwin y Bernstein, entre otros.
EL INFORMADOR /JORGE PÉREZ
Minutos después del mediodía del domingo la gente seguía llegando a la taquilla del Teatro Degollado, y aunque no se agotaron las entradas para el recinto sí hubo una buena respuesta por parte del público que se congregó para escuchar a varios compositores que si bien no son tan renombrados dentro de los círculos comerciales, su música sí está fuertemente arraigada en la cultura popular gracias a las películas. John Adams fue el compositor que abrió la presentación con Short Ride on a Fast Machine, una pieza breve y vertiginosa que pese a su calidad apenas alcanzó para calentar los motores para lo que vendría.
El Concierto para violín y orquesta en Re, op. 35 de Erich Korngold fue el resto del contenido de la primera parte del programa. A pesar de que el compositor nació a finales del siglo XIX en el todavía existente Imperio Austrohúngaro, pasó gran parte de su vida en Estados Unidos escribiendo música para películas en Hollywood. La violinista invitada para darle vida a su partitura fue la joven británica Chloë Hanslip, quien con menos de 30 años ya ha grabado para Naxos y Warner Classics. La lectura del concierto para violín fue mesurada y provocó varios "¡Bravo!" entonados con entusiasmo desde el público. El único detalle fue en la sucesión del primer al segundo movimiento, interrumpido por algunos aplausos. Esto se repitió en varias ocasiones en la segunda parte del programa en las obras de Aaron Copland y John Williams, al grado que el director invitado Talmi llegó a levantar la mano pidiendo un poco de silencio para continuar con su trabajo.
La segunda parte comenzó con la música alegre de Copland, de nombre Rodeo: cuatro episodios de danza, una suite en cuatro movimientos que siguió subiendo los ánimos de los asistentes con sus ritmos juguetones y el fuerte papel de las percusiones y los cellos. Para cerrar la tarde de música de película se eligió un plato fuerte, bien conocido por el público cinéfilo: de John Williams, la suite con la banda sonora de La guerra de las galaxias (Star Wars), célebre filme de Georges Lucas. Su tono épico, la remembranza de las batallas interestelares y la intensidad que la partitura de Williams dotó a la película hacen de la interpretación un suceso emotivo, y así lo demostró el público que recibió la obra con varios minutos de aplausos al final del concierto; aunque no hubo encore, en más de una ocasión Yoav Talmi regresó al escenario para agradecer a la orquesta y a su público.
En el lobby del teatro se anunciaban los próximos eventos a corto y largo plazo: por un lado el proyecto de intervención sonora al Teatro Degollado (domingo 25 y lunes 26), todavía dentro del Festival Cultural de Mayo, además de la segunda temporada del año para la Orquesta Filarmónica de Jalisco, en la que se presentarán obras de Verdi, Strauss, Gershwin y Bernstein, entre otros.
EL INFORMADOR /JORGE PÉREZ
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