Cultura
Un reconocimiento a la imaginación
Entre aplausos, estudiantes de primaria y secundaria recibieron el galardón que impulsa el programa INFOlectura
GUADALAJARA, JALISCO (30/NOV/2012).- Sentado sobre una silla en la sus pies no alcanzan a tocar el suelo, Kevin Castañeda espera a que comience la premiación del 5to. Concurso Estatal de Lectura Infantil y Juvenil Mariano Azuela, que organiza INFOlectura, un programa dedicado a niños y jóvenes que impulsa El INFORMADOR.
“Venir a la FIL es de una gran satisfacción, pero lo más importante es que a quien celebramos sean los niños, que es la esencia fundamental para el futuro de este país. Independientemente de que los padres de familia, los maestros, o los adultos hagamos esfuerzos para lograr que los niños tengan un hábito lector, no se va a lograr si ellos no tienen el interés de hacerlo, o no tienen las herramientas que les permitan acercarse a la palabra impresa”, explicó el director del programa de promoción de lectura Carlos Flores, quien además entregó un reconocimiento a Pablo Ontiveros, director del Programa Estatal de Lectura, por su apoyo.
Más tarde, Mónica Martínez, secretaria ejecutiva del Consejo Estatal para la Cultura y las Artes (CECA) tomó la palabra y felicitó al programa INFOlectura por sus 13 años de impulsar el gusto por los libros en niños y jóvenes. Además, señaló que este quinto concurso tuvo la característica de ser un espacio incluyente, pues se tomaron en cuenta estudiantes de educación especial.
“Los niños nos enseñaron que no hay que tenerle miedo a las matemáticas, porque son muy dulces”, comentó Mónica Martínez, al momento, un pequeño de uniforme verde sentado en el público susurró a su compañera de al lado: “No es cierto”.
El rango de edades de los participantes en el Concurso de Lectura se hizo evidente en salón de la ceremonia. En orden, los chicos adelante y los más grandes atrás, tienen diferentes reacciones al acto protocolario. Algunos más pequeños, desde sus asientos juegan a mover los pies en el aire; atrás, los de secundaria son más discretos y hay quienes voltean sus ojos al celular. La falta de atención termina cuando comienzan las menciones a los premiados.
Dicción, ritmo, modulación, claridad de ideas, ortografía, expresión corporal, gesticulación, creatividad y la comprensión del texto leído, fueron los criterios tomados en cuenta por el jurado para premiar a Kevin Castañeda y otros niños de primaria y secundaria.
“No festejo, nomás en mi imaginación”, dijo Kevin, ganador del premio por segunda vez. En el concurso, a él le tocó leer un libro y después platicarlo; lo recuerda bien, se trataba de no hacer travesuras, “pero yo sí hago”, confesó.
Los pequeños estudiantes estallaron en aplausos y gritos adelantándose al final del acto. Lo que quieren es celebrar el reconocimiento de sus amigos; al festejo se une el panel integrado por Pablo Ontiveros, Mónica Martínez, Carlos Flores, Marilú Hashimoto, así como Agueda Gómez, representante de la Secretaría de Educación Jalisco (SEJ); Arturo Camacho, presidente del CECA; la investigadora Estela Roselló y Juvenal Esparza, presentador.
“Venir a la FIL es de una gran satisfacción, pero lo más importante es que a quien celebramos sean los niños, que es la esencia fundamental para el futuro de este país. Independientemente de que los padres de familia, los maestros, o los adultos hagamos esfuerzos para lograr que los niños tengan un hábito lector, no se va a lograr si ellos no tienen el interés de hacerlo, o no tienen las herramientas que les permitan acercarse a la palabra impresa”, explicó el director del programa de promoción de lectura Carlos Flores, quien además entregó un reconocimiento a Pablo Ontiveros, director del Programa Estatal de Lectura, por su apoyo.
Más tarde, Mónica Martínez, secretaria ejecutiva del Consejo Estatal para la Cultura y las Artes (CECA) tomó la palabra y felicitó al programa INFOlectura por sus 13 años de impulsar el gusto por los libros en niños y jóvenes. Además, señaló que este quinto concurso tuvo la característica de ser un espacio incluyente, pues se tomaron en cuenta estudiantes de educación especial.
“Los niños nos enseñaron que no hay que tenerle miedo a las matemáticas, porque son muy dulces”, comentó Mónica Martínez, al momento, un pequeño de uniforme verde sentado en el público susurró a su compañera de al lado: “No es cierto”.
El rango de edades de los participantes en el Concurso de Lectura se hizo evidente en salón de la ceremonia. En orden, los chicos adelante y los más grandes atrás, tienen diferentes reacciones al acto protocolario. Algunos más pequeños, desde sus asientos juegan a mover los pies en el aire; atrás, los de secundaria son más discretos y hay quienes voltean sus ojos al celular. La falta de atención termina cuando comienzan las menciones a los premiados.
Dicción, ritmo, modulación, claridad de ideas, ortografía, expresión corporal, gesticulación, creatividad y la comprensión del texto leído, fueron los criterios tomados en cuenta por el jurado para premiar a Kevin Castañeda y otros niños de primaria y secundaria.
“No festejo, nomás en mi imaginación”, dijo Kevin, ganador del premio por segunda vez. En el concurso, a él le tocó leer un libro y después platicarlo; lo recuerda bien, se trataba de no hacer travesuras, “pero yo sí hago”, confesó.
Los pequeños estudiantes estallaron en aplausos y gritos adelantándose al final del acto. Lo que quieren es celebrar el reconocimiento de sus amigos; al festejo se une el panel integrado por Pablo Ontiveros, Mónica Martínez, Carlos Flores, Marilú Hashimoto, así como Agueda Gómez, representante de la Secretaría de Educación Jalisco (SEJ); Arturo Camacho, presidente del CECA; la investigadora Estela Roselló y Juvenal Esparza, presentador.
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