Cultura
Un manual para una crisis de liderazgo
Felipe González, ex presidente de España presenta su libro 'En busca de respuestas'
GUADALAJARA, JALISCO (30/NOV/2013).- Un manual para políticos pensantes, así es como Jorge Castañeda presenta el más reciente libro del ex presidente de España, Felipe González, "En busca de respuestas", en la Feria Internacional del Libro (FIL).
Pero el ambicioso texto del ex mandatario socialista no es sólo para políticos: también es para simples mortales, pues el cambio que acarrea la presente crisis económica no se trata de ver quién toma el mando ahora, sino que hay una transformación de la civilización.
Sin embargo, hay alguna otra cosa que los gobernantes actuales podrían aprender: "cuando salí del gobierno, me preocupaba la cantidad de veces que me preguntaban sobre la crisis de liderazgo actual", compartió el autor.
Recordó una anécdota en la que los escritores colombianos Álvaro Mutis y Gabriel García Márquez lo visitaron mientras él era presidente.
Mutis, con la curiosidad que le caracterizaba, le preguntó al presidente en qué consistía la soledad del poder. González señaló un gran teléfono que se encontraba en su despacho conectado a un montón de cables: "La soledad consiste en que éste es el último teléfono que suena, cuando ya no hay más vías, cuando ya no hay a quién consultar".
A manera de pregunta y respuesta, Castañeda pidió al español abundar en algunos de los puntos de su libro relativos a problemas actuales.
"Me he relacionado con personas que no sólo son ignorantes, sino que ignoran que ignoran", dijo al comparar la diferencia entre los ex presidentes norteamericanos Ronald Reagan y George W. Bush III.
"Al menos Reagan sabía que ignoraba y se rodeó de un grupo de gente preparadísima. Al final cumplió la mayor parte de sus promesas de campaña".
Sobre el actual titular del Ejecutivo en ese país, Barack Obama, y el hecho de que su popularidad entre la población vaya decreciendo notoriamente, expresó:
"Obama es un hombre que conceptualiza muy bien, pero que no ejecuta tan bien. Es brillantísimo. Yo soy de los que admiraba su capacidad de ver al mundo con otro foco, pero no creo que logre consolidar su objetivo de hacer un gobierno con mayor sentido social".
A México lo que le hace falta es creérsela, consideró. "El estado de ánimo en Asia es magnífico, la gente piensa que lo que viene por delante es infinitamente mejor (...) En cambio, la dificultad es que los mexicanos no creen".
Su misión con el texto es dejar de manifiesto que la política debe estar siempre al servicio de la gente, y no al tanto de lo que digan las calificadoras de riesgos financieros en aras de mejorar la competitividad.
"Con salarios mas baratos, ni México puede competir con China. La idea no es tener salarios más baratos y mejor productividad, sino tener una mayor productividad pero con salarios cada vez mejores".
EL INFORMADOR / BRENDA RAMOS
Pero el ambicioso texto del ex mandatario socialista no es sólo para políticos: también es para simples mortales, pues el cambio que acarrea la presente crisis económica no se trata de ver quién toma el mando ahora, sino que hay una transformación de la civilización.
Sin embargo, hay alguna otra cosa que los gobernantes actuales podrían aprender: "cuando salí del gobierno, me preocupaba la cantidad de veces que me preguntaban sobre la crisis de liderazgo actual", compartió el autor.
Recordó una anécdota en la que los escritores colombianos Álvaro Mutis y Gabriel García Márquez lo visitaron mientras él era presidente.
Mutis, con la curiosidad que le caracterizaba, le preguntó al presidente en qué consistía la soledad del poder. González señaló un gran teléfono que se encontraba en su despacho conectado a un montón de cables: "La soledad consiste en que éste es el último teléfono que suena, cuando ya no hay más vías, cuando ya no hay a quién consultar".
A manera de pregunta y respuesta, Castañeda pidió al español abundar en algunos de los puntos de su libro relativos a problemas actuales.
"Me he relacionado con personas que no sólo son ignorantes, sino que ignoran que ignoran", dijo al comparar la diferencia entre los ex presidentes norteamericanos Ronald Reagan y George W. Bush III.
"Al menos Reagan sabía que ignoraba y se rodeó de un grupo de gente preparadísima. Al final cumplió la mayor parte de sus promesas de campaña".
Sobre el actual titular del Ejecutivo en ese país, Barack Obama, y el hecho de que su popularidad entre la población vaya decreciendo notoriamente, expresó:
"Obama es un hombre que conceptualiza muy bien, pero que no ejecuta tan bien. Es brillantísimo. Yo soy de los que admiraba su capacidad de ver al mundo con otro foco, pero no creo que logre consolidar su objetivo de hacer un gobierno con mayor sentido social".
A México lo que le hace falta es creérsela, consideró. "El estado de ánimo en Asia es magnífico, la gente piensa que lo que viene por delante es infinitamente mejor (...) En cambio, la dificultad es que los mexicanos no creen".
Su misión con el texto es dejar de manifiesto que la política debe estar siempre al servicio de la gente, y no al tanto de lo que digan las calificadoras de riesgos financieros en aras de mejorar la competitividad.
"Con salarios mas baratos, ni México puede competir con China. La idea no es tener salarios más baratos y mejor productividad, sino tener una mayor productividad pero con salarios cada vez mejores".
EL INFORMADOR / BRENDA RAMOS
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