Cultura
Un libro es una nave espacial, un jardín que llevas en el bolsillo: Hermanos Taibo
Paco y Benito muestran a los comerciantes que cualquier persona puede acercarse a los libros sin necesidad de ser un académico o un letrado
GUADALAJARA, JALISCO (01/DIC/2011).- Entre los puestos donde se exhiben coloridos trajes de china poblana y Juan Dieguito; donde el olor a piel de las chamarras y botas invade los pasillos; a pocos metros de los estantes de madera donde se imponen La Santa Muerte y gran cantidad de líquidos para encantar y conjurar; algo extraño estaba sucediendo, algo que nunca había ocurrido y que cambió por completo la rutina del mercado San Juan de Dios.
Paco y Benito Taibo, dos hermanos polémicos por su manera de contar la historia, criticados pero también amados por su estrategia increíble para que los mexicanos queden atrapados por la lectura; se tomaron el mercado, y entre los sonidos de los pajaritos y pollos y conejos que se venden en el patio central, personificaron a decenas de protagonistas míticos de la literatura, una fórmula “algo esquizofrénica”, como ellos la llamaron, con el único objetivo: seducir a los comerciantes para que se pongan a leer, y para que esto suceda, los hermanos anunciaron que donarán una biblioteca para que todos los trabajadores del mercado se puedan acercar a la lectura “de manera voluntaria, con gusto y sin obligación” esperando que “saquen los libros cuando quieran y que si no los devuelven al menos los presten para que otros los lean”.
Al principio todo era incredulidad
La mesa fría llena de libros de una conocida librería era mirada por compradores y vendedores como eso: una mesa fría; exhibía títulos que ''ni fu ni fa'' para muchos y lo único que se preguntaban esos mercaderes era ''¿ahora aquí qué?'', por los ensayos que se hacía con el sonido.
En el centro, las mesas metálicas fueron cubiertas con zarapes y lucían airosas con los nombres de dos escritores famosos, Paco Taibo y Benito Taibo, además de los de los gerentes del mercado.
Pero la acción empezó cuando Paco empieza su discurso “Leer está asociado lamentablemente con la idea de lo obligatorio, te obligan a leer porque dicen que si lees se te quita lo pendejo, por ejemplo, Calderón lee muchos informes y no se le quita lo pendejo”.
Así los dos hermanos iniciaron con la receta mágica conocida como “Entre Taibos te veas”, programa con el cual han invitado a la lectura a cientos de jóvenes en el país y con la que esperan que los comerciantes y vendedores del tradicional San Juan de Dios conozcan ”cómo el libro ha cambiado nuestras vidas y a todos los que se acercan a él”.
Poco a poco vendedores, amas de casa con la bolsa del mandado, estudiantes y dueños de locales se fueron acercando a escuchar que “la lectura es una nave espacial que llevas en la mochila, un jardín que llevas en el bolsillo” que “leer es de poca madre porque abre puertas, crea mundos, leer es resistir, es crecer”.
Paco y Benito Taibo llegaron al mercado para romper con el estigma de que sólo los académicos y los profesionales podían leer y que el resto, el comerciante, la ama de casa, la empleada doméstica, el cargador; sólo podían dedicarse a su rutina y no pensar.
“Hay libros para aprender y libros para entender al mundo (…) Es mentira que el pueblo no sea culto, al pueblo se la ha negado la posibilidad de que sea culto”, dice Paco, sonrojado de la emoción, también por los aplausos que cada vez eran más fuertes.
“Pensamos que los escritores no hablaban así, que no hablaban con gente como nosotros, a mí ya me dieron ganas de leer” gritaba uno y “queremos que esto se repita, que vengan más escritores a enseñarnos y a explicarnos cómo leer”, dijo otro, la FIL definitivamente se adueñó del mercado.
“Esto es la esquizofrenia de la esquizofrenia”, ríe Benito
Muchos se preguntarán ¿cómo hacen dos escritores que están lanzando sus libros en la FIL para conquistar hasta tal punto a los vendedores de un mercado y llevarlos a leer?, pues con una fórmula muy simple y novedosa “lo leído se incorpora a lo vivido”.
Paco y Benito se fueron convirtiendo en cada uno de los personajes más increíbles de la literatura para mostrarlos como una persona común, que sufre las mismas desgracias de cualquiera, que ama como cualquiera, que se divierte como cualquiera, con defectos y virtudes como cualquiera.
“Soy Peter Pan, tengo derecho a los sueños, a la rebelión, a meterme al mundo de nunca jamás y a alejarme de la vida cotidiana y volver a las pasiones” dijo Benito.
“Soy Espartaco, porque ahí hay un historia de amor y una historia de revolución social; soy Ana Frank, porque existe una forma de entender que ahí, en la noche más oscura, hay esperanza; somos, expresaron, lo que hemos leído; si no fuéramos todo esto, no seríamos nada ni nadie, no estaríamos aquí sentados intentando transmitir la maravilla que significa el libro y la lectura.”, esta es su alquimia.
FRASE
“Los libros comerciales y de fantasía como Harry Potter y Crepúsculo han creado lectores. Por esto funcionan y no como los lectores de auto superación que no pasa nada con ellos. Se ha demostrado que los lectores de fantasía evolucionan en su lectura… Benditos sean los grandes autores del Best Seller”
EL INFORMADOR / NATALIA MATALLANA
Paco y Benito Taibo, dos hermanos polémicos por su manera de contar la historia, criticados pero también amados por su estrategia increíble para que los mexicanos queden atrapados por la lectura; se tomaron el mercado, y entre los sonidos de los pajaritos y pollos y conejos que se venden en el patio central, personificaron a decenas de protagonistas míticos de la literatura, una fórmula “algo esquizofrénica”, como ellos la llamaron, con el único objetivo: seducir a los comerciantes para que se pongan a leer, y para que esto suceda, los hermanos anunciaron que donarán una biblioteca para que todos los trabajadores del mercado se puedan acercar a la lectura “de manera voluntaria, con gusto y sin obligación” esperando que “saquen los libros cuando quieran y que si no los devuelven al menos los presten para que otros los lean”.
Al principio todo era incredulidad
La mesa fría llena de libros de una conocida librería era mirada por compradores y vendedores como eso: una mesa fría; exhibía títulos que ''ni fu ni fa'' para muchos y lo único que se preguntaban esos mercaderes era ''¿ahora aquí qué?'', por los ensayos que se hacía con el sonido.
En el centro, las mesas metálicas fueron cubiertas con zarapes y lucían airosas con los nombres de dos escritores famosos, Paco Taibo y Benito Taibo, además de los de los gerentes del mercado.
Pero la acción empezó cuando Paco empieza su discurso “Leer está asociado lamentablemente con la idea de lo obligatorio, te obligan a leer porque dicen que si lees se te quita lo pendejo, por ejemplo, Calderón lee muchos informes y no se le quita lo pendejo”.
Así los dos hermanos iniciaron con la receta mágica conocida como “Entre Taibos te veas”, programa con el cual han invitado a la lectura a cientos de jóvenes en el país y con la que esperan que los comerciantes y vendedores del tradicional San Juan de Dios conozcan ”cómo el libro ha cambiado nuestras vidas y a todos los que se acercan a él”.
Poco a poco vendedores, amas de casa con la bolsa del mandado, estudiantes y dueños de locales se fueron acercando a escuchar que “la lectura es una nave espacial que llevas en la mochila, un jardín que llevas en el bolsillo” que “leer es de poca madre porque abre puertas, crea mundos, leer es resistir, es crecer”.
Paco y Benito Taibo llegaron al mercado para romper con el estigma de que sólo los académicos y los profesionales podían leer y que el resto, el comerciante, la ama de casa, la empleada doméstica, el cargador; sólo podían dedicarse a su rutina y no pensar.
“Hay libros para aprender y libros para entender al mundo (…) Es mentira que el pueblo no sea culto, al pueblo se la ha negado la posibilidad de que sea culto”, dice Paco, sonrojado de la emoción, también por los aplausos que cada vez eran más fuertes.
“Pensamos que los escritores no hablaban así, que no hablaban con gente como nosotros, a mí ya me dieron ganas de leer” gritaba uno y “queremos que esto se repita, que vengan más escritores a enseñarnos y a explicarnos cómo leer”, dijo otro, la FIL definitivamente se adueñó del mercado.
“Esto es la esquizofrenia de la esquizofrenia”, ríe Benito
Muchos se preguntarán ¿cómo hacen dos escritores que están lanzando sus libros en la FIL para conquistar hasta tal punto a los vendedores de un mercado y llevarlos a leer?, pues con una fórmula muy simple y novedosa “lo leído se incorpora a lo vivido”.
Paco y Benito se fueron convirtiendo en cada uno de los personajes más increíbles de la literatura para mostrarlos como una persona común, que sufre las mismas desgracias de cualquiera, que ama como cualquiera, que se divierte como cualquiera, con defectos y virtudes como cualquiera.
“Soy Peter Pan, tengo derecho a los sueños, a la rebelión, a meterme al mundo de nunca jamás y a alejarme de la vida cotidiana y volver a las pasiones” dijo Benito.
“Soy Espartaco, porque ahí hay un historia de amor y una historia de revolución social; soy Ana Frank, porque existe una forma de entender que ahí, en la noche más oscura, hay esperanza; somos, expresaron, lo que hemos leído; si no fuéramos todo esto, no seríamos nada ni nadie, no estaríamos aquí sentados intentando transmitir la maravilla que significa el libro y la lectura.”, esta es su alquimia.
FRASE
“Los libros comerciales y de fantasía como Harry Potter y Crepúsculo han creado lectores. Por esto funcionan y no como los lectores de auto superación que no pasa nada con ellos. Se ha demostrado que los lectores de fantasía evolucionan en su lectura… Benditos sean los grandes autores del Best Seller”
EL INFORMADOR / NATALIA MATALLANA
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