Cultura
Teatro físico para 'despertar' a Dalí
El show de 'La Verità', suma de danza, circo y cabaret, llega al Teatro Diana para adentrarse en los sueños del público; está inspirado en la vejez del pintor surrealista
GUADALAJARA, JALISCO (05/MAY/2015).- El cuerpo va más allá de los sentidos cuando se trata de conjugarlo con el teatro físico, donde la danza, las acrobacias, el ''clown'' y la genialidad de un artista del siglo pasado como Salvador Dalí dan como resultado el espectáculo multidisciplinario “La verità”, de la compañía Finzi Pasca.
El montaje que acaba de estrenarse en la Ciudad de México y que este 20 y 21 de mayo se instalará en el Teatro Diana ofrece una visión del arte surrealista de uno de los pintores más emblemáticos de Europa, en una sinergia donde las expresiones corporales cobran protagonismo.
Un lienzo de gran formato hecho por el español Salvador Dalí que recrea a Tristán e Isolda en una escena de amor, locura y drama, es el vínculo primordial en la realización de este espectáculo donde hay bailarines de Suiza, Italia y Paraguay.
“La verità” se ha presentado desde el 2012 en los escenarios europeos y esta vez toca el turno de que el público mexicano lo disfrute.
Al respecto, Daniele Finzi Pasca, director de la puesta en escena, comparte que aunque Dalí no es de sus artistas predilectos sí le interesó su vida personal, y en “La verità” indaga en los años en los que el español ya era viejo y mostraba una faceta más tierna.
“No es el pintor que más adoro, pero este pintor me hizo (sentir) algo. En el 'show' se habla más de Dalí en el tiempo de cuando se vuelve viejito, cuando ya perdió a su esposa Gala y es la parte en la que Dalí se vuelve más dulce, tierno y profundo… Más volcado a la interioridad”.
El público tapatío podrá observar rutinas circenses, malabares y dinamismo, pero todo en un sentido más estético y sincrónico que comulga con la danza contemporánea. Podrá disfrutar de la reinterpretación que hacen estos artistas de las pinturas más emblemáticas de Dalí.
De bailarines y contorsionistas
Félix Salas, de Paraguay, bailarín que tiene ochos años en la compañía y que realiza contorsionismo en el espectáculo, señala que ellos tienen toda la libertad creativa para realizar sus números; sin embargo, Daniele y los demás productores tiene una idea concreta del punto donde deben trabajar su vena artística.
“Para hacer las rutinas tuvimos un tiempo de creación en Montreal y Suiza. Daniele nos hace probar cosas nuevas para sacar nuestra luz interior”.
Félix apoya a Daniele al decir que ellos tampoco son fanáticos del pintor español, pero que lo han abordado desde la manera más humana y amorosa posible porque el teatro de la caricia, que es el que ellos hacen, tiene la encomienda de hacer vibrar al público por medio de los sentimientos que puedan moverles con sus números acrobáticos.
“Dalí llegó a nosotros sin esperarlo, fue una sorpresa, tuvimos que informarnos sobre él, leer diarios, conocer gente cercana a él. Más que por su obra, lo trajimos a nosotros como un ser humano. Y el teatro de la caricia siempre busca llegar al público para tocar sus corazones, lo hacemos desde el humor, y a veces tenemos tonos más melancólicos”.
La unión de Dolores Heredia y Daniele
En este espectáculo multidisciplinario, la actriz Dolores Heredia funge como productora, pero su relación con el director Daniele va más allá, pues fueron pareja sentimental por más de 10 años y ella ha estado muy pendiente de la compañía teatral con quien ha hecho una mancuerna desde hace varios años; primero con el nombre de Teatro Sunil y ahora como Finzi Pasca.
“Siento que estoy cumpliendo (con el 'show') como cuando tú sabes que tienes que hacer algo, como la obediencia; sigo hermanada con esta compañía, con lo que hace Daniele, no puedo decir que es una obligación, pero es un acto natural para mí y lo voy a seguir haciendo mientras tenga esa posibilidad”.
Dolores platica que ella y Daniele se conocieron en 1994 cuando él hizo por primera vez “Icaro” en México. “En la primera función, escoge a un espectador y me escogió a mí. Después de eso nos enamoramos, nos casamos, vivimos juntos 10 años… Me hice parte de la compañía. Durante todos esos años nosotros mantuvimos una relación de profunda amistad, cada quien haciendo lo suyo, y pues bueno, la vida sigue”.
Daniele enfatiza que sus artistas y él siempre trabajan con tranquilidad y equilibrio para estar más listos ante los detalles que se siguen puliendo en “La verità”. “Un espectáculo nunca está terminado, se prepara como una boda, hay fecha y luego llega el estreno y después es como el vino, el tiempo lo va a madurar, nosotros seguimos teniendo ensayos, vamos puliendo”.
El montaje que acaba de estrenarse en la Ciudad de México y que este 20 y 21 de mayo se instalará en el Teatro Diana ofrece una visión del arte surrealista de uno de los pintores más emblemáticos de Europa, en una sinergia donde las expresiones corporales cobran protagonismo.
Un lienzo de gran formato hecho por el español Salvador Dalí que recrea a Tristán e Isolda en una escena de amor, locura y drama, es el vínculo primordial en la realización de este espectáculo donde hay bailarines de Suiza, Italia y Paraguay.
“La verità” se ha presentado desde el 2012 en los escenarios europeos y esta vez toca el turno de que el público mexicano lo disfrute.
Al respecto, Daniele Finzi Pasca, director de la puesta en escena, comparte que aunque Dalí no es de sus artistas predilectos sí le interesó su vida personal, y en “La verità” indaga en los años en los que el español ya era viejo y mostraba una faceta más tierna.
“No es el pintor que más adoro, pero este pintor me hizo (sentir) algo. En el 'show' se habla más de Dalí en el tiempo de cuando se vuelve viejito, cuando ya perdió a su esposa Gala y es la parte en la que Dalí se vuelve más dulce, tierno y profundo… Más volcado a la interioridad”.
El público tapatío podrá observar rutinas circenses, malabares y dinamismo, pero todo en un sentido más estético y sincrónico que comulga con la danza contemporánea. Podrá disfrutar de la reinterpretación que hacen estos artistas de las pinturas más emblemáticas de Dalí.
De bailarines y contorsionistas
Félix Salas, de Paraguay, bailarín que tiene ochos años en la compañía y que realiza contorsionismo en el espectáculo, señala que ellos tienen toda la libertad creativa para realizar sus números; sin embargo, Daniele y los demás productores tiene una idea concreta del punto donde deben trabajar su vena artística.
“Para hacer las rutinas tuvimos un tiempo de creación en Montreal y Suiza. Daniele nos hace probar cosas nuevas para sacar nuestra luz interior”.
Félix apoya a Daniele al decir que ellos tampoco son fanáticos del pintor español, pero que lo han abordado desde la manera más humana y amorosa posible porque el teatro de la caricia, que es el que ellos hacen, tiene la encomienda de hacer vibrar al público por medio de los sentimientos que puedan moverles con sus números acrobáticos.
“Dalí llegó a nosotros sin esperarlo, fue una sorpresa, tuvimos que informarnos sobre él, leer diarios, conocer gente cercana a él. Más que por su obra, lo trajimos a nosotros como un ser humano. Y el teatro de la caricia siempre busca llegar al público para tocar sus corazones, lo hacemos desde el humor, y a veces tenemos tonos más melancólicos”.
La unión de Dolores Heredia y Daniele
En este espectáculo multidisciplinario, la actriz Dolores Heredia funge como productora, pero su relación con el director Daniele va más allá, pues fueron pareja sentimental por más de 10 años y ella ha estado muy pendiente de la compañía teatral con quien ha hecho una mancuerna desde hace varios años; primero con el nombre de Teatro Sunil y ahora como Finzi Pasca.
“Siento que estoy cumpliendo (con el 'show') como cuando tú sabes que tienes que hacer algo, como la obediencia; sigo hermanada con esta compañía, con lo que hace Daniele, no puedo decir que es una obligación, pero es un acto natural para mí y lo voy a seguir haciendo mientras tenga esa posibilidad”.
Dolores platica que ella y Daniele se conocieron en 1994 cuando él hizo por primera vez “Icaro” en México. “En la primera función, escoge a un espectador y me escogió a mí. Después de eso nos enamoramos, nos casamos, vivimos juntos 10 años… Me hice parte de la compañía. Durante todos esos años nosotros mantuvimos una relación de profunda amistad, cada quien haciendo lo suyo, y pues bueno, la vida sigue”.
Daniele enfatiza que sus artistas y él siempre trabajan con tranquilidad y equilibrio para estar más listos ante los detalles que se siguen puliendo en “La verità”. “Un espectáculo nunca está terminado, se prepara como una boda, hay fecha y luego llega el estreno y después es como el vino, el tiempo lo va a madurar, nosotros seguimos teniendo ensayos, vamos puliendo”.
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