Cultura
Rinde Orquesta Viva Vivaldi homenaje a Haendel y Mendelssohn
La agrupación integrada por 13 solistas especialistas en música barroca, recordó los 250 años de la muerte de quien fuera una de las cumbres del Barroco y uno de los mejores y más influyentes compositores de la música occidental: G. F. Haendel
CIUDAD DE MÉXICO.- Con la participación de la flautista mexicano estadounidense Elena Durán, la Orquesta Viva Vivaldi rindió anoche un homenaje musical a los compositores alemanes Georg Friedrich Haendel (1685-1759) y Felix Mendelssohn (1809-1847), en el Casino Español, de esta ciudad.
En el marco de la novena edición del Festival Internacional Viva Vivaldi, la agrupación integrada por 13 solistas especialistas en música barroca, recordó los 250 años de la muerte de quien fuera una de las cumbres del Barroco y uno de los mejores y más influyentes compositores de la música occidental: G. F. Haendel.
Bajo la dirección del concertista mexicano Héctor Guzmán, se rememoraron además los 200 años del natalicio Mendelssohn, uno de los mejores representantes del periodo romántico de la música europea.
En el segundo concierto de este festejo, el programa estuvo integrado por obras de compositores británicos, austriacos, italianos y alemanes.
Al iniciar el repertorio, el conjunto musical ataviado a la usanza de la época de Vivaldi, abrió con "Concerto grosso", de Haendel, primer compositor moderno en haber adaptado y enfocado su música para satisfacer los gustos y necesidades del público, en vez de los de la nobleza y de los mecenas, como era habitual.
Siguió "Cinco bagatelas", de Gerard Finzi, una obra compuesta por cinco movimientos, en los que participó la flautista Elena Durán, quien se llevó una gran ovación de cerca de 200 personas.
Tras su participación, Durán, quien ha conquistado escenarios de Europa, Medio Oriente y América, agradeció al director del Festival Viva Vivaldi Michael Meissner, por la realización del festejo, así como por la invitación.
Minutos después se escuchó "5 Minuetos y 6 Tríos" del austriaco Schubert, considerado como uno de los continuadores del romanticismo musical iniciado por Ludwig van Beethoven.
Para la segunda mitad, volvió a aparecer sobre el escenario la artista de talla internacional Elena Durán, quien acompañada por el conjunto musical admirador de Vivaldi, interpretaron la pieza "II Cardellino Op. X No. 3", del también llamado "Cura rojo": Antonio Vivaldi convirtiendo el recital en una gran velada.
En el cierre se ejecutó la "Sinfonía XII para orquesta de cuerdas", de Felix Mendelssohn, una pieza de cuatro movimientos, con la que el público se volcó en aplausos.
El festejo en este espacio continuará el próximo 26 de julio y hasta el 16 de agosto en otros recintos como el Teatro de la Ciudad, los teatros Orientación, Julio Castillo y El Granero, del Centro Cultural del Bosque, la Sala Xavier Villaurrutia, el Instituto Italiano de Cultura, la Sala Adamo Boari en el Palacio de Bellas Artes y en la sala Blas Galindo del Centro Nacional de Artes.
En el marco de la novena edición del Festival Internacional Viva Vivaldi, la agrupación integrada por 13 solistas especialistas en música barroca, recordó los 250 años de la muerte de quien fuera una de las cumbres del Barroco y uno de los mejores y más influyentes compositores de la música occidental: G. F. Haendel.
Bajo la dirección del concertista mexicano Héctor Guzmán, se rememoraron además los 200 años del natalicio Mendelssohn, uno de los mejores representantes del periodo romántico de la música europea.
En el segundo concierto de este festejo, el programa estuvo integrado por obras de compositores británicos, austriacos, italianos y alemanes.
Al iniciar el repertorio, el conjunto musical ataviado a la usanza de la época de Vivaldi, abrió con "Concerto grosso", de Haendel, primer compositor moderno en haber adaptado y enfocado su música para satisfacer los gustos y necesidades del público, en vez de los de la nobleza y de los mecenas, como era habitual.
Siguió "Cinco bagatelas", de Gerard Finzi, una obra compuesta por cinco movimientos, en los que participó la flautista Elena Durán, quien se llevó una gran ovación de cerca de 200 personas.
Tras su participación, Durán, quien ha conquistado escenarios de Europa, Medio Oriente y América, agradeció al director del Festival Viva Vivaldi Michael Meissner, por la realización del festejo, así como por la invitación.
Minutos después se escuchó "5 Minuetos y 6 Tríos" del austriaco Schubert, considerado como uno de los continuadores del romanticismo musical iniciado por Ludwig van Beethoven.
Para la segunda mitad, volvió a aparecer sobre el escenario la artista de talla internacional Elena Durán, quien acompañada por el conjunto musical admirador de Vivaldi, interpretaron la pieza "II Cardellino Op. X No. 3", del también llamado "Cura rojo": Antonio Vivaldi convirtiendo el recital en una gran velada.
En el cierre se ejecutó la "Sinfonía XII para orquesta de cuerdas", de Felix Mendelssohn, una pieza de cuatro movimientos, con la que el público se volcó en aplausos.
El festejo en este espacio continuará el próximo 26 de julio y hasta el 16 de agosto en otros recintos como el Teatro de la Ciudad, los teatros Orientación, Julio Castillo y El Granero, del Centro Cultural del Bosque, la Sala Xavier Villaurrutia, el Instituto Italiano de Cultura, la Sala Adamo Boari en el Palacio de Bellas Artes y en la sala Blas Galindo del Centro Nacional de Artes.
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