Cultura
Recuerda Conaculta a Diego Rivera a 54 años de su muerte
Diego Rivera heredó a la sociedad mexicana un legado monumental que se puede apreciar en varios edificios y es considerado una figura central de la vida política y cultural de México, entre los años 20 y 50
CIUDAD DE MÉXICO (23/NOV/2011).- El Consejo Nacional para la Cultura y las Artes (Conaculta) recordó hoy al muralista mexicano Diego Rivera (1886-1957), en su 54 aniversario luctuoso, que se conmemora este jueves.
Para el artista nacido en Guanajuato, la pintura era el medio en el que podía llegar a lograr sus aspiraciones, 'tenía la ambición de reflejar la expresión esencial, auténtica de la tierra. Quería que mis obras fueran el espejo de la vida social de México como yo la veía y a través de la situación presente las masas avizoraran las posibilidades del futuro'.
Diego Rivera heredó a la sociedad mexicana un legado monumental que se puede apreciar en varios edificios y es considerado una figura central de la vida política y cultural de México, entre los años 20 y 50.
La obra del controversial muralista abordó la Revolución Mexicana, la política, la cultura popular mexicana y la América prehispánica, entre otros temas y puede ser observada en diversos espacios, entre ellos, el Anfiteatro Simón Bolívar, la Secretaría de Educación Pública (1922), Palacio Nacional (1929-1935) y el Palacio de Bellas Artes (1936).
En 1946 realizó en el Hotel del Prado 'Sueño de una tarde dominical en la Alameda Central', obra que ahora resguarda el Museo Mural Diego Rivera. Años más tarde, en 1953, creó en el Teatro de los Insurgentes un gran mural que representa parte de la historia de México.
En la Escuela Nacional Agricultura de Chapingo también se puede apreciar el legado artístico de Rivera, pues en esta institución educativa pintó piezas consideradas obras maestras del arte contemporáneo, así como en el Palacio de Cortés, en Cuernavaca, en Acapulco y en diversos escuelas de Estados Unidos, como en el San Francisco Art Institute y en el Instituto de Artes de Detroit.
Sus primeras obras tienen la influencia de José María Velasco (1840-1912), con quien comenzó a estudiar en la Academia de San Carlos en 1896.
Diego María Rivera nació el 8 de diciembre de 1866 y falleció en la capital del país, el 24 de noviembre de 1957. Gracias a pensiones del gobierno mexicano viajó a España, donde estudió en el taller de Eduardo Chicharro y a partir de 1916 hizo una vida itinerante entre México, Ecuador, Bolivia, Argentina, España y Francia.
Se casó con Angelina Beloff, posteriormente con Guadalupe Marín, con quien tuvo dos hijas, Lupe (1925 ) y Ruth (1926); en 1929 se casó con una sobresaliente creadora mexicana, Frida Kahlo y en 1955 con Emma Hurtado.
Fue co-fundador de la Unión de Pintores, Escultores y Artistas Gráficos Revolucionarios, integrante del Partido Comunista Mexicano, y junto con José Clemente Orozco y David Alfaro Siqueiros, crearon la comisión de Pintura Mural del Instituto Nacional de Bellas Artes.
En 1950 ilustró Canto General, de Pablo Neruda, Nobel de Literatura 1971; y ganó el Premio Nacional de Ciencias y Artes de México. Murió el 24 de noviembre de 1957.
Para el artista nacido en Guanajuato, la pintura era el medio en el que podía llegar a lograr sus aspiraciones, 'tenía la ambición de reflejar la expresión esencial, auténtica de la tierra. Quería que mis obras fueran el espejo de la vida social de México como yo la veía y a través de la situación presente las masas avizoraran las posibilidades del futuro'.
Diego Rivera heredó a la sociedad mexicana un legado monumental que se puede apreciar en varios edificios y es considerado una figura central de la vida política y cultural de México, entre los años 20 y 50.
La obra del controversial muralista abordó la Revolución Mexicana, la política, la cultura popular mexicana y la América prehispánica, entre otros temas y puede ser observada en diversos espacios, entre ellos, el Anfiteatro Simón Bolívar, la Secretaría de Educación Pública (1922), Palacio Nacional (1929-1935) y el Palacio de Bellas Artes (1936).
En 1946 realizó en el Hotel del Prado 'Sueño de una tarde dominical en la Alameda Central', obra que ahora resguarda el Museo Mural Diego Rivera. Años más tarde, en 1953, creó en el Teatro de los Insurgentes un gran mural que representa parte de la historia de México.
En la Escuela Nacional Agricultura de Chapingo también se puede apreciar el legado artístico de Rivera, pues en esta institución educativa pintó piezas consideradas obras maestras del arte contemporáneo, así como en el Palacio de Cortés, en Cuernavaca, en Acapulco y en diversos escuelas de Estados Unidos, como en el San Francisco Art Institute y en el Instituto de Artes de Detroit.
Sus primeras obras tienen la influencia de José María Velasco (1840-1912), con quien comenzó a estudiar en la Academia de San Carlos en 1896.
Diego María Rivera nació el 8 de diciembre de 1866 y falleció en la capital del país, el 24 de noviembre de 1957. Gracias a pensiones del gobierno mexicano viajó a España, donde estudió en el taller de Eduardo Chicharro y a partir de 1916 hizo una vida itinerante entre México, Ecuador, Bolivia, Argentina, España y Francia.
Se casó con Angelina Beloff, posteriormente con Guadalupe Marín, con quien tuvo dos hijas, Lupe (1925 ) y Ruth (1926); en 1929 se casó con una sobresaliente creadora mexicana, Frida Kahlo y en 1955 con Emma Hurtado.
Fue co-fundador de la Unión de Pintores, Escultores y Artistas Gráficos Revolucionarios, integrante del Partido Comunista Mexicano, y junto con José Clemente Orozco y David Alfaro Siqueiros, crearon la comisión de Pintura Mural del Instituto Nacional de Bellas Artes.
En 1950 ilustró Canto General, de Pablo Neruda, Nobel de Literatura 1971; y ganó el Premio Nacional de Ciencias y Artes de México. Murió el 24 de noviembre de 1957.
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