Cultura
Recrean tradiciones y mundo mitológico maya en historietas
Las publicaciones están dirigidas al público infantil, pero esperan atrapar también a los adultos
MÉRIDA, YUCATÁN (19/OCT/2013).- Aluxes, hombres-brujos que se convierten en animales, caballos de piedra que se vuelven a la vida con magia, son parte del mundo mitológico maya y de las tradiciones, que cobran vida en historietas creadas por la escritora
maya, Ana Patricia Martínez Huchim.
En el marco del Festival Independiente de la Cultura Maya y del coloquio Kjaajalt´aan (nuestras verdaderas palabras), la también investigadora destacó que estas historietas recrean las historias que se cuentan en los pueblos y aunque está orientada a niños, se espera tengan un importante impacto en la población adulta.
Desde pequeña me gustaban las historietas, crecí con Kalimán y Memín Pinguín, y fue apenas este año cuando puede concretar el proyecto -en forma artesanal-, recreando las historias y traduciéndolas al maya y español.
En el primer número la historia gira en torno al "U Tsikbalil juntúul tsiimin tuunich" o el caballo de piedra, historia que habla de un caballo maligno que por la noches vuelve a la vida, provocando la muerte a su alrededor, hasta que un grupo de sacerdotes mayas logra decapitarlo.
Una segunda historieta, en la que se mejoró el diseño, aunque carente de color, ya que se busca que los niños mayas los coloreen según sus propias experiencias de la vida en el campo, es el "Jwáay Miis".
En este segundo volumen se narra la historia de un joven que pide a un brujo le otorgue el don de convertirse en gato, pues estaba profundamente enamorado de una chica a la que no podía ver ya que el padre de ésta lo prohibía. El brujo accedió a darle el don que sólo estaba permitido tener a los jwáay (brujos).
Por las noches, el joven convertido en gato, acudía al cuarto de su amada para que ésta lo acariciara, hasta que un día el padre de la chica descubrió la verdad y asesinó al muchacho.
Esta es una historia distinta a la que conocemos, ya que se suele establecer que todos los jwáay son malos y utilizan su magia para hacer daño a otros o beneficiarse con las necesidades de la población.
Martínez Huchín destacó que ambas historietas han servido de base a la realización de dos obras, la segunda de ellas lista para presentarse.
Ya estamos preparando el tercer número el cual hablará de la "k´u´uk´i kaan" o serpientes de las grutas, cuyas características principales es que tienen crin de caballo y alas.
Es una especie de dragón, pero un dragón maya, que se dice suele salir de vez en cuando de las cuevas, grutas y cenotes para volar sobre el mar, pero también campesinos cañeros aseguran que tiene las escamas tan gruesas que al dispararle con escopeta, las municiones rebotan.
Son historias interactivas, son recreaciones de las historias que se cuentan en los pueblos, pero al mismo tiempo, también es una labor en pro de preservar las leyendas y la lengua maya.
Comentó que el proceso de edición de las historietas es artesanal debido a la dificultad de editar en lengua maya. El texto es revisado en español por la por la escritora e investigadora Cristina Leirana y en maya, por el escritor José Tec, en tanto los dibujos corren a cargo del creativo Joel Góngora Torres.
En el marco del Festival Independiente de la Cultura Maya y del coloquio Kjaajalt´aan (nuestras verdaderas palabras), la también investigadora destacó que estas historietas recrean las historias que se cuentan en los pueblos y aunque está orientada a niños, se espera tengan un importante impacto en la población adulta.
Desde pequeña me gustaban las historietas, crecí con Kalimán y Memín Pinguín, y fue apenas este año cuando puede concretar el proyecto -en forma artesanal-, recreando las historias y traduciéndolas al maya y español.
En el primer número la historia gira en torno al "U Tsikbalil juntúul tsiimin tuunich" o el caballo de piedra, historia que habla de un caballo maligno que por la noches vuelve a la vida, provocando la muerte a su alrededor, hasta que un grupo de sacerdotes mayas logra decapitarlo.
Una segunda historieta, en la que se mejoró el diseño, aunque carente de color, ya que se busca que los niños mayas los coloreen según sus propias experiencias de la vida en el campo, es el "Jwáay Miis".
En este segundo volumen se narra la historia de un joven que pide a un brujo le otorgue el don de convertirse en gato, pues estaba profundamente enamorado de una chica a la que no podía ver ya que el padre de ésta lo prohibía. El brujo accedió a darle el don que sólo estaba permitido tener a los jwáay (brujos).
Por las noches, el joven convertido en gato, acudía al cuarto de su amada para que ésta lo acariciara, hasta que un día el padre de la chica descubrió la verdad y asesinó al muchacho.
Esta es una historia distinta a la que conocemos, ya que se suele establecer que todos los jwáay son malos y utilizan su magia para hacer daño a otros o beneficiarse con las necesidades de la población.
Martínez Huchín destacó que ambas historietas han servido de base a la realización de dos obras, la segunda de ellas lista para presentarse.
Ya estamos preparando el tercer número el cual hablará de la "k´u´uk´i kaan" o serpientes de las grutas, cuyas características principales es que tienen crin de caballo y alas.
Es una especie de dragón, pero un dragón maya, que se dice suele salir de vez en cuando de las cuevas, grutas y cenotes para volar sobre el mar, pero también campesinos cañeros aseguran que tiene las escamas tan gruesas que al dispararle con escopeta, las municiones rebotan.
Son historias interactivas, son recreaciones de las historias que se cuentan en los pueblos, pero al mismo tiempo, también es una labor en pro de preservar las leyendas y la lengua maya.
Comentó que el proceso de edición de las historietas es artesanal debido a la dificultad de editar en lengua maya. El texto es revisado en español por la por la escritora e investigadora Cristina Leirana y en maya, por el escritor José Tec, en tanto los dibujos corren a cargo del creativo Joel Góngora Torres.
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