Pronostican negro futuro para la industria editorial
El sector se encuentra estancado, y pasará por un 2017 muy complejo
GUADALAJARA, JALISCO (30/NOV/2016).- El presidente de la Cámara Nacional de la Industria Editorial Mexicana (Caniem), Carlos Anaya Rosique, señaló que en 2015 la industria editorial mexicana registró ventas por 10 mil millones de pesos, que actualmente el sector se encuentra estancado y, aunque cerrará con cifras positivas este año, augura un complejo 2017.
Al dar a conocer las estadísticas del sector editorial en México durante 2015, Anaya Rosique destacó que en ese periodo el sector tuvo un crecimiento de 2.6 por ciento en términos económicos, comparado con 2014.
“No llegamos aún (a la meta) porque remontamos una caída que tuvimos en 2014, respecto al año anterior, así que en 2015 logramos crecer pero no llegamos a los valores de ese 2013, seguimos en recuperación”, aclaró.
En la Feria Internacional del Libro de Guadalajara (FIL), el presidente de la Caniem, agregó que los números del primer semestre de 2016 vislumbran un cierre positivo, pero en 2017 se espera un panorama difícil.
En 2015, continuó, la producción del sector público y privado fue de 308 millones de ejemplares, de los cuales 163 millones (53%) corresponde al sector gubernamental, mientras que 145 millones (47%) corresponden al sector privado, del cual el 32% está destinado al mercado abierto y el 15% al sector gubernamental.
Para el titular de la Caniem las cifras presentadas arrojan que en México “no estamos en el mejor momento para la cultura (...) Ya no hablo solo de libros. Hablamos de 10 mil 300 millones de pesos, a precio de 2015 que son 635 millones de dólares, y si lo llevamos al día de hoy, hablamos de 500 millones de dólares”, dijo.
Durante la presentación del informe anual, se dio a conocer un ambicioso proyecto con el cual la Caniem busca estar a la altura de los logros de la industria en materia de formación profesional; se trata del Centro Para la Innovación y Formación Profesional de la Industria Editorial.
Éste estará dividido en cinco fases: el rediseño de la oferta académica; la creación de servicios de apoyo a la innovación en empresas editoriales; la creación de un centro de documentación estadística del sector; el diseño de procesos y oferta académica; y el proyecto arquitectónico del inmueble.
Adelantó que la oferta académica del Centro se enfocará en producción, edición, comercialización, mercadotecnia, distribución de contenidos y demás materiales intrínsecamente relacionadas con el medio no solo para los editores, también para libreros, distribuidores, autores y agentes.