Cultura
Por una sana educación familiar
Martha Alicia Chávez presenta un libro basado en 27 años de trabajo terapéutico
GUADALAJARA, JALISCO (06/DIC/2015).- Martha Alicia Chávez habla de su libro “¡Con golpes NO!”, el cual muestra —a través de cuatro historias verídicas de adultos que fueron niños golpeados— el dolor y las repercusiones de una crianza basada en los golpes.
Desde la adolescencia, la autora ha sentido un lazo especial con los niños, lo que la llevó a enfocar su carrera en ellos. Aunque dejó un tiempo su trabajo para enfocarse en sus hijos, Martha Alicia Chávez rescata la necesidad que tiene un niño de pasar tiempo con sus papás; excluyendo las situaciones donde ambos padres se ven forzados a trabajar, aconseja siempre estar presentes para los hijos, aunque sea por los primeros años.
“Siempre he tenido una conexión con los niños, me encantan, y sé que ellos no pueden hablar por sus derechos por lo que yo me siento como una vocera de ellos para hacer conscientes a los padres de que la violencia no es la mejor opción.”
Los niños son inocentes, están apenas conociendo el mundo y cómo éste se maneja, por este motivo, afirma la autora, es incorrecto mostrarles violencia: la violencia genera más violencia; sin embargo, los niños obviamente no devolverán a los padres los golpes, en lugar de esto guardarán el rencor y quizá hasta odio, que tarde o temprano surgirá en diferentes modos, desde malas calificaciones hasta una total rebeldía contra los padres o cualquier autoridad: “Si educas con golpes, crearás en casa un ambiente espantoso”.
El libro surge como resultado de 27 años de trabajo terapéutico, en el cual la escritora notó la necesidad de crear esta obra. Además de mostrar las secuelas posibles de ser un niño educado a base de golpes, la segunda parte del libro responde a la pregunta constante que le han hecho a la escritora: “Si con golpes no, entonces ¿cómo?”. En esta parte se proponen diferentes técnicas para padres que educan a hijos de edad preescolar, escolar y adolescentes.
La situación actual acerca de las familias no es tan convencional como en tiempos donde la mujer era casi obligada a permanecer en casa; en el presente hay tanto madres como padres trabajadores, existen parejas divorciadas, padres o madres ausentes por diversas causas, etc. Por este motivo el libro está abierto para cualquier situación familiar, hasta para abuelos que eduquen a sus nietos.
“Cuando una madre o un padre está criando solo a sus hijos, igualmente se enfrentará con las mismas dudas, con los mismos temas; mis propuestas expuestas en este libro, son útiles para cualquiera que se encuentre criando a un niño”.
Desde la adolescencia, la autora ha sentido un lazo especial con los niños, lo que la llevó a enfocar su carrera en ellos. Aunque dejó un tiempo su trabajo para enfocarse en sus hijos, Martha Alicia Chávez rescata la necesidad que tiene un niño de pasar tiempo con sus papás; excluyendo las situaciones donde ambos padres se ven forzados a trabajar, aconseja siempre estar presentes para los hijos, aunque sea por los primeros años.
“Siempre he tenido una conexión con los niños, me encantan, y sé que ellos no pueden hablar por sus derechos por lo que yo me siento como una vocera de ellos para hacer conscientes a los padres de que la violencia no es la mejor opción.”
Los niños son inocentes, están apenas conociendo el mundo y cómo éste se maneja, por este motivo, afirma la autora, es incorrecto mostrarles violencia: la violencia genera más violencia; sin embargo, los niños obviamente no devolverán a los padres los golpes, en lugar de esto guardarán el rencor y quizá hasta odio, que tarde o temprano surgirá en diferentes modos, desde malas calificaciones hasta una total rebeldía contra los padres o cualquier autoridad: “Si educas con golpes, crearás en casa un ambiente espantoso”.
El libro surge como resultado de 27 años de trabajo terapéutico, en el cual la escritora notó la necesidad de crear esta obra. Además de mostrar las secuelas posibles de ser un niño educado a base de golpes, la segunda parte del libro responde a la pregunta constante que le han hecho a la escritora: “Si con golpes no, entonces ¿cómo?”. En esta parte se proponen diferentes técnicas para padres que educan a hijos de edad preescolar, escolar y adolescentes.
La situación actual acerca de las familias no es tan convencional como en tiempos donde la mujer era casi obligada a permanecer en casa; en el presente hay tanto madres como padres trabajadores, existen parejas divorciadas, padres o madres ausentes por diversas causas, etc. Por este motivo el libro está abierto para cualquier situación familiar, hasta para abuelos que eduquen a sus nietos.
“Cuando una madre o un padre está criando solo a sus hijos, igualmente se enfrentará con las mismas dudas, con los mismos temas; mis propuestas expuestas en este libro, son útiles para cualquiera que se encuentre criando a un niño”.
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