Cultura
Por la fortaleza de la televisión y radio educativa
Inauguran la XXI Asamblea General de la Red de Radiodifusoras y Televisoras Educativas y Culturales de México
GUADALAJARA, JALISCO (06/NOV/2015).- Las audiencias son cada vez más exigentes y los formatos de difusión también evolucionan a pasos agigantados, por lo que unir fuerzas para mejorar la calidad de la programación y contenido de la televisión y la radio mexicana es un reto que los medios públicos tienen de frente sin oportunidad de prórroga.
Bajo esta idea es como se inauguró la XXI Asamblea General de la Red de Radiodifusoras y Televisoras Educativas y Culturales de México, que bajo la titularidad de Susana Solís Esquinca, diversos representantes de los canales y frecuencias educativas se reunieron para poner sobre la mesa los desafíos que esta industria enfrenta, las oportunidades que se han aprovechado correctamente y las tendencias que vienen a cambiar el rol del radioescucha, el televidente y las mismas producciones.
Solís Esquinca destacó que actualmente esta red es la agrupación de medios públicos más grande en México al integrarse por 54 medios de comunicación federales, estatales y universitarios distribuidos en 28 estados del país, y que gracias a sus contenidos educativos y culturales con producciones brindan identidad a la sociedad mediante temas que promueven la paz, inclusión, igualdad de género, respeto a los derechos humanos, tolerancia y valores democráticos.
La presidenta destacó que migrar hacia el llamado ''apagón analógico'' será un proceso que se cumpla conforme a la ley pero que conllevará tiempo de adaptación no solo por parte de la audiencia, sino también de los productores que tendrán el reto de recuperar y fortalecer públicos ante estas adaptaciones tecnológicas.
"Se avecina el 'apagón analógico' y para nadie es un secreto que la mayoría de nosotros vamos a cumplir con la ley pero migraremos a medias, lo que va a implicar un esfuerzo mayor para recuperar nuestra cobertura y audiencia. Es tiempo de que los medios públicos unidos alcemos la voz para dignificarla, que se reconozca su labor social, cultural y educativo".
Por su parte, Raúl Juárez Valencia, subsecretario de Asuntos del Interior de la Secretaría General de Gobierno, puntualizó que a lo largo de 10 años, esta red de medios públicos ha logrado atraer a más de 30 millones de radioescuchas y televidentes mientras se viven tres revoluciones que modifican la forma de acceder a los contenidos.
Una de éstas, explicó, es la revolución del "más", en la que hay un aumento de población, iglesias, partidos políticos, televisoras, radiodifusoras y periódicos, por lo que es importante añadir estrategias correspondientes para analizar las formas de entendimiento de la cultura y educación que se comunican.
Juárez Valencia también habló de la revolución "que nos conlleva a ver hasta dónde nos están dando los resultados de la aplicación de lo que le llamamos la política 2.0, que es la aplicación de los medios electrónicos para el desenvolvimiento de actividades, y que desgraciadamente estamos viendo que en nuestras estructuras sociales han un desmoronamiento en valores".
EL INFORMADOR / NORMA GUTIÉRREZ
Bajo esta idea es como se inauguró la XXI Asamblea General de la Red de Radiodifusoras y Televisoras Educativas y Culturales de México, que bajo la titularidad de Susana Solís Esquinca, diversos representantes de los canales y frecuencias educativas se reunieron para poner sobre la mesa los desafíos que esta industria enfrenta, las oportunidades que se han aprovechado correctamente y las tendencias que vienen a cambiar el rol del radioescucha, el televidente y las mismas producciones.
Solís Esquinca destacó que actualmente esta red es la agrupación de medios públicos más grande en México al integrarse por 54 medios de comunicación federales, estatales y universitarios distribuidos en 28 estados del país, y que gracias a sus contenidos educativos y culturales con producciones brindan identidad a la sociedad mediante temas que promueven la paz, inclusión, igualdad de género, respeto a los derechos humanos, tolerancia y valores democráticos.
La presidenta destacó que migrar hacia el llamado ''apagón analógico'' será un proceso que se cumpla conforme a la ley pero que conllevará tiempo de adaptación no solo por parte de la audiencia, sino también de los productores que tendrán el reto de recuperar y fortalecer públicos ante estas adaptaciones tecnológicas.
"Se avecina el 'apagón analógico' y para nadie es un secreto que la mayoría de nosotros vamos a cumplir con la ley pero migraremos a medias, lo que va a implicar un esfuerzo mayor para recuperar nuestra cobertura y audiencia. Es tiempo de que los medios públicos unidos alcemos la voz para dignificarla, que se reconozca su labor social, cultural y educativo".
Por su parte, Raúl Juárez Valencia, subsecretario de Asuntos del Interior de la Secretaría General de Gobierno, puntualizó que a lo largo de 10 años, esta red de medios públicos ha logrado atraer a más de 30 millones de radioescuchas y televidentes mientras se viven tres revoluciones que modifican la forma de acceder a los contenidos.
Una de éstas, explicó, es la revolución del "más", en la que hay un aumento de población, iglesias, partidos políticos, televisoras, radiodifusoras y periódicos, por lo que es importante añadir estrategias correspondientes para analizar las formas de entendimiento de la cultura y educación que se comunican.
Juárez Valencia también habló de la revolución "que nos conlleva a ver hasta dónde nos están dando los resultados de la aplicación de lo que le llamamos la política 2.0, que es la aplicación de los medios electrónicos para el desenvolvimiento de actividades, y que desgraciadamente estamos viendo que en nuestras estructuras sociales han un desmoronamiento en valores".
EL INFORMADOR / NORMA GUTIÉRREZ
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