Cultura
Obras de Edvard Munch blanco fácil para ladrones de arte
Sus obras sobre la angustia influyeron notablemente en los pintores de comienzos del siglo XX
CIUDAD DE MÉXICO.- La litografía coloreada 'La historia', del pintor noruego Edvard Munch, nacido el 12 de diciembre de 1863, fue sustraída recientemente de una galería privada del centro de Oslo, luego que ladrones de arte rompieron el vidrio con una piedra.
Hace pocos años, la misma suerte la corrieron otras obras de este artista, tales como 'El grito', 'La Madonna' y 'Separación II'.
Edvard Munch, quien nació en la población de Loten, fue pionero dentro de la corriente del expresionismo.
Sus obras sobre la angustia influyeron notablemente en los pintores de comienzos del siglo XX y él es considerado, en su país, como el único artista de resonancia internacional.
Su pintura más conocida, 'El grito', realizada en 1893, originalmente titulada 'Desesperación', es catalogada como un icono de la angustia existencial.
La versión más conocida de 'El grito' fue robada del Museo Munch de Oslo, el 22 de agosto de 2004, junto 'La Madonna'. Ambas pinturas fueron recuperadas el 30 de agosto de 2006 con daños menores reparables.
El pintor decía de sí mismo que, 'del mismo modo que Leonardo da Vinci había estudiado la anatomía humana y diseccionado cuerpos, él intentaba diseccionar almas'.
Por ello, los temas más frecuentes en su obra fueron los relacionados con los sentimientos y las tragedias humanas, como la soledad, la angustia, la muerte y el erotismo.
A Munch se le considera un precursor del expresionismo, por la fuerte expresividad de los rostros y las actitudes de sus figuras, además del mejor pintor noruego de todos los tiempos.
Munch pasó una infancia con numerosas enfermedades y de los cinco hermanos, solamente Andreas se casaría, muriendo unos pocos meses después de la boda.
Estos hechos podrían explicar la oscuridad y el pesimismo que plasmó en gran parte de su obra.
Después él mismo afirmó: "La enfermedad, la locura y la muerte fueron los ángeles que rodearon mi cuna y me siguieron durante toda mi vida".
Varias fuentes modernas describen la enfermedad de Munch como un caso probable de desorden bipolar. El consideraba esta personalidad conflictiva y un tanto desequilibrada como la base de su genio.
En 1885 llevó a cabo el primero de sus numerosos viajes a París, donde conoció los movimientos pictóricos más avanzados y se sintió especialmente atraído por el arte de Paul Gauguin.
No tardó en crear un estilo sumamente personal, basado en acentuar la fuerza expresiva de la línea, reducir las formas a su expresión más esquemática y hacer un uso simbólico, no naturalista, del color, de ahí viene su clasificación como pintor simbolista.
De 1892 a 1908 vivió en Alemania, sobre todo en Berlín, aunque hizo frecuentes viajes a Noruega y París.
En la capital alemana presentó en 1892 una exposición que tuvo que ser retirada por el escándalo que suscitó y que dio pie a la creación de la Sezesion berlinesa.
En 1908 volvió definitivamente a Noruega, donde recibió algunos encargos oficiales (pinturas del paraninfo de la Universidad de Oslo) y pasó sus últimos años en soledad.
En los años 30 y 40, los nazis etiquetaron su trabajo como "arte degenerado" y retiraron sus trabajos de los museos alemanes. Este hecho hirió profundamente a Munch, que se consideraba un antifascista y había llegado a considerar a Alemania como su segunda patria.
Falleció en Ekely, población cercana a Oslo, el 23 de enero de 1944, a los 81 años de edad.
Munch dejó un legado de más de mil cuadros, 15 mil 400 grabados, cuatro mil 500 dibujos y acuarelas y seis esculturas a la ciudad de Oslo, donde se encuentra actualmente el Museo Munch en el barrio de Toyen, que fue inaugurado en 1963.
Las obras de Edvard Munch se encuentran expuestas en los principales museos de Europa.
Hace pocos años, la misma suerte la corrieron otras obras de este artista, tales como 'El grito', 'La Madonna' y 'Separación II'.
Edvard Munch, quien nació en la población de Loten, fue pionero dentro de la corriente del expresionismo.
Sus obras sobre la angustia influyeron notablemente en los pintores de comienzos del siglo XX y él es considerado, en su país, como el único artista de resonancia internacional.
Su pintura más conocida, 'El grito', realizada en 1893, originalmente titulada 'Desesperación', es catalogada como un icono de la angustia existencial.
La versión más conocida de 'El grito' fue robada del Museo Munch de Oslo, el 22 de agosto de 2004, junto 'La Madonna'. Ambas pinturas fueron recuperadas el 30 de agosto de 2006 con daños menores reparables.
El pintor decía de sí mismo que, 'del mismo modo que Leonardo da Vinci había estudiado la anatomía humana y diseccionado cuerpos, él intentaba diseccionar almas'.
Por ello, los temas más frecuentes en su obra fueron los relacionados con los sentimientos y las tragedias humanas, como la soledad, la angustia, la muerte y el erotismo.
A Munch se le considera un precursor del expresionismo, por la fuerte expresividad de los rostros y las actitudes de sus figuras, además del mejor pintor noruego de todos los tiempos.
Munch pasó una infancia con numerosas enfermedades y de los cinco hermanos, solamente Andreas se casaría, muriendo unos pocos meses después de la boda.
Estos hechos podrían explicar la oscuridad y el pesimismo que plasmó en gran parte de su obra.
Después él mismo afirmó: "La enfermedad, la locura y la muerte fueron los ángeles que rodearon mi cuna y me siguieron durante toda mi vida".
Varias fuentes modernas describen la enfermedad de Munch como un caso probable de desorden bipolar. El consideraba esta personalidad conflictiva y un tanto desequilibrada como la base de su genio.
En 1885 llevó a cabo el primero de sus numerosos viajes a París, donde conoció los movimientos pictóricos más avanzados y se sintió especialmente atraído por el arte de Paul Gauguin.
No tardó en crear un estilo sumamente personal, basado en acentuar la fuerza expresiva de la línea, reducir las formas a su expresión más esquemática y hacer un uso simbólico, no naturalista, del color, de ahí viene su clasificación como pintor simbolista.
De 1892 a 1908 vivió en Alemania, sobre todo en Berlín, aunque hizo frecuentes viajes a Noruega y París.
En la capital alemana presentó en 1892 una exposición que tuvo que ser retirada por el escándalo que suscitó y que dio pie a la creación de la Sezesion berlinesa.
En 1908 volvió definitivamente a Noruega, donde recibió algunos encargos oficiales (pinturas del paraninfo de la Universidad de Oslo) y pasó sus últimos años en soledad.
En los años 30 y 40, los nazis etiquetaron su trabajo como "arte degenerado" y retiraron sus trabajos de los museos alemanes. Este hecho hirió profundamente a Munch, que se consideraba un antifascista y había llegado a considerar a Alemania como su segunda patria.
Falleció en Ekely, población cercana a Oslo, el 23 de enero de 1944, a los 81 años de edad.
Munch dejó un legado de más de mil cuadros, 15 mil 400 grabados, cuatro mil 500 dibujos y acuarelas y seis esculturas a la ciudad de Oslo, donde se encuentra actualmente el Museo Munch en el barrio de Toyen, que fue inaugurado en 1963.
Las obras de Edvard Munch se encuentran expuestas en los principales museos de Europa.