Cultura
No dejan de cautivar ''Las batallas en el desierto'' de J. Emilio Pacheco
Debido a la trascendencia de la efeméride, hoy se realizó una lectura en voz alta en el Foro General 'Federico García Lorca'
CIUDAD DE MÉXICO (23/OCT/2011).- 'Las batallas en el desierto', del poeta José Emilio Pacheco, celebran este 2011 30 años de su publicación con una edición conmemorativa en la que se pueden apreciar 10 fotografías de Nacho López, quien recrea la atmósfera política y social de la época, en la década de los 80.
Debido a la trascendencia de la efeméride, hoy se realizó una lectura en voz alta en el Foro General 'Federico García Lorca' de la XI Feria Internacional del Libro del Zócalo (FILZ), a cargo de Daniel Giménez Cacho, José Luis Ibáñez, Diana Bracho y María Rojo, quienes coincidieron en que es una obra 'magistral', para el deleite de los amantes de la buena literatura.
En el acto, que congregó a más de 500 personas, se escucharon uno a uno los 12 capítulos que integran la novela; el sarcasmo y la ironía, narradas en su máxima expresión arrebataron las risas de los asistentes, quienes sentados o de pie escucharon atentos los textos.
Con su ya marcada personalidad, cada uno de los lectores ofreció una versátil lectura, imprimiendo el sentimiento a la palabra escrita de Pacheco, la cual describe de una manera inconfundible una época en la Ciudad de México, lo mismo que la historia de amor de un adolescente, que los desenfrenos de aquella sociedad.
En esta jornada literaria, como era de esperarse, lo mismo se observó la presencia de niños, jóvenes y adultos, hasta gente de la tercera edad, que con libro en mano, seguían las lecturas de Cacho, Ibáñez, Bracho y Rojo.
La obra de Pacheco, Premio Reina Sofía de Poesía Iberoamericana 2009, ha captado la atención de diversas generaciones de lectores e impactado a múltiples artistas de la vida cultural de México y el extranjero.
En este sentido, 'Las batallas en el desierto', traducida a más de siete idiomas, es un clásico de la literatura, 'que ha ganado muchos millones de lectores; son muy pocos los libros que pueden seducir a tantos lectores, y esta publicación tiene un valor extra pues seduce a lectores de 13 y 15 años, quienes se convierten en adictos tanto al libro como a la lectura', consideró Marcelo Uribe, director de Ediciones Era.
De acuerdo con Uribe, José Emilio Pacheco también autor de "El silencio de la Luna", considera que este libro ya no es de él, pues es un libro que es parte de este país y de sus lectores.
No obstante, posterior a su creación, su autor 'lo guardó en un cajón, porque creía que no era posible su publicación y que a nadie le podría interesar; argumentaba que estaba muy largo para ser un cuento y muy corto para ser una novela, y nunca pensó en los alcances que podría tener', compartió Uribe.
Afortunadamente, dijo, editores de Era lo leyeron en 'Sábado', el suplemento de unomásuno, donde se publicó por primera vez, y desde entonces se ha convertido en un clásico por su aparente sencillez y la estructura tan compleja que tiene lazos para una múltiple y variada lectura.
Así, ante cientos de espectadores que esperaban el arribo de José Emilio Pacheco, quien mandó en voz de Uribe su agradecimiento por su presencia, concluyó esta jornada literaria con fuertes ovaciones y un público que visiblemente satisfecho agradeció esta lectura en voz alta.
Debido a la trascendencia de la efeméride, hoy se realizó una lectura en voz alta en el Foro General 'Federico García Lorca' de la XI Feria Internacional del Libro del Zócalo (FILZ), a cargo de Daniel Giménez Cacho, José Luis Ibáñez, Diana Bracho y María Rojo, quienes coincidieron en que es una obra 'magistral', para el deleite de los amantes de la buena literatura.
En el acto, que congregó a más de 500 personas, se escucharon uno a uno los 12 capítulos que integran la novela; el sarcasmo y la ironía, narradas en su máxima expresión arrebataron las risas de los asistentes, quienes sentados o de pie escucharon atentos los textos.
Con su ya marcada personalidad, cada uno de los lectores ofreció una versátil lectura, imprimiendo el sentimiento a la palabra escrita de Pacheco, la cual describe de una manera inconfundible una época en la Ciudad de México, lo mismo que la historia de amor de un adolescente, que los desenfrenos de aquella sociedad.
En esta jornada literaria, como era de esperarse, lo mismo se observó la presencia de niños, jóvenes y adultos, hasta gente de la tercera edad, que con libro en mano, seguían las lecturas de Cacho, Ibáñez, Bracho y Rojo.
La obra de Pacheco, Premio Reina Sofía de Poesía Iberoamericana 2009, ha captado la atención de diversas generaciones de lectores e impactado a múltiples artistas de la vida cultural de México y el extranjero.
En este sentido, 'Las batallas en el desierto', traducida a más de siete idiomas, es un clásico de la literatura, 'que ha ganado muchos millones de lectores; son muy pocos los libros que pueden seducir a tantos lectores, y esta publicación tiene un valor extra pues seduce a lectores de 13 y 15 años, quienes se convierten en adictos tanto al libro como a la lectura', consideró Marcelo Uribe, director de Ediciones Era.
De acuerdo con Uribe, José Emilio Pacheco también autor de "El silencio de la Luna", considera que este libro ya no es de él, pues es un libro que es parte de este país y de sus lectores.
No obstante, posterior a su creación, su autor 'lo guardó en un cajón, porque creía que no era posible su publicación y que a nadie le podría interesar; argumentaba que estaba muy largo para ser un cuento y muy corto para ser una novela, y nunca pensó en los alcances que podría tener', compartió Uribe.
Afortunadamente, dijo, editores de Era lo leyeron en 'Sábado', el suplemento de unomásuno, donde se publicó por primera vez, y desde entonces se ha convertido en un clásico por su aparente sencillez y la estructura tan compleja que tiene lazos para una múltiple y variada lectura.
Así, ante cientos de espectadores que esperaban el arribo de José Emilio Pacheco, quien mandó en voz de Uribe su agradecimiento por su presencia, concluyó esta jornada literaria con fuertes ovaciones y un público que visiblemente satisfecho agradeció esta lectura en voz alta.
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