Mucha competencia, poca generosidad
Joel Flores llega como parte de la generación de los años 80
GUADALAJARA, JALISCO (01/DIC/2016).- “Soy una persona muy persistente, muy necia, a veces muy neurótica, pero también muy generosa” así se autodefine el escritor zacateno, Joel Flores, quien forma parte de la delegación de ochenteros en esta edición de la FIL30.
Joel busca ser generoso con sus colegas, pues reconoce en las nuevas generaciones de escritores, demasiada competencia, cuando se debería de dar generosidad, se debe de dar la mano, pues como menciona “al final trabajamos en lo mismo”.
En su hogar nunca hubo libros, su familia no leía libros, su madre y hermano son abogados, su hermana, nutrióloga, es decir, creció en un contexto muy distinto a las letras. Incluso sus amigos más cercanos le comentan, en tono de burla, “eres la cosa rara de la familia”.
Desde los 20 años, Joel forjó su carrera como escritor a través de un cúmulo de fracasos, como toda historia de un ser humano, comenta el escritor, fracasos de libros terminados pero que no le han gustado y terminan en la basura, documentos en la computadora, rechazos de editoriales…pero también ha tenido grandes recompensas, premios, becas nacionales e internacionales.
Joel Flores le dice a los jóvenes que lean, pues leer hace personas críticas. “Que nos quitemos el argumento en contra de “no leo porque los libros son caros”, sí hay formas de leer, de conseguir libros, que se lea, lean como si respiraran, la lectura siempre te hará una mejor persona o una peor persona, pero inteligente.”