Mil veces Benito Taibo
El escritor se consolidó como uno de los más seguidos por los ojos juveniles al congregar lectores en el Foro Fil
GUADALAJARA, JALISCO (02/DIC/2016).- “Mil jóvenes con…” es el nombre de la actividad en la que Benito Taibo participó en el Foro de la Feria Internacional del Libro, en la que el escritor mostró su poder de convocatoria, pues cuenta con una legión de lectores que supera el millar: al menos mil 400 entusiastas por la lectura se dieron cita para escuchar la charla entre Taibo y Alberto Villarreal, booktuber mexicano.
Además de la invitación a la plática y a la lectura misma, los organizadores regalaron ejemplares de “Persona normal”, novela de Benito, quien elogió la lectura no como un instrumento para “cambiar al mundo”, sino como una herramienta para cambiarnos a nosotros mismos: “El libro no puede cambiar el mundo, pero sí cambia a quienes pueden cambiarlo”, afirmó el escritor.
En el sentido de que el lector vive muchas vidas, el popular autor comentó: “Somos lo que hemos leído, o por el contrario seremos la ausencia”. Y es que la lectura, antes que la escritura, es el destino que marca la vida de Benito: “Yo sólo soy un lector que un día se atrevió a dar un paso y escribir”.
En cada intervención, los jóvenes respondieron efusivos, hecho que le agrada a Benito, pues se siente en casa entre lectores, y más dentro de la FIL: “Esta es mi casa grande, la de la Ciudad de México es la casa chica”.
A quienes no leen por una supuesta ausencia de “falta de tiempo”, Taibo resaltó la posibilidad de leer mientras nos trasladamos en el transporte público.
Hacia el final de la sesión, en donde ni el ruido de los camiones de avenida de las Rosas distrajo a los asistentes y presentadores, Villarreal y Taibo exhortaron a los jóvenes para grabar un pequeño video para subir a las redes sociales. La frase fue el grito colectivo de “¡Creemos en los libros!”. Luego de la grabación, Alberto pidió a los presentes sumarse a un “mannequin challenge” en conjunto, es decir, la práctica viral de quedarse “congelado” para realizar un video y subirlo a internet. Taibo, que allí conoció la actividad, se sumó con gusto, pues “Tengo 56 años por fuera, 17 por dentro”.