Cultura
México podría beneficiarse por la crisis de la cultura en Europa: Doris Dörrie
La escritora y directora de cine se confiesa interesada por México y por su riqueza cultural
GUADALAJARA, JALISCO (01/DIC/2011).- La cultura de México y América Latina podría ser la gran beneficiaria de la crisis económica y política por la que pasa Europa, pues el Viejo Continente debe admitir el final del eurocentrismo cultural. Al menos, ésa fue la hipótesis que lanzó ayer la cineasta y escritora Doris Dörrie, durante una charla con periodistas.
Dörrie explicó de nuevo —como ocurre cada vez que visita México y debe explicar la experiencia de una artista que escribe y crea tanto en cine como en literatura— que no tiene conflictos mayores por dividir su interés artístico entre la literatura y la pantalla grande. Sí admitió, sin embargo, que escribir guiones es más difícil que escribir libros, porque el formato, las condiciones financieras de cada proyecto y el tiempo disponible limitan al narrador.
“Cada frase, en un guión, cuesta dinero. Es como una censura mental, porque cuando escribes siempre tienes que tener una conciencia muy distinta del dinero. Tiendo a hacer películas que no cuestan más de tres millones de euros, porque eso me da una gran libertad; si cuestan más, es algo que no puedo controlar”, confesó.
Famosa por sus películas pero también autora de varios libros, la directora de Las flores del cerezo aprovecha esta nueva visita a Guadalajara para confesarse interesada por México y por su riqueza cultural: “Hay una gran conciencia del arte popular, y eso es muy diferente respecto a Alemania. El arte o la cultura en Alemania, en general, viene de arriba (de la élite) (…) Es evidente que la cultura en México necesita más apoyo del gobierno y que la educación es lo más importante; necesitan más dinero”.
La directora dijo opinar que la globalización y la crisis económica que sufren Alemania y Europa han evidenciado el “egoísmo” de los europeos y que han perdido interés por los demás: “Hemos perdido interés por los vecinos, y por América Latina. La globalización nos llevó a algo que yo llamo tribalismo; en Europa es muy fuerte y la crisis de la moneda lo hace más complicado. No tenemos mucha curiosidad por los demás; es muy triste, ¿no?, y muy aburrido”.
Ella misma, sin embargo, reflexionó: “Me da vergüenza, porque estamos obsesionados con la crisis; en México siempre hay una crisis, y es más grave; estamos demasiado obsesionados con nuestra crisis ahora mismo”.
Por eso opinó que Europa debería abrirse más al intercambio cultural con América Latina y se pronunció por aceptar el fin del eurocentrismo en materia de artes: “Espero que la crisis en Europa nos haga más curiosos, más abiertos. Mi teoría es que el gran ganador va a ser México, que es un gran momento en la historia para México y también para Latinoamérica.”
Dörrie estará presente en las funciones de sus pelícuas en el Cineforo de Juárez y Enrique Díaz de León, en donde se proyectan, en medio de un ciclo de cine alemán dedicado adaptaciones literarias, La peluquera y ¿Soy linda?
EL INFORMADOR / IVÁN GONZÁLEZ VEGA
Dörrie explicó de nuevo —como ocurre cada vez que visita México y debe explicar la experiencia de una artista que escribe y crea tanto en cine como en literatura— que no tiene conflictos mayores por dividir su interés artístico entre la literatura y la pantalla grande. Sí admitió, sin embargo, que escribir guiones es más difícil que escribir libros, porque el formato, las condiciones financieras de cada proyecto y el tiempo disponible limitan al narrador.
“Cada frase, en un guión, cuesta dinero. Es como una censura mental, porque cuando escribes siempre tienes que tener una conciencia muy distinta del dinero. Tiendo a hacer películas que no cuestan más de tres millones de euros, porque eso me da una gran libertad; si cuestan más, es algo que no puedo controlar”, confesó.
Famosa por sus películas pero también autora de varios libros, la directora de Las flores del cerezo aprovecha esta nueva visita a Guadalajara para confesarse interesada por México y por su riqueza cultural: “Hay una gran conciencia del arte popular, y eso es muy diferente respecto a Alemania. El arte o la cultura en Alemania, en general, viene de arriba (de la élite) (…) Es evidente que la cultura en México necesita más apoyo del gobierno y que la educación es lo más importante; necesitan más dinero”.
La directora dijo opinar que la globalización y la crisis económica que sufren Alemania y Europa han evidenciado el “egoísmo” de los europeos y que han perdido interés por los demás: “Hemos perdido interés por los vecinos, y por América Latina. La globalización nos llevó a algo que yo llamo tribalismo; en Europa es muy fuerte y la crisis de la moneda lo hace más complicado. No tenemos mucha curiosidad por los demás; es muy triste, ¿no?, y muy aburrido”.
Ella misma, sin embargo, reflexionó: “Me da vergüenza, porque estamos obsesionados con la crisis; en México siempre hay una crisis, y es más grave; estamos demasiado obsesionados con nuestra crisis ahora mismo”.
Por eso opinó que Europa debería abrirse más al intercambio cultural con América Latina y se pronunció por aceptar el fin del eurocentrismo en materia de artes: “Espero que la crisis en Europa nos haga más curiosos, más abiertos. Mi teoría es que el gran ganador va a ser México, que es un gran momento en la historia para México y también para Latinoamérica.”
Dörrie estará presente en las funciones de sus pelícuas en el Cineforo de Juárez y Enrique Díaz de León, en donde se proyectan, en medio de un ciclo de cine alemán dedicado adaptaciones literarias, La peluquera y ¿Soy linda?
EL INFORMADOR / IVÁN GONZÁLEZ VEGA