Cultura

Lagos y lo prometedor del futuro

El ex presidente de Chile hace su arribo a la FIL para dictar la Cátedra Julio Cortázar, así como hablar de la publicación de ''El siglo que despierta'', su nuevo libro

GUADALAJARA, JALISCO (25/NOV/2012).- Ricardo Lagos (1938) fue presidente de Chile de 2000 a 2006. Su periodo de gobierno destacó por las políticas económicas, pero sobre todo sociales que implementó y que le dieron estabilidad al interior y lustre al exterior. Fue también ministro de educación, por lo que ha sido cercano a los procesos culturales de su país natal, en particular, y de América Latina, en general. De una cercanía fraternal e intelectual con Carlos Fuentes, este ex diplomático ahora da salida a su vena de escritor, aunque es más preciso decir de pensador. Lagos piensa América Latina, la sabe en un momento especial, importante, y que puede trascender.

De paso por la Feria Internacional de Libro 2012 llegó a presentar "El siglo que despierta", que significa la transcripción de una de sus largas conversaciones con Carlos Fuentes. Tratan de descifrar la realidad para aventurar un escenario del futuro o los futuros que deparan no sólo a Latinoamérica, sino al mundo en sí. Hoy, además, dicta la Cátedra Julio Cortázar.

-Ahora viene a México a presentar un libro; ¿cómo se siente alejado del mundo diplomático?

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Lo que pasa es que el ser humano tiene distintas vidas y distintos momentos. Y claro, haber sido presidente de un país es muy importante. O en algún momento de mi vida tener que haber enfrentado una dictadura; jamás pensé, cuando joven, que iba a vivir una dictadura en Chile. Las dictaduras me parecían que existían en otras partes, pero no en Chile. Y nos tocó vivir esa vida y hubo que enfrentarla.

-En el libro que presenta participó con Carlos Fuentes; esta feria está dedicada a él. ¿Le genera algún sentimiento particular?

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En primer lugar el sentimiento de afecto que todos tenemos por Carlos Fuentes. Es un gran compañero de ideales. Compartimos muchas veces muchas largas conversaciones y tuve el privilegio de sostener una muy larga conversación con Carlos el año pasado. En septiembre de 2011 surgió espontáneamente en una de las múltiples reuniones en las que compartíamos. Seguimos conversando después de la reunión y un amigo en común nos dijo: "qué tal si les pongo una grabadora y ustedes siguen conversando". Y ése es el resultado del libro que salió. Creo que es un buen resumen del pensamiento de Carlos Fuentes al final de su vida.

-¿Cuáles son los principales encuentros intelectuales que tiene usted con Carlos Fuentes?

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Creo que Carlos es un humanista. Es un hombre racional, que cree en el progreso del ser humano. Como él lo dice en el libro: "para conservar la belleza de este planeta. Por lo tanto es un hombre también optimista, que piensa que es posible vivir en una sociedad mejor, con iguales oportunidades para todos; con mejores oportunidades para todos. Una sociedad donde el hombre y la mujer sean respetados por lo que son y no por lo que tienen. A ratos en esta sociedad pensamos que lo importante es tener y tener y tener más bienes materiales y nos olvidamos que lo importantes es gozar de las bellezas de la vida.

-En ese sentido, ¿cuál es el mayor legado que ha dejado Carlos Fuentes?

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El principal legado respecto de los ideales que él tenía tiene que ver con la convicción de que la democracia es un proceso y se perfecciona día a día; que la economía debe estar al servicio del hombre y no el hombre ser un esclavo de la economía y que por tanto la economía debe de tener algunos tipos de regulaciones en toda sociedad para que cumpla la función que está llamada a tener. Y finalmente, para que el hombre día a día expanda las fronteras culturales que son posibles que estén al alcance de todos. Porque definitivamente lo que permanece de una sociedad es el tipo de cultura y civilización que es capaz de tener. A ratos nos confundimos y pensamos que lo que importan es el poder temporal y no el poder permanente de la palabra. Como dijo muy bien Carlos Fuentes: "el escritor tiene una vida finita -porque el escritor como todo ser humano muere- pero el lector tiene una vida permanente".

-Y usted que ha encabezado un proyecto de gobierno con esas vocaciones, ¿cuál será una llave para que ese tipo de modelos penetren en más países de América Latina?

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Ésa es una pregunta muy amplia que merece una respuesta más amplia. Parte de esa respuesta espero ofrecerla mañana en la Cátedra Julio Cortázar. En la que quiero plantear cuáles son los desafíos para América Latina. Pero diría que el tema fundamental en muchos de nuestros países es cómo fortalecemos la democracia; cómo somos capaces de dar cuenta de las nuevas exigencias de los nuevos sectores medios que están surgiendo en nuestros países y por lo tanto cómo somos capaces de satisfacer estas nuevas demandas. Y eso requiere esfuerzos y políticas nuevas.

-Hoy España vive una gran crisis y mira hacia América Latina...

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Claro, ha cambiado también el mundo. Tuve el privilegio de dictar la cátedra Cortázar en 1998. Es otro mundo muy distinto de la Cátedra Cortázar que dictaré mañana.

-¿Pero es un espejismo o es real que sea Latinoamérica la que tienda una mano a España?

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Creo que América Latina está en una situación distinta. Es percibida por el mudo en una situación distinta y por lo tanto no me cabe ninguna duda de que a la larga habrá un cuadro político muy distinto entre las relaciones entre América Latina y España.

-¿Y cómo vislumbra ese futuro para América Latina?

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Si hacemos las cosas que hay que hacer y las hacemos bien, el futuro es promisorio. Pasamos por un momento estelar de América Latina. Lo importante es aprovecharlo con visión de futuro.

EL DATO

La cátedra de Lagos


Este mediodía Ricardo Lagos dictará la Cátedra Julio Cortázar, con la conferencia "América Latina hoy. Desafíos después de la crisis". El presentador será Federico Reyes Heróles. La cita es en el Paraninfo Enrique Díaz de León, Juárez No. 975, zona Centro lunes 26 de noviembre a las 12:00 horas. Entrada libre.

EL INFORMADOR / JUAN LEVID
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