Cultura

La Catrina va para Paco Calderón

El homenajeado compartió sus experiencias de vida e instó a los jóvenes a luchas por sus convicciones y aprender más

GUADALAJARA, JALISCO (06/DIC/2015).- Paco Calderón recibió La Catrina, como acto de clausura del Encuentro Nacional de Caricatura e Historieta. En el acto estuvieron presentes Marisol Schulz, directora de la FIL, Santoyo Mercado, organizadora del encuentro, Tonatiuh Bravo Padilla, rector de la UdeG, Raúl Padilla López, presidente de la FIL, Ernesto Flores Gallo, rector del CUAAD y Salvador del Toro, amigo del homenajeado.

El homenajeado brindó un mensaje a los jóvenes asistentes, en su mayoría estudiantes del CUAAD: “Miren muchachos, esta Feria Internacional del Libro están dedicadas a ustedes: de eso se trata, de llamarlos a ustedes al mundo de la lectura”.

Calderón se refirió también a su padre, quien recibiera el Premio Nacional de Economía: “Se hizo a sí mismo gracias a la excelencia académica”. De la educación que éste a su vez le inculcó, bromeó sobre los malos resultados que obtenía. Al revisar sus apuntes no encontró más que “monitos”. Exhortó que mejorara su promedio, con la promesa de un viaje a Inglaterra. El entonces joven Paco Calderón se esforzó y visitó las Islas Británicas: “Inglaterra me cambió la vida: me topé con los grandes caricaturistas ingleses”

Pero más allá de la imagen, el periplo también le ofreció conocer el talento de la palabra y la expresión de ideas: “Di con los grandes escritores ingleses: Aldous Huxley, que plantea un futuro terrible si nos dejamos ir por todas las mieles del liberalismo, en donde se educa y se cría a las personas para que unos sean superiores y otros inferiores. Otro gran escritor inglés que a mí me forjó fue George Orwell, autor de ‘1984’. Allí se creó el famoso Big Brother; no fue Televisa... Orwell denuncia los peligros del socialismo. Pero ninguno es fantasía, son libros que denuncian peligros reales”. En “Rebelión en la granja” Orwell también habla de la libertad de expresión, comentó Calderón.

Invitó a los jóvenes a la reflexión: “Piensen por sí mismos”. Sobre su obra y sus objetivos, afirmó: “Yo hago esos cartones no para convencerlos de lo que yo pienso, sino para dejar claro lo que yo pienso. Que sirva de contrapeso para que puedan contrastar y forjar su propio criterio”.
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