Cultura
Juan Villoro comparte sus experiencias literarias con jóvenes
El escritor ofreció una charla ante aproximadamente 100 estudiantes, a la que definió como “motivante y extraordinaria”
GUADALAJARA, JALISCO (13/MAY/2010).-El escritor y periodista Juan Villoro ofreció una charla a los alumnos del Colegio de Estudios Científicos y Tecnológicos del Estado de Jalisco (CECYTEJ) del plantel El Zalate, en la que compartió sus experiencias sobre el mundo literario.
Villoro comentó que una de las más grandes pasiones con las que cuenta en la actualidad es la lectura, aunque admitió que a ella llegó con retraso. “En mi infancia y buena parte de mi adolescencia no leí libros. Soy un lector tardío, por eso me parece tan importante comunicar el tema de la lectura porque yo me tardé muchísimo en llegar a ella. Leía libros por obligación en la escuela, pero nada más, no fue sino durante mis vacaciones entre la secundaria y la prepa, cuando tenía 15 años, que leí mi primer libro verdaderamente con gusto”.
El escritor indicó que dicho texto era la obra de José Agustín, De perfil, la cual llegó a sus manos gracias a la recomendación de un amigo. “Me sorprendió que mi amigo estuviera interesado en la literatura y me llamó la atención leerlo. Como estaba escrito en primera persona mi amigo y yo pensábamos que eran las confesiones auténticas de un joven mexicano, pensábamos que todo lo que estaba escrito era verdadero, porque no sabíamos que se podía escribir inventando, que uno puede hacer una novela, es decir la historia de alguien, que podría ser real pero no necesariamente lo es”.
El también periodista explicó que antes de leer, todas las personas tienen interés por las historias “cuando algo nos gusta, cuando algo nos interesa, cuando algo nos ocupa lo primero que decimos es ‘se lo voy a contar a fulano’, tenemos que contarle a nuestro mejor amigo lo que nos pasa”.
Además, Juan Villoro aseguró que todos los hechos de la vida cotidiana pueden volverse más interesantes a través de la palabra “todas las actividades se vuelven más emotivas si las podemos contar. Muchas veces nos ilusionamos o nos enamoramos a través de lo que oímos, a través de lo que la gente lleva dentro y puede decir con las palabras”.
La lectura como hecho vivo
Juan Villoro definió su experiencia con los jóvenes del CECYTEJ como algo “motivante y extraordinario”, puesto que no sólo los estudiantes que participaron en el evento redescubrieron la literatura.
El escritor explicó que disfruta este tipo de encuentros porque en ellos se desmitifica a los libros, los cuales suelen ser considerados como pertenecientes a horizontes lejanos, pedantes o académicos. “Resulta que los libros pueden estar cerca de nosotros porque son como vampiros que se alimentan de vida, y compartir esta experiencia con los jóvenes es el acto de compartir la lectura como un hecho vivo”.
Para finalizar el autor de El libro salvaje aseguró que es muy importante que se lleven a cabo más iniciativas de este tipo en el país para contrarrestar las situaciones negativas que se suscitan. “Creo que es muy importante en el momento que estamos atravesando en el país es necesario reforzar todo lo que es la cultura y la educación para construir una esperanza que nos permita salir adelante”.
EL INFORMADOR / OMAR GÓMEZ
Villoro comentó que una de las más grandes pasiones con las que cuenta en la actualidad es la lectura, aunque admitió que a ella llegó con retraso. “En mi infancia y buena parte de mi adolescencia no leí libros. Soy un lector tardío, por eso me parece tan importante comunicar el tema de la lectura porque yo me tardé muchísimo en llegar a ella. Leía libros por obligación en la escuela, pero nada más, no fue sino durante mis vacaciones entre la secundaria y la prepa, cuando tenía 15 años, que leí mi primer libro verdaderamente con gusto”.
El escritor indicó que dicho texto era la obra de José Agustín, De perfil, la cual llegó a sus manos gracias a la recomendación de un amigo. “Me sorprendió que mi amigo estuviera interesado en la literatura y me llamó la atención leerlo. Como estaba escrito en primera persona mi amigo y yo pensábamos que eran las confesiones auténticas de un joven mexicano, pensábamos que todo lo que estaba escrito era verdadero, porque no sabíamos que se podía escribir inventando, que uno puede hacer una novela, es decir la historia de alguien, que podría ser real pero no necesariamente lo es”.
El también periodista explicó que antes de leer, todas las personas tienen interés por las historias “cuando algo nos gusta, cuando algo nos interesa, cuando algo nos ocupa lo primero que decimos es ‘se lo voy a contar a fulano’, tenemos que contarle a nuestro mejor amigo lo que nos pasa”.
Además, Juan Villoro aseguró que todos los hechos de la vida cotidiana pueden volverse más interesantes a través de la palabra “todas las actividades se vuelven más emotivas si las podemos contar. Muchas veces nos ilusionamos o nos enamoramos a través de lo que oímos, a través de lo que la gente lleva dentro y puede decir con las palabras”.
La lectura como hecho vivo
Juan Villoro definió su experiencia con los jóvenes del CECYTEJ como algo “motivante y extraordinario”, puesto que no sólo los estudiantes que participaron en el evento redescubrieron la literatura.
El escritor explicó que disfruta este tipo de encuentros porque en ellos se desmitifica a los libros, los cuales suelen ser considerados como pertenecientes a horizontes lejanos, pedantes o académicos. “Resulta que los libros pueden estar cerca de nosotros porque son como vampiros que se alimentan de vida, y compartir esta experiencia con los jóvenes es el acto de compartir la lectura como un hecho vivo”.
Para finalizar el autor de El libro salvaje aseguró que es muy importante que se lleven a cabo más iniciativas de este tipo en el país para contrarrestar las situaciones negativas que se suscitan. “Creo que es muy importante en el momento que estamos atravesando en el país es necesario reforzar todo lo que es la cultura y la educación para construir una esperanza que nos permita salir adelante”.
EL INFORMADOR / OMAR GÓMEZ
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