Cultura
Jacinto Benavente, fuerte crítico de la doble moral de burguesía española
El dramaturgo y Premio Nobel de Literatura escribió más de 200 libros en donde expresa su punto de vista con una clara intención burlesca
CIUDAD DE MÉXICO (11/AGO/2012).- Premio Nobel de Literatura en 1922, el dramaturgo español Jacinto Benavente, fue autor de más de 200 comedias y tragedias en las que criticó la doble moral de la burguesía española, nació en Madrid, el 12 de agosto de 1866 y falleció el 14 de julio de 1954.
Hijo de Venancia Martínez y Mariano Benavente, además de dedicarse a la literatura, fue académico y periodista; estudió en el Instituto de San Isidoro, lugar en el que creó sus primeros textos dedicados a obras para títeres, posteriormente, debido a la presión de sus padres, incursionó en la carrera de Leyes, en la Universidad de Madrid en 1882.
De acuerdo con sus biógrafos, a la muerte de su padre, dejó sus estudios y viajó por Inglaterra, Francia y Rusia, durante este tiempo se adentró al mundo de la literatura y cinco años más tarde se unió a una compañía de teatro, como actor.
Sus primeras obras se dieron a conocer en 1893 cuando tenía 27 años de edad, su primer texto dramático fue "El Nido Ajeno", que permitió vislumbrar una profunda renovación del teatro en castellano, aunque esta creación fue ignorada por los críticos y se le aconsejó seguir la línea de obras de gran éxito, en lugar de comprometerse con una producción exigente.
Su trabajo se destaca por la introducción de referentes europeos modernos en el teatro español, más tarde con su obra "Gente conocida", logró emprender una carrera que le permitió posicionarse entre los mejores dramaturgos de la época.
Entre sus aportaciones destaca la introducción de una gracia inteligente que recorre la sátira social y diálogos chispeantes y muy dinámicos.
Más tarde volvió a llamar la atención de los círculos teatrales españoles, con la obra crítica "Cartas de mujeres".
Benavente perteneció al círculo de escritores modernistas de su época, al que se denominó Generación del 98, el cual tenía como objetivo revivir el prestigio de España, después de la Guerra Civil (1936-39).
En su faceta como periodista, fue editor de la revista oficial del grupo "Vida Literaria" y colaboró en el periódico "El Imparcial", de Madrid.
En su trayectoria como dramaturgo, sus obras fueron evolucionando, tornándose más apasionadas y les imprimió aspectos fantásticos y surrealistas, caracterizadas por un estilo poco convencional, convirtiéndolo en uno de los escritores más populares de su tiempo.
A decir de los expertos, en sus más de 200 obras, entre el realismo y el costumbrismo, sostuvo una inteligente batalla irónica contra la frivolidad y la doble moral de la aristocracia y la burguesía españolas.
Fue considerado por muchos críticos como anormal, intrascendente y superficial; su estilo literario se identifica con el modernismo, pero para algunos especialista no es un autor clasificable, más bien lo consideran un comediante que otorgó al teatro español de su tiempo una modernidad de la que hasta ese momento carecía.
En 1922 fue galardonado con el Premio Nobel de Literatura por su contribución a la renovación del teatro español. Posteriormente, viajó por América con una compañía de teatro que representó sus obras.
Otra vertiente cultivada por el autor fue el drama rural, en obras que contrastan frontalmente con el grueso de su producción, lo cual se puede apreciar en sus creaciones "Señora ama" y "La malquerida".
En esta faceta proyectó una intensidad trágica, dramas que se desarrollaron en un medio aldeano asfixiante y brutal, en el que palpita un clima de carácter naturalista.
También escribió versos y prosa en los que el escritor y periodista se tornó perspicaz psicólogo de una sociedad a la que ironizó con un lenguaje de perfecta factura y clara intención burlesca.
En su última etapa de vida literaria, escribió algunos obras de teatro infantil, cuyo tono poético y fina ironía cristalizan en piezas como "El príncipe que todo lo aprendió en los libros" o "La novia de nieve", otro título importante de su producción durante este período es "Pepa Doncel".
Jacinto Benavente falleció el 14 de julio de 1954 y dejó una vasta obra que continúa impactando e influenciando a los dramaturgos contemporáneos.
Hijo de Venancia Martínez y Mariano Benavente, además de dedicarse a la literatura, fue académico y periodista; estudió en el Instituto de San Isidoro, lugar en el que creó sus primeros textos dedicados a obras para títeres, posteriormente, debido a la presión de sus padres, incursionó en la carrera de Leyes, en la Universidad de Madrid en 1882.
De acuerdo con sus biógrafos, a la muerte de su padre, dejó sus estudios y viajó por Inglaterra, Francia y Rusia, durante este tiempo se adentró al mundo de la literatura y cinco años más tarde se unió a una compañía de teatro, como actor.
Sus primeras obras se dieron a conocer en 1893 cuando tenía 27 años de edad, su primer texto dramático fue "El Nido Ajeno", que permitió vislumbrar una profunda renovación del teatro en castellano, aunque esta creación fue ignorada por los críticos y se le aconsejó seguir la línea de obras de gran éxito, en lugar de comprometerse con una producción exigente.
Su trabajo se destaca por la introducción de referentes europeos modernos en el teatro español, más tarde con su obra "Gente conocida", logró emprender una carrera que le permitió posicionarse entre los mejores dramaturgos de la época.
Entre sus aportaciones destaca la introducción de una gracia inteligente que recorre la sátira social y diálogos chispeantes y muy dinámicos.
Más tarde volvió a llamar la atención de los círculos teatrales españoles, con la obra crítica "Cartas de mujeres".
Benavente perteneció al círculo de escritores modernistas de su época, al que se denominó Generación del 98, el cual tenía como objetivo revivir el prestigio de España, después de la Guerra Civil (1936-39).
En su faceta como periodista, fue editor de la revista oficial del grupo "Vida Literaria" y colaboró en el periódico "El Imparcial", de Madrid.
En su trayectoria como dramaturgo, sus obras fueron evolucionando, tornándose más apasionadas y les imprimió aspectos fantásticos y surrealistas, caracterizadas por un estilo poco convencional, convirtiéndolo en uno de los escritores más populares de su tiempo.
A decir de los expertos, en sus más de 200 obras, entre el realismo y el costumbrismo, sostuvo una inteligente batalla irónica contra la frivolidad y la doble moral de la aristocracia y la burguesía españolas.
Fue considerado por muchos críticos como anormal, intrascendente y superficial; su estilo literario se identifica con el modernismo, pero para algunos especialista no es un autor clasificable, más bien lo consideran un comediante que otorgó al teatro español de su tiempo una modernidad de la que hasta ese momento carecía.
En 1922 fue galardonado con el Premio Nobel de Literatura por su contribución a la renovación del teatro español. Posteriormente, viajó por América con una compañía de teatro que representó sus obras.
Otra vertiente cultivada por el autor fue el drama rural, en obras que contrastan frontalmente con el grueso de su producción, lo cual se puede apreciar en sus creaciones "Señora ama" y "La malquerida".
En esta faceta proyectó una intensidad trágica, dramas que se desarrollaron en un medio aldeano asfixiante y brutal, en el que palpita un clima de carácter naturalista.
También escribió versos y prosa en los que el escritor y periodista se tornó perspicaz psicólogo de una sociedad a la que ironizó con un lenguaje de perfecta factura y clara intención burlesca.
En su última etapa de vida literaria, escribió algunos obras de teatro infantil, cuyo tono poético y fina ironía cristalizan en piezas como "El príncipe que todo lo aprendió en los libros" o "La novia de nieve", otro título importante de su producción durante este período es "Pepa Doncel".
Jacinto Benavente falleció el 14 de julio de 1954 y dejó una vasta obra que continúa impactando e influenciando a los dramaturgos contemporáneos.
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