Cultura
Isabel Allende duda de la fuerza del realismo mágico
La chilena asegura que actualmente ese género no es exclusivo de América Latina y hay muchos jóvenes escritores que lo aborrecen
LIMA, PERÚ.- La escritora chilena
Isabel Allende dijo que el realismo mágico "ya no se usa como sal y pimienta" en Latinoamérica y afirmó que este género literario no es una exclusividad de la región, según una entrevista publicada hoy por el diario limeño El Comercio.
"Hubo una época en que (el realismo mágico) se le echaba a todo. Ahora no. Hay una generación de jóvenes escritores que aborrecen el realismo mágico y que se han desprendido de eso completamente. La realidad de América Latina también ha cambiado", dijo la autora de "La casa de los espíritus".
Para Isabel Allende, el realismo mágico no es una exclusividad de Latinoamérica, ya que se ve en la literatura india, en las sagas escandinavas, en la poesía africana y en los escritores de Alabama.
La escritora también confesó que echa de menos la "inocencia" con la que escribía sus primeras novelas, ya que actualmente y tras una larga carrera se ha convertido en una persona muy crítica de sí misma.
"Estoy tratando de hacer un esfuerzo por escribir con toda soltura y corregir después. Echar todo lo que venga, y solo después editar y corregir. De otra forma me estoy poniendo freno antes de empezar", acotó.
Por otro lado, la autora de "Eva Luna" defendió el papel de los sueños en su narrativa, al recordar que ella se crió en un ambiente familiar donde se hablaba tanto de sueños como pesadillas.
"El mundo de los sueños nos informa mucho sobre la realidad. En los sueños se me resuelven cosas, suenan como campanas de alerta que me permiten fijarme en algo que de otra forma no atendería", precisó.
Por ello, Isabel Allende no tuvo pudor en hacer público un sueño en el que aparecía el actor español Antonio Banderas desnudo sobre una tortilla y cubierto de guacamole (palta). "¡Es para contárselo a todo el mundo", enfatizó la escritora, que confesó que tiene otro repertorio de sueños que nunca confesaría.
Nacida en Lima, ciudad donde se crió hasta los tres años, Isabel Allende reconoció que se identifica inconscientemente con sus personajes, criticó la actitud en Latinoamérica contra la gente que tiene éxito, especialmente contra las mujeres, y admitió que ella no tiene patria y es capaz de volver a empezar una vida en cualquier lugar del mundo.
Al comentar sobre la posibilidad de que Keiko Fujimori -hija del ex presidente peruano Alberto Fujimori, condenado a 25 años de prisión por violación a los derechos humanos- se presente como candidata presidencial en los comicios de 2011, Isabel Allende dijo que "la gente tiene una memoria muy rara".
"El puro hecho de que alguien pueda presentarse como candidata por el apellido demuestra que la gente se olvida muy rápido de las cosas. Mira lo que pasó con Pinochet (ex dictador chileno Augusto Pinochet), que se murió tranquilamente en su cama el día de los derechos humanos. ¡Mira que ironía!", subrayó.
"Hubo una época en que (el realismo mágico) se le echaba a todo. Ahora no. Hay una generación de jóvenes escritores que aborrecen el realismo mágico y que se han desprendido de eso completamente. La realidad de América Latina también ha cambiado", dijo la autora de "La casa de los espíritus".
Para Isabel Allende, el realismo mágico no es una exclusividad de Latinoamérica, ya que se ve en la literatura india, en las sagas escandinavas, en la poesía africana y en los escritores de Alabama.
La escritora también confesó que echa de menos la "inocencia" con la que escribía sus primeras novelas, ya que actualmente y tras una larga carrera se ha convertido en una persona muy crítica de sí misma.
"Estoy tratando de hacer un esfuerzo por escribir con toda soltura y corregir después. Echar todo lo que venga, y solo después editar y corregir. De otra forma me estoy poniendo freno antes de empezar", acotó.
Por otro lado, la autora de "Eva Luna" defendió el papel de los sueños en su narrativa, al recordar que ella se crió en un ambiente familiar donde se hablaba tanto de sueños como pesadillas.
"El mundo de los sueños nos informa mucho sobre la realidad. En los sueños se me resuelven cosas, suenan como campanas de alerta que me permiten fijarme en algo que de otra forma no atendería", precisó.
Por ello, Isabel Allende no tuvo pudor en hacer público un sueño en el que aparecía el actor español Antonio Banderas desnudo sobre una tortilla y cubierto de guacamole (palta). "¡Es para contárselo a todo el mundo", enfatizó la escritora, que confesó que tiene otro repertorio de sueños que nunca confesaría.
Nacida en Lima, ciudad donde se crió hasta los tres años, Isabel Allende reconoció que se identifica inconscientemente con sus personajes, criticó la actitud en Latinoamérica contra la gente que tiene éxito, especialmente contra las mujeres, y admitió que ella no tiene patria y es capaz de volver a empezar una vida en cualquier lugar del mundo.
Al comentar sobre la posibilidad de que Keiko Fujimori -hija del ex presidente peruano Alberto Fujimori, condenado a 25 años de prisión por violación a los derechos humanos- se presente como candidata presidencial en los comicios de 2011, Isabel Allende dijo que "la gente tiene una memoria muy rara".
"El puro hecho de que alguien pueda presentarse como candidata por el apellido demuestra que la gente se olvida muy rápido de las cosas. Mira lo que pasó con Pinochet (ex dictador chileno Augusto Pinochet), que se murió tranquilamente en su cama el día de los derechos humanos. ¡Mira que ironía!", subrayó.
Síguenos en